La AFA le avisó a Moyano que no anulará el penal ante Racing
El Tribunal de Disciplina no aprobó el pedido de la dirigencia de Independiente de anular la acción que le dio el triunfo a la Academia en el clásico de Avellaneda.
El reclamo entró en la AFA hace una semana. Luego del escandaloso arbitraje de Mauro Vigliano en el clásico de Avellaneda, los dirigentes de Independiente enviaron a la AFA un pedido para que se anule el penal que el juez cobró al advertir una supuesta falta de Sergio Barreto a Iván Maggi que no existió. Un penal que Enzo Copetti se encargó de convertir sobre la hora para darle el triunfo a Racing por 1-0. El presidente del Rojo, Hugo Moyano, y el secretario general, Héctor Maldonado, elevaron un pedido ante la casa madre del fútbol argentino para que se anule esa acción, algo que, como era de esperarse, finalmente no sucederá.
Claudio Tapia, máxima autoridad de la AFA, ya le avisó a Moyano que no hay vuelta atrás. Fue el Tribunal de Disciplina el que se encargó de rechazar el pedido del Rojo luego de una votación. Si bien la dirigencia había analizado la posibilidad de elevar el tema ante la FIFA, esa opción quedó descartada y todo quedará en la nada. El reclamo había sido incluido en la página 3 del boletín 5.901 de la AFA, bajo el número de expediente 84.977.
"No hay ninguna conspiración contra Independiente", dijo Federico Beligoy luego del clásico. El director nacional de arbitraje decidió parar a Vigliano por sus errores en el partido entre Racing e Independiente. "Lo que pasó fue lamentable, hubo libertad para pegar y todo culminó con un penal vergonzoso. Lo de los arbitrajes ya produce un agotamiento. ¿Qué pienso de Vigliano? Pobrecito...", vociferó un indignado Yoyo Maldonado. "Habrá tenido miles de razones para dirigir así", había manifestado Pablo Moyano, vicepresidente del Rojo.
Los abogados de Independiente habían elaborado un puntilloso informe que incluía antecedentes de casos similares en los que los reclamos resultaron favorables a los clubes perjudicados en otros países. La dirigencia también llegó a analizar la posibilidad de editar un video con fallos desfavorables que el Rojo sufrió en los últimos tiempos. Moyano intuía que las posibilidades de que el pedido pudiera prosperar eran muy pocas, pero quería sentar un precedente y exponer el malestar que existía en la institución. La calentura persiste, pero el clásico, que se jugó el 10 de abril, se terminó con este fallo.
