El Reino Unido identificó 30 casos raros de coágulos sobre más de 18 millones de vacunas de AstraZeneca aplicadas
Si bien los casos son mayores a los informados en un primer balance, los expertos británicos de salud sostienen que son ampliamente superiores los beneficios que cualquier riesgo adverso
El país, que también mostró 4.479 nuevos contagios, lo que eleva el total de siete días a casi 32.000, un 16,7% menos que en los siete días anteriores, ya tiene 31,1 millones de personas con al menos una dosis de la vacuna Covid y 4,5 millones que ya han recibido las dos dosis necesarias para estar completamente inmunizados.
Con este balance epidemiológico, los reguladores británicos anunciaron el jueves que han identificado 30 casos de eventos raros de coágulos de sangre después del uso de la vacuna AstraZeneca contra el COVID-19, 25 más de los que la agencia informó anteriormente.
La Agencia Reguladora de Medicamentos y Productos Sanitarios (MHRA) también señalo en un comunicado oficial que no había recibido tales situaciones de eventos de coagulación luego del uso de la vacuna fabricada por BioNTech y Pfizer .
Según los funcionarios de salud, que tuvieron a cargo este análisis, agregaron que creen que los beneficios de la vacuna en la prevención de Covid-19 superan con creces cualquier posible riesgo de coágulos sanguíneos.
El anuncio del regulador inglés, sale a difusión cuando varios países europeos siguen restringiendo el uso de la vacuna AstraZeneca y la universidad de Oxford, y mientras otros han decidido reanudar su utilización, a pesar que en continúen las investigaciones sobre informes de coágulos de sangre raros y, a veces, graves.
El 18 de marzo, el regulador de medicamentos del Reino Unido había avisado que tenía localizado 5 casos de un coágulo sanguíneo cerebral raro entre los 11 millones de inyecciones administradas.
Ayer calculó, a partir de un nuevo recuento, 22 informes de trombosis del seno venoso cerebral, una enfermedad de la coagulación cerebral extremadamente rara, y 8 informes de otros eventos de coagulación asociados con niveles bajos de plaquetas de un total de 18,1 millones de dosis administradas.
Lejos de una nueva ola
¿Podría el Reino Unido, que está en una etapa de desescalada gradual, enfrentar una nueva ola de la epidemia de Covid-19? Si bien los datos actuales son alentadores, el primer ministro Boris Johnson se maneja con cautela, a pesar de la gran campaña de vacunación que ha permitido que un 60% de la población adulta tenga una primera dosis.
No obstante, el gobierno inglés cree que es poco probable que experimente otra tercera ola en la escala de lo que actualmente está golpeando a Europa.
El Reino Unido es el país europeo más afligido por el virus, con casi 130.000 muertes por la enfermedad. Algunas noticias son alentadoras, sin embargo, por ejemplo, el domingo no se registraron muertes por Covid-19 en Londres y se reportaron un total de 19 en el resto del país.
En Inglaterra, las escuelas reabrieron el 8 de marzo. Desde el lunes, tras el inicio del duro encierro en enero, se ha iniciado una nueva etapa de flexibilización progresiva de las restricciones con la autorización otorgada a amigos y familiares para reunirse al aire libre así como la reanudación de determinadas actividades deportivas.
La situación inglesa es observada desde la realidad de los vecinos de la Unión Europea. Linda Bauld, profesora de salud pública en la Universidad de Edimburgo, dijo a la prensa inglesa: “Creo que estamos en una posición muy diferente por dos razones principales: la primera es que están lidiando con el B117 (variante) que lamentablemente exportamos a ellos y nos causó grandes desafíos, todavía lo hace, pero mucho más en el invierno “.
“Más importante aún, el 11,6% de los ciudadanos de la UE en promedio han recibido su primera dosis de la vacuna, es decir, todas las personas, no solo todos los adultos, en comparación con más del 40% de las personas en el Reino Unido, por lo que puede ver que están en un lugar diferente al nuestro “, agregó.
El espejo francés
El primer ministro inglés, Boris Johnson, se encargó de expresar su preocupación por la situación sanitaria en Francia, que podría tener repercusiones en Gran Bretaña.
Frente a la prensa británica reunida virtualmente, Boris Johnson expresó su preocupación por la tensa situación en Francia. Tras las nuevas medidas de restricción anunciadas por Emmanuel Macron este miércoles, el primer ministro británico se sinceró sobre las posibles consecuencias de la explosión de casos positivos de COVID-19 en Francia y su gestión.
“Me temo que pueden ver lo que está pasando en Francia ... Es muy triste en realidad, es muy, muy triste”, sostuvo. Y prosiguió: “cuando circula en Francia y de forma virulenta, dos o tres semanas después, pasa con nosotros”.