El Atlético se queda a medias
El equipo rojiblanco empató ante el Betis y acusó las numerosas bajas que tuvo. Correa y Vitolo tuvieron el triunfo en los instantes finales.
El Atlético consiguió pronto lo que buscaba. A los cinco minutos se adelantó en el marcador gracias a un tanto de Carrasco tras un balón que persiguió Correa y acabó en las botas del belga, quien con tranquilidad hizo el 0-1. El equipo de Simeone, con la baja de última hora de Lemar, causó peligro cada vez que llegaba al área de Bravo. Arrancó el Atlético con fe, con fuerza, con determinación, metiéndole ritmo al encuentro, con Correa como jugador más adelantado. El Betis, por su parte, puso en el terreno de juego a futbolistas bien dotados técnicamente, con Joaquín a un lado, Ruibal en el otro, con Tello, Fekir y Canales buscando las cosquillas a la defensa rojiblanca. Sin un 9 fijo, el Betis también llevó peligro cada vez que se acercó a las inmediaciones del área de Oblak.
El Atlético tuvo que ponerse de nuevo manos a la obra, con Correa y Carrasco como los jugadores más incisivos, uno en punta y el otro entrando por la banda izquierda. El encuentro entró en una fase en el que hubo intercambio de golpes. El Atlético dio la impresión de llevar más peligro y pudo marcar por una colada de Correa que Álex Moreno sacó de milagro. Pero el Betis también tuvo su ocasión con una llegada de Emerson y con Carrasco en plan salvador en última instancia. Y a renglón seguido el belga empalmó un balón fuera por muy poco. Sin Luis Suárez ni Borja Iglesias, sin jugadores que intimidan, ambos equipos mostraban peligro en las inmediaciones del área. Un partido raro en este sentido.
El Betis tuvo sus mejores minutos y lo hizo jugando a la contra, con espacios por delante. El conjunto de Pellegrini siguió haciendo daño al Atlético con la velocidad de Fekir. En una de sus llegadas pudo hacer el Betis el segundo y ya antes Oblak había detenido un cabezazo de Emerson en jugada a balón parado. El conjunto local entendió las carencias rojiblancas de medio campo hacia adelante y se fue a por el partido. Lainez, recién entrado por Ruibal, puso a prueba de nuevo a Oblak, pero el esloveno mandó a córner.
El partido se le fue complicando al conjunto madrileño, que perdió el control del juego y no llegó a la portería de Bravo. En la recta final se lesionó Trippier y entró Vrsaljko, por lo que el Atlético acabó con un once lleno de jugadores suplentes. El equipo del Cholo apenas llegó a la portería rival, aunque tuvo en las botas de Correa el gol del triunfo en los últimos segundos pero Bravo sacó el remate. Incluso Vitolo pudo marcar en el último minuto. El conjunto madrileño tuvo que conformarse con el punto, a todas luces insuficiente.