Darmian y Achraf hacen que el Inter acaricie el Scudetto
El equipo de Conte sumó un trascendental triunfo ante el Verona en un partido plúmbeo que se decidió con una jugada entre los dos carrileros lombardos.
El
danés es el claro ejemplo de que a Conte le ha funcionado el palo y la
zanahoria. Encadena seis partidos seguidos como titular, después de que
en enero se le buscara destino. Pero tanto él, en el campo, como el
técnico en su planteamiento, han encontrado un término medio con Lautaro
como cómplice. El argentino es exigido más en defensa, acostado al
sector izquierdo cuando al Inter le toca esperar, para equilibrar la
falta de vigor defensivo de Eriksen. Esfuerzo, mucho esfuerzo,
pero durante el primer tiempo no hubo manera de alimentar a un Lukaku
que mantenía su particular duelo de lucha grecorromana con Magnani.
El Inter se estrellaba sin ningún vuelo por fuera ante un Verona que
esperaba para leer una debilidad del equipo de Conte y lanzarle una
dentellada.
Tras la pausa, solamente Lautaro parecía saltarse el guion. El argentino sorprendió a la contra al Verona con un eslalon en el 63’, pero su remate lo casó Silvestri con los pies.
Cinco minutos después Achraf hacía acto de presencia en el partido
mandando un libre directo al poste ante la mirada impotente de
Silvestri. Fue como el tañer de una campana. Conte introdujo a Alexis,
ya sin Eriksen en el campo, para retirar a Lautaro y el Inter acabó
estirándose. Barak había avisado, pero Achraf está decidido a que el Inter levante cuanto antes el título. El lateral se filtró, recibió en tres cuartos y habilitó a Darmian en el perfil contrario. Su remate batió a Cristante y fue como un resorte para Conte. El técnico de Lecce corrió eufórico por la banda para celebrar el gol partita
que le acerca inexorablemente al título. El Inter queda en cabeza con
13 puntos sobre el Milan, que juega el lunes, y acaricia el Scudetto.