Aguilera advierte una «desarmonía» entre la Policía y la Justicia
“Existe una desarmonía entre los órganos encargados de la persecución penal, pero hay que comprender que la actividad propia de la Policía no sólo es la persecución, entonces, lo que nos toca primero son reuniones que permitan comprender el fenómeno delictivo de la violencia”, dijo Aguilera a Unitel.
El jefe policial indicó que la "descordinación" entre esas instancias “delimita y desactiva” el impulso de las fuerzas del orden para la protección de las víctimas de violencia.
Aguilera anunció que otro de los factores que impide la concienciación sobre la violencia se debe a la “alta rotación” del personal que se dispone, hecho que puede generar interpretaciones distintas sobre un acontecimiento durante el trabajo conjunto.
“Debido a los estamentos y la alta rotación del personal, estos fenómenos no son internalizados, no sólo corresponde a la Fiscalía y a la Policía, incluso a los médicos forenses que de alguna manera desvalorizan una lesión, calificándola de inferior y obligan a no aplicar medidas cautelares”, precisó.
El domingo, Marcelino Martínez Arenas victimó a su expareja Wilma Zurita Flores, en la puerta de un supermercado de Santa Cruz. El feminicida logró evadir la justicia semanas atrás, cuando un fiscal ordenó el cese a su detención por una denuncia anterior.