Agreden a jugadores del Schalke tras descender

Un centenar de aficionados del cuadro minero esperaban la llegada del autobús al Veltins Arena pasada la media noche para increpar, insultar e, incluso, atacar a los futbolistas.

José Carlos Menzel
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El descenso del Schalke, matemáticamente certificado tras la derrota por la mínima en su visita al Arminia Bielefeld, ha provocado una serie de altercados a la vuelta del equipo a la localidad de Gelsenkirchen. Tal y como informaron numerosos medios alemanes, alrededor de un centenar de aficionados del cuadro minero esperaban la llegada del autobús al Veltins Arena pasada la media noche para increpar, insultar e, incluso, atacar a miembros de la plantilla que, a priori, buscaron calmar a los enfurecidos hinchas tras el primer descenso desde 1991.

Vídeos en las redes sociales muestran escenas de lo más lamentables, en las que se puede apreciar a jugadores del Schalke huyendo de los fans. Los antidisturbios se vieron obligados a intervenir para que la ira no fuera más allá pero, siempre según medios alemanes, dos jugadores recibieron patadas y otros se vieron obligados a correr para evitar males mayores. Finalmente, se pudo evitar que los futbolistas terminasen heridos de gravedad. Sin embargo, el susto después de uno de los capítulos más negros en su historia no pudo ser mayor para los protagonistas del Schalke.

"A la llegada del equipo se produjeron increpaciones violentas", explicaron las fuerzas policiales en un comunicado. El club también emitió una nota de prensa en la que mostró su consternación tras lo ocurrido. "Se cruzaron límites que son innegociables para el Schalke 04. A pesar de toda frustración y rabia como consecuencia del descenso a la Bundesliga2, el club jamás aceptará que se ponga en peligro la integridad física de sus jugadores y empleados", subrayó el club blanquiazul, dejando claro que hará todo lo posible para identificar a los agresores.

“Nos dijeron en voz alta y clara que deberíamos sentir vergüenza y que todos los jugadores, que no fueran a estar aquí el año que viene, se marchasen inmediatamente. De no ser así, la vida se convertiría en un infierno para nosotros. Después nos lanzaron huevos. Luego estalló un petardo y se perdió el control de la situación por completo. Los aficionados nos atacaron. A partir de ese momento, lo único que hicimos fue correr. Teníamos miedo, puro miedo. No hice otra cosa que no fuera correr. Algunos terminamos recibiendo patadas y puñetazos. Estoy en shock y no sé cómo vamos a poder jugar los próximos partidos“, fue citado un jugador anónimo en la web alemana Sport1.

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