Roberto, ¡cómo juega Bélgica!
El técnico descartó a De Bruyne y Lukaku y los suplentes respondieron. Gran Vanaken y golazos de Batshuayi y Trossard. Oxígeno para la clasificación.
Aunque siempre necesita un timonel. En esta ocasión, llevaba el '17' a la espalda. Vanaken se la puso a Doku en el primer gol y después hizo el segundo. Entró desde la segunda línea para remachar un envío medido de Meunier. Con el triunfo casi decidido, los belgas respiraban, a la par que cada uno de sus avisos espantaban a los fantasmas del chasco checo. Trossard disparó fuera por centímetros tras regalo de Batshuayi. Antes de su gol, otro chutazo en alta definición, se colaron más virguerías de Doku. El asistente del primero hizo el cuarto, cómo no, a la carrera. Se la puso Praet, aunque tuvo todo el mérito. Algo se queda para Pavlovets, central de Bielorrusia y un espectador ante la explosividad del extremo belga.
Había tiempo para más. Doku tenía inyectado en sus piernas un veneno que garantiza su hueco en la próxima lista. Se la regaló a Trossard, otro al que la noche le regala un sinfín de méritos. Como los de Vanaken, que festejó el octavo de los suyos ya exhausto. ¿Dónde estaba el límite de esta Bélgica? Que la facilidad no esconda la importancia. Bélgica gana oxígeno, olvida el traspiés y ya mira con otra cara a Qatar. Roberto Martínez tiene mucho banquillo y cero dependencias.