La polémica del GP de Bahréin está más clara de lo que parece
Los pilotos sabían que podían utilizar el exterior de la pista para ganar tiempo, pero no para adelantar. Verstappen devolvió la posición a Hamilton.
"Se trató el viernes por la noche y se puso en práctica a partir del segundo entrenamiento libre: no se sancionaría exceder los límites de la pista para ganar tiempo por vuelta, pero sí cualquier maniobra que permita ganar una posición por fuera", precisa el australiano. "Teníamos a dos personas vigilando esa área durante toda la carrera. Todo se hizo según lo esperado. Él mismo intervino: "Red Bull recibió una advertencia inmediatamente, por mi parte por adelantar a otro coche fuera de la pista". De no hacer caso, Max "hubiera recibido una penalización de los comisarios, normalmente de tiempo, posiblemente cinco o diez segundos".
Tras el gran premio, circularon imágenes de Hamilton superando esos mismos límites y ganando tiempo con ello, pero no es sancionable porque no ganó posiciones, aunque en otras carreras sí se haya penalizado. Christian Horner, jefe del equipo austriaco, asumió la decisión: "Max adelantó, pero pisó fuera y debió ceder la posición. Después se quedó sin neumáticos". El propio Verstappen tampoco protestó airadamente, aunque sí reconoció por la radio a sus ingenieros: "¿Por qué no me habéis dejado marcharme? Podía haber logrado los cinco segundos fácilmente (para recibir la penalización). Prefiero perder así antes que ser segundo de esta manera".
"La decisión nos hizo ganar la carrera"
Aunque Wolff sí habló expresamente de confusión, obviando que las decisiones del director de carrera son vinculantes. "Todos estamos confundidos, al inicio de la carrera se nos dijo que no se sancionarían los límites de pista. Si toma esa decisión, es lo que hay, no hay nada que se pueda hacer. Max se fue largo, ganó ventaja fuera de la pista y devolvió la posición. Esa decisión nos hizo ganar la carrera", dijo el dirigente de Mercedes.