"El divorcio costó a Cristiano y al Real Madrid dos Champions"
El jugador y el club han salido perdiendo con la marcha del portugués en la consecución de títulos, potencial goleador individual y colectivo...
El detonante del deseo de Cristiano Ronaldo de volver al Real Madrid es una buena piedra de toque. En sus nueve temporadas en el Bernabéu, sólo una vez cayó eliminado en octavos de final de la Champions, la de su llegada (2009-2010). Las ocho siguientes ediciones de la máxima competición continental siempre tuvieron presente a CR7 al menos en semifinales. En sus tres años en Turín, lo más lejos que ha llegado ha sido a cuartos de final en su primera campaña (2018-2019). El Ajax fue su verdugo después de serlo también el del Madrid en octavos. Los dos últimos años, esa ronda ha sido un muro infranqueable para los bianconeri. El año pasado cayeron contra el Lyon y este con el Oporto. Ninguno de ellos rivales de la primera línea europea. Al Madrid también se le han resistido los octavos. El mencionado Ajax le apeó en 2019 y el Manchester City 2020. Esta temporada tiene oportunidad de resarcirse contra el Atalanta, en una eliminatoria encaminada para los blancos tras el 0-1 de la ida en Bérgamo.
Cristiano era un seguro de gol para el Real Madrid. El portugués marcó 450 goles en 438 partidos. Un promedio (1,027) superior a un tanto por partido propio de otra época. Sólo en la temporada de su debut no superó los 40 goles (marcó 33), y porque apenas pudo disputar 35 partidos. Marcaba un gol cada 84 minutos. En la Juventus su promedio baja a 0,76 goles por partido (92 en 121 apariciones), uno cada 113 minutos, según datos de SofaScore. De blanco fue máximo goleador en 12 competiciones, además de la Eurocopa 2012 con Portugal; de bianconeri, no ha sido capocannoniere en ninguna.
El equipo blanco fue una máquina de golear con CR7. El Madrid consiguió rebasar ligeramente la barrera de los 100 goles las dos temporadas anteriores al fichaje del astro del United. Con el portugués, los datos de dispararon a registros estratosféricos, con un pico 174 goles en los 58 partidos de la 2011-10. Un promedio clavado de tres tantos por encuentro que sólo bajó de 2,5 dos años. La producción blanca ha caído por debajo de los dos goles por partido. Esta temporada, sin ir más lejos, el promedio de los blancos es de 1,66 (58 goles en 35 partidos), su peor índice desde la 1999-2000.
Con Cristiano, el Madrid era capaz de marcar tres o más goles en casi la mitad de los partidos (252 de 519). En 72 encuentros marcó al menos cinco goles. Ahora solo es capaz de hacer tres goles en menos del 30% de los partidos (40 de 141) y ha llegado a cinco en apenas cuatro encuentros. Desde el 6-0 al Galatasaray en noviembre de 2019, el Madrid no ha sido capaz de marcar más de cuatro goles en un partido (71 partidos).
En el apartado de títulos, basta con ceñirse a sus dos últimas temporadas en el Real Madrid para advertir el contraste. En sus últimos dos años, Cristiano y los blancos ganaron dos Champions, una Liga, dos Mundiales de Clubes, dos Supercopas de Europa y una Supercopa de España. En la Juventus, en dos años y medio Cristiano ha ganado dos Scudettos y dos Supercopas de Italia. El Madrid ha conquistado una Liga y una Supercopa de España. La Liga está complicada esta temporada para madridistas y juventinos y ambos deben superar el escollo del Atalanta en la otra competición en la que quedan vivos: el Madrid en octavos de la Champions y la Juve en la final de la Copa de Italia.