'Bikinigate' en el torneo de vóley playa de Doha
La Federación Internacional intentó evitar el uso de bikinis durante el torneo en el país árabe, pero ha tenido que recular ante las amenazas de boicot de dos jugadoras.
Pero algunas
jugadoras han decidido no tragar con esta petición, más aún cuando las
temperaturas medias en esa zona del planeta y en esta época del año se
mueven entre los 18 y los 27 ºC. La pareja alemana formada por
Karla Borger y Julia Sude, una de las mejores del circuito, amenazó con
boicotear el evento si no se permitía el uso de vestimentas más acordes
al clima y finalmente la FIVB ha reculado. En un comunicado difundido por AFP el martes por la noche, anunciaron que no habrá ningún tipo de restricción en los atuendos: "Durante la competición en Doha, si los jugadores piden usar el atuendo habitual, serán libres de hacerlo".
Las jugadoras ya habían dado su aprobación al ente en una consulta previa para celebrar este torneo en Qatar. Borger, en declaraciones a Der Spiegel, aseguró que lo de ahora no es un capricho y que, si bien en tiempos normales no tendría problemas en "adaptarse", el "calor extremo" en Qatar hace "necesario" el bikini. La española Liliana Fernández también se pronunció al respecto antes del embrollo. "En principio no creo que tenga repercusión. Ya hemos competido en bastantes ocasiones, sobre todo cuando hace frío, con mallas largas y con camisetas con mangas. Otra cosa es que haya mucho calor en Doha y sí que nos afecte o, incluso, nos incomode". Por ahora el asunto parece zanjado.