Iker Casillas presenta, tirando de nostalgia, su nuevo 'coche fantástico'

Madrid, AS 
Iker Casillas ha pasado una última semana complicada. El repentino ingreso de Sara Carbonero, que tuvo que ser intervenida de urgencia en una clínica madrileña, hizo sonar todas las alarmas de una posible recaída de la presentadora, a la que se diagnosticó un tumor de ovarios en 2019.


Finalmente, se desmintió que la operación estuviera vinculada a esta enfermedad y la propia Sara comunicó en las redes sociales, a su salida del centro médico, que todo había ido bien y que se encontraba en plena forma. Pero las visitas inesperadas al hospital no son nunca agradables. Aunque ahora, Casillas ha dejado ver en Instagram que el mal trago ha pasado y que, afortunadamente, todo ha quedado en un susto.

El exguardameta publicó ayer una fotografía en la que aparece, pletórico, presumiendo de cochazo. Y no un cochazo cualquiera, sino un modelo que cualquier cinéfilo que se precie debería reconocer al instante: se trata del mítico Pontiac Trans Am, el vehículo inteligente que conducía el personaje de Michael Knight (interpretado por el actor David Hasselhoff) en la popular serie ochentera de 'El auto fantástico'.

En la imagen publicada, Casillas aparece sentado al volante y luciendo su mejor sonrisa. Y es que es imposible para cualquier amante de los coches clásicos no sentir una ilusión considerable ante la oportunidad de conducir un automóvil semejante, y que tantos buenos recuerdos ha impreso en la memoria de la cultura popular.

KITT y Michael Kinght, personajes de 'El coche fantástico'. 

"Aquellas series con las que crecimos. Llegaron los 80 y tanto 'El Equipo A' y 'El coche fantástico' eran series seguidas por miles y miles de españoles. Quién no ha dicho la famosa frase cogiendo muñeca en vilo y hablando al reloj: 'Kitt, te necesito!'", ha escrito Casillas en el post, "Era un adelantado a su tiempo Michael Knight, ya tenía este reloj tan moderno que te informa de los pasos que haces al día!!!"

Eso sí, el coche de Casillas no es exactamente el KITT original, que no está homologado para su circulación en nuestro país, sino una réplica. Y en este caso, uno de los detalles que ha traicionado la 'trampa' es el volante: el del modelo de Iker es redondo, mientras que la pieza del que conducía Knight carecía de parte superior.


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