Jovic, el último de la fila
El serbio hiló ante el Celta su duodécimo partido seguido sin jugar y el cuarto que ve entero desde el banquillo. Mariano se coloca por delante en la rotación.
Contra los vigueses, Jovic hiló su duodécimo partido seguido sin disputar ni un sólo minuto. Su última participación fue el 8 de noviembre en la derrota 4-1 contra el Valencia, y entró en el 83'. Desde entonces, se ha perdido cuatro partidos por Covid-19 y otros cuatro por una lesión de aductor. Hay que sumar otros cuatro a los que ha ido convocado, pero ha visto en su totalidad desde el banquillo.
Antes de esta mala racha, las cosas sólo iban un poco mejor. En los diez primeros encuentros jugados por el Madrid esta temporada participó en cuatro. Si bien es cierto que en tres de ellos fue titular, nunca llegó a completar los 90 minutos. En total, sumando los de todos los encuentros, acumula 208, el segundo que menos de los jugadores de campo de la plantilla por delante de Álvaro Odriozola (57) y por detrás de Éder Militao (224).
Se le agota el crédito
Jovic llegó con la idea de llenar parte del vacío goleador que dejó Cristiano Ronaldo, pero está lejos de ser la solución ofensiva que necesita el equipo y que sí era el portugués en la mayoría de partidos. Son dos los tantos que ha aportado en el año y medio que lleva en Madrid, muy lejos de los 27 que marcó en su última temporada como jugador del Eintracht Frankfurt y que animaron al conjunto blanco a gastarse 60 millones en su fichaje.
Zidane se ha encargado en numerosas ruedas de prensa de mostrar su confianza en el delantero de 23 años. Ha reconocido que fue él quien pidió su fichaje el curso pasado y, en la previa al partido contra el Celta, aseguró que va a contar con todos, borrando los rumores de una posible salida en este mercado invernal. "En un minuto pueden cambiar muchas cosas", acompañó la afirmación. Sin embargo, sus decisiones dan a entender que, hoy, Jovic es un futbolista prescindible.
El partido contra Osasuna en El Sadar de la próxima jornada (9 de enero a las 21:00) es más importante para Luka de lo que puede parecer. Fue allí donde marcó, hasta la fecha, su único gol fuera de casa con la camiseta blanca. Fue en febrero de 2019. Salió en el 88', pero aprovechó el poco tiempo que estuvo en el terreno de juego para marcar un gran tanto. Un zapatazo de volea desde dentro del área imparable para Herrera, portero rojillo.
Cada segundo de juego de aquí a final de temporada será un examen para Jovic. Se le empieza a agotar el crédito y necesita goles para recuperar la confianza, tanto propia como ajena. Seis meses más a este nivel comprometen (y mucho) su continuidad en el Real Madrid. Sin embargo, como dice Zidane, todo puede cambiar.