Lewandowski nunca falla

El ariete polaco rescató al Bayern en el último minuto y le dio los tres puntos a las bávaros con un doblete que les coloca líderes de la Bundesliga.

José Carlos Menzel

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Bayer o Bayern. Uno de dos. Se jugaban los conjuntos de Leverkusen y Múnich pasar las fiestas navideñas en lo más alto de la clasificación de la Bundesliga en un partidazo en tierras renanas que cumplió con lo prometido y, a la vez, tuvo un final más feliz para el campeón. Un doblete del insaciable Lewandowski (17 goles en 13 jornadas), el segundo sobre la bocina, sirvió al Bayern para dar la vuelta al tanto inicial de Schick e imponerse por 1-2. El triunfo en el que fue el último partido del año para los muniqueses les sirve para adelantar al conjunto de las aspirinas en la tabla e invernar en su hábitat natural, el liderato de la máxima competición alemana. Dos puntos por detrás, en segundo lugar e igualado a puntos con el Leipzig, pasará el parón el Leverkusen hasta que eche a rodar de nuevo la categoría de oro en Alemania a principios de enero.

No llegó a tiempo Goretzka por problemas musculares, obligando a su técnico a improvisar en el centro del campó muniqués. Apostó Flick por adelantar a Alaba al doble pivote junto a Tolisso y colocar a Lucas al lado de Boateng en el centro de la zaga. No estaba para muchas maniobras la defensa bávara, a la que se le volvieron a ver las costuras ante un Leverkusen con mucha autoridad arriba. Bailey efectuó un saque de esquina en corto, Amiri la puso templada y Schick, solo como la una en el corazón del área, adelantó a los suyos con una volea que Neuer ni siquiera vio pasar. Fue el séptimo partido consecutivo que el campeón comenzaba encajando. Era un poema la cara de Flick.

No mejoró la cosa para los suyos. El tanque Schick volvió a quedarse solo ante Neuer, volvió a batirle, pero el tanto fue anulado por fuera de juego del checo. Se tambaleaba el Bayern. Sufrió otro revés cuando Coman se retiró lesionado. Y no hubiera levantado cabeza si el Leverkusen no le hubiera resucitado de los muertos. No se entendieron el meta Hradecky y Tah en un centro de Müller al borde del descanso, permitiendo a Lewandowski poner las tablas de cabeza a puerta vacía. Un regalo en toda regla que el kíller no desaprovechó. El tanto dio alas al Bayern. Reapareció Kimmich tras un mes de baja por una operación en el menisco. La tuvo Gnabry. Musiala tiró al palo. Pero fue el de siempre, Lewandowski, el que dio tres puntos a los suyos en el descuento que valen el liderato. Simplemente The Best.

El Leipzig no pudo con el Colonia.

El RB Leipzig termina el año en tercera posición de la tabla en Alemania tras no pasar del empate a cero frente al Colonia. Firmó un gran partido Angeliño y Dani Olmo entró como revulsivo en la segund mitad, pero le faltó pegada a los de Nagelsmann. De haber estado más fino de cara al marco, habría invernado co-líder junto al Bayern.