El Bayer no frena: segundo, a un punto del líder, a costa del colista
Un autogol del finlandés Malick Thiaw, Baumgartiinger y Schick relanzan al Bayer y hunden más al colista Schalke.
El conjunto que dirige el holandés Peter Bosz ganó con autoridad en Gelsenkirchen al Schalke (0-3), que se hunde en la última plaza de la clasificación.
Todo se le pone en contra al colista que entrena Manuel Baum que se encontró con el partido cuesta arriba a los diez minutos por culpa de un autogol. El finlandés Malick Thiaw envió a su propia portería un saque de esquina botado por el jamaicano Leon Bailey que superó al meta austríaco Michael Langer.
Marcó el Schalke a la media hora pero el VAR anuló por fuera de juego el tanto logrado por el marroquí Nassim Boujellab.
El Bayer Leverkusen amplió su ventaja en el 67 por medio del austríaco Julian Baumgartiinger tras un córner.
Pudo acortar distancias el conjunto de Baum cinco después. Pero el meta finlandés Lukas Hradecky detuvo el penalti lanzado para el Schalke por Steven Skrzybski.
A continuación, el checo Patrik Schick redondeó la victoria del conjunto visitante en el estadio Veltins Arena que le sitúa segundo en la clasificación con un punto por delante del Leipzig y otro por detrás del líder, el Bayern Múnich.
Werder Bremen 1-Stuttgart 2
Un doblete del congoleño Silas Wamangituka devolvió al Stuttgart a la senda de la victoria en el campo del Werder Bremen (1-2), en la décima jornada de la Bundesliga que lidera el Bayern Múnich.
El conjunto que entrena el estadounidense Pellegrino Matarazzo llevaba cuatro empates y una derrota en sus últimos encuentros que le habían alejado de los puestos europeos.
El Stuttgart rentabilizó el penalti transformado por el congoleño a la media hora. Mantuvo el tipo ante la reacción del Werder Bremen, que no gana desde el pasado 3 de octubre, cuando batió al Arminia Bielefeld. Seis partidos han pasado desde entonces y el cuadro de Bremen no reacciona.
Wamangituka sentenció el choque en el tiempo añadido, en el minuto 91, tres antes de que los locales tuvieran acierto, gracias a David Selke, sin tiempo para evitar la derrota.