Los Romero y el as bajo la manga de la pelota parada

Ángel ya metió dos goles de tiro libre y Óscar ya había convertido uno a principios de año. “Esperamos seguir creciendo como grupo”, afirmaron los mellis.

Olé

Prácticamente un calco, si no fuera por la camiseta y el arquero. Un día la negra, otro la azulgrana. Un día lo padece Mariano Andújar, el otro Lucas Chaves. Ángel Romero logró lo que pocos, metió dos golazos de tiro libres casi idénticos con apenas dos semanas de diferencia. "Fue casi a la misma distancia. Gracias a Dios pude convertir de vuelta de pelota parada, pero lo importante es la victoria del equipo", afirmó post partido. 


Ambos tantos fueron la confirmación de un triunfo por 2-0, la primera vez contra Estudiantes y la segunda, este domingo, ante Argentinos. Sacando a la luz una pegada magistral, el delantero guaraní muestra un nivel superlativo, a tal punto que ya se posiciona como uno de los mejores jugadores de la Copa de la Liga cuando tan solo van cuatro fechas.

Para encontrar un antecedente similar hay que irse bastante tiempo atrás: en el Clausura 2006, hace casi 15 años, el Malevo Ferreyra convirtió dos tantos de esa manera, en el Pedro Bidegain, de forma consecutiva. Fue en la segunda fecha en el triunfo por 2-1 ante Estudiantes y dos jornadas después, en el 2-0 contra Olimpo. Mientras que Adrián González, hoy ayudante de campo de Sebastián Méndez en Gimnasia, redobló la apuesta cuando metió un doblete así, en el Apertura 2008, en la victoria 2-1 sobre Rosario Central.

No es casualidad. Los Romero tienen un don innato en la pegada. Ya a principios de años, días antes de que el coronavirus obligara a entrar en estricta cuarentena, su hermano Óscar había demostrado que él también sabe cuando marcó un golazo ante Aldosivi, en Mar del Plata. Incluso, es normal que en los entrenamientos se queden ensayando con alguno de los arqueros del plantel. Y ahí también suelen generar el beso entre la pelota y la red…

Los tiros libres suelen ser una cuenta pendiente, no sobran los especialistas y San Lorenzo no tiene uno sino dos. Con pierna derecha Ángel, con la izquierda Óscar. Y si ellos no están, ya demostró Nacho Piatti contra el Tiburón que también puede aportar lo suyo cuando le puso la bocha en la cabeza a Fede Gattoni para el 1-0.

Un arma importante, un as bajo la manga al mismo tiempo. Porque Mariano Soso habla de la construcción del juego, de que partido a partido el equipo se va aferrando a la idea. Y eso es tan cierto como necesario, pero en partidos complejos, la pelota parada puede ser la herramienta para quebrar el cero.

El uno por uno de San Lorenzo contra Argentinos

Mirá también

El uno por uno de San Lorenzo contra Argentinos


"Mariano tiene una idea interesante que de a poco vamos desarrollando, con el correr de los partidos y los entrenamientos vamos agarrando la idea. Nos sentimos cómodos y esperamos seguir creciendo como grupo", señaló Óscar luego del triunfo. Hagan faltas, pateadores sobran…

Entradas populares