Los 'propietarios' del VAR piden que se deje de usar de inmediato
Ibáñez de Alba y Galán, quienes tienen la propiedad intelectual e industrial de esta herramienta, reclaman a FIFA, UEFA y RFEF, entre otros, el cese de uso.
Mientras, en el frente común de Ibáñez y Galán, reclaman conjuntamente ante Mediapro, Hawk-Eye, FIFA, UEFA y RFEF, entre otras federaciones de fútbol, el “cese inmediato de su uso”. Ambos, que dicen que mantendrán próximamente una reunión con la FIFA para intentar negociar “una solución amistosa y pactada para su uso”, anuncian que “van a requerir fehacientemente a todas las entidades que utilizan el VAR sin su consentimiento a fin de exigirle el cese inmediato en la utilización y advierten con solicitar acciones civiles o penales. El VAR sigue dando que hablar, ya sea dentro o fuera del campo.
No sería la primera vez que ambos han acudido a la justicia por el VAR. A principios de octubre, como ya contó AS, Miguel Ángel Galán (precandidatos a la Federación Madrileña y director de la escuela de entrenadores CENAFE) ganó la propiedad industrial de la marca Video-Assistant Referee, a Mediapro en la Oficina de la Propiedad Intelectual de la Unión Europea. Cuya resolución le adjudicó la posibilidad de explotar su marca registrada durante los diez próximos años.
Por otro lado, Antonio Ibáñez de Alba tiene la propiedad intelectual de la herramienta. El científico gaditano de la NASA fue contrato en 1995 por Mario Conde, e indignado por el codazo de Tassotti a Luis Enrique en el Mundial del 94, elaboró el informe preliminar de un sistema inteligente para asistencia en decisiones arbitrales. Se registró el 1 de septiembre de 1995. Aunque posteriormente Ibáñez acabaría denunciando a Conde, en la cárcel y embargado, por apropiación de patentes y como única vía para cobrar su trabajo.
Pero Ibáñez no es el único que lucha en los tribunales asegurando que el invento es suyo. En 2017, Francisco López, con papeles en mano, lo aseguró en este periódico. Acusa a FIFA y RFEF de plagio. El proyecto del que habla lo llamó 'El Fútbol del Siglo XXI', lo inscribió en el Registro General de la Propiedad Intelectual en 1999 y lo amplió en 2006. Francisco López espera que en breves resuelva un Juez sobre la demanda interpuesta ante la FIFA y la Federación.