Las cuatro diferencias entre la vacuna de Pfizer y la de Moderna
La farmacéutica estadounidense anunció este lunes en un comunicado su nueva vacuna que supera los resultados de la vacuna de Pfizer.
Pese a los centenares de estudios y proyectos para encontrar una cura contar el coronavirus, estas dos vacunas han tomado la delantera. Serán, posiblemente, las que primero lleguen a principios del próximo año 2021 y, aunque compartan un mismo objetivo final -acabar con el coronavirus- existen muchas características que las diferencian claramente.
Efectividad y participación en las pruebas
La más importante y determinante para los próximos meses y las primeras vacunaciones. Pfizer comunicó el pasado lunes que su vacuna tenía una efectividad del 90% (testada en más de 43.000 personas). Siete días más tarde y comenzando una nueva semana, la farmacéutica estadounidense Moderna anuncia que su vacuna contra el coronavirus, BNT162b2, tiene una eficacia del 94,5%. Incluso expertos advierten que las dosis de la vacuna de Moderna sin tres veces superiores a las de Pfizer. También se distribuye en dos dosis, con una diferencia de 28 días entre cada una.
La vacuna de Moderna ha contado con la colaboración de 30.000 personas. De ellas, a una mitad se le inyectó la vacuna, mientras que la otra recibió una dosis de agua con sales como placebo. Las conclusiones de este análisis dejaron 95 infecciones sintomáticas. 90 de estas personas colaboradoras en el estudio pertenecen al grupo de los recibió el placebo y no el verdadero tratamiento. Entre sus participantes, Moderna incluye 7.000 personas de más de 65 años y 5.000 por debajo de la misma, pero con enfermedades crónicas asociadas a un riesgo mayor.
Conservación en frío
Fue una de las características más resaltadlas de Fernando Simón hace una semana. El epidemiólogo se mostró optimista con la llegada de la vacuna de Pfizer, pero su distribución parecía ser un pequeño problema de cara a la campaña de vacunación. Por sus características, esta vacuna obligaba a ser mantenida a temperaturas tan gélidas como los -70º hasta el momento de su inyección. Una situación que determinaría un problema a la hora de su distribución al no existir contenedores que guarden esa temperatura a la hora de transportarse.
En este punto, gana la vacuna Moderna, que sería mucho más fácil de conservarse y distribuir a los diferentes países para empezar la vacunación a la población. En el mismo comunicado, la farmacéutica informa de que su vacuna ‘mRNA-1273’ puede mantenerse “entre los 2° y los 8°, la temperatura de un refrigerador doméstico estándar, durante 30 días”. Incluso aseguran que puede conservarse a -20ºC por un período de hasta seis meses y a temperatura ambiente durante 12 horas.
Plazos y distribución
Las primeras campañas de vacunación se prevén para principios de 2021, al igual que la vacuna de Pfizer, aunque la compañía solicitará “en la próximas semanas” que se autorice su utilización para casos de emergencia. Sin embargo, la farmacéutica estadounidense tiene en mente producir 20 millones de la vacuna de Moderna para empezar a distribuirlas por Estados Unidos antes de que acabe el año. Además, la empresa trabaja ya en dos canales, una para suministra al propio país y otra que se distribuirá por Europa, a manos de los laboratorios Rovi, en Madrid.
De cara a 2021, se prevé que la vacuna de Moderna alcance entre 500 y 1.000 millones de dosis para todo el mundo. Su llegada a Europa tardará un poco más, aunque desde la empresa esperan que se alcance un acuerdo con las autoridades para empezar a distribuirlas a principios del próximo año.
La vacuna de Pfizer espera producir alrededor de unas 50 millones de dosis antes de que acabe el 2020, llegando hasta los 1.300 millones de vacunas el próximo año. España ha llegado ya a un acuerdo por la cual recibirá 20 millones de dosis para vacunar a unos 10 millones de personas en los primeros meses del 2021. Ambas vacunas precisan de dos dosis para ser efectivas.