El trágico destino que ensombrece a la selección inglesa campeona del Mundial de 1966
De los 22 futbolistas que integraron esa plantilla que conquistó el único título mundialista de Inglaterra, solo nueve siguen con vida. Y muchos padecieron enfermedades neurodegenerativas
Es curioso pensar que Inglaterra, país en donde se creó el fútbol y se sembraron las bases de las reglas del deporte, sólo cuente con un título mundial en su historia. Un trofeo que atesora en sus vitrinas desde 1966, edición que se disputó en su territorio y cuyos integrantes permanecerán en la memoria de cada británico.
De aquellos 22 gladiadores que conquistaron el mundo tras vencer a la Alemania Federal por 4-2 (30/7/1966) sólo nueve pueden seguir relatando las anécdotas que vivieron durante esos 20 días de competencia. Entre ellos la leyenda del Manchester United e ícono de aquel mediocampo inglés Bobby Charlton, que recientemente fue diagnosticado de demencia.
Ese mismo trastorno cerebral también lo padeció su hermano Jack, quien murió en julio de este año a los 85 años. La particularidad que llama la atención es que ésta condición resultó ser un factor común dentro del plantel que comandó Alf Ramsey (1920-1999) a la gloria.
“Nos entristece mucho conocer del fallecimiento de Nobby Stiles. Como parte integral de nuestro primer equipo ganador de la Copa de Europa, Nobby fue un titán de la historia del club, apreciado por su corazón y personalidad dentro y fuera del campo. Todos lo echaremos de menos profundamente”, fue el mensaje que publicó el Manchester United el 30 de octubre para anunciar el fallecimiento Stiles (1942-2020), quien sufría un avanzado estado de demencia, además de un cáncer de próstata.
El aguerrido defensor, que fue titular en todos los partidos de aquella Copa del Mundo, había quedado apartado de la vida pública a causa de ese trastorno cerebral.
Según el sitio oficial “Alzheimer’s Association”, la demencia “es un término general que describe una amplia gama de síntomas asociados con el deterioro de la memoria y otras habilidades del pensamiento, que llegan a reducir la capacidad de una persona de realizar sus actividades diarias”.
Ray Wilson, quien acompañó en la defensa a Stiles en cada uno de esos seis partidos, murió dos años antes, a los 83, en las vísperas del Mundial de Rusia. El talentoso lateral izquierdo también se vio afectado por la demencia, en su caso particular, por el Alzheimer: un tipo de demencia cuyos síntomas "generalmente se desarrollan lentamente y empeoran con el tiempo, hasta que son tan graves que interfieren con las tareas cotidianas”, detalla la página “alz.org”.
A cualquier amante del fútbol inglés se le dibujará una sonrisa en el rostro cada vez que escuche el nombre de Martin Peters, ese hábil mediocampista que sólo se perdió el primer partido contra Uruguay y que fue el autor de uno de los cuatro goles de Inglaterra en la final.
Lamentablemente, el ex jugador del West Ham y del Tottenham corrió con el mismo destino cuando en diciembre del 2019, con 76 años, falleció tras una larga lucha contra el Alzheimer, el cual posee diferentes etapas, comenzando con una leve pérdida de memoria hasta llegar a la situación más crítica en donde la persona afectada no es capaz de mantener una conversación ni responder a su entorno.
“El ganador del Mundial de 1966 murió en la cama en las primeras horas del sábado, tras una larga y valiente lucha”, escribió el conjunto “Hummer” para anunciar su fallecimiento.
En 2015, por su parte, el portal británico “Mirror" se encargaba de informar acerca de la muerte del ex referente del Liverpool Gerry Byrne: “El ex defensa de los Reds falleció a los 77 años en un hogar de ancianos en Wrexham. Había estado padeciendo la enfermedad de Alzheimer”.
Otro de los históricos campeones que tampoco podrá contar de primera mano sus vivencias en aquella cita mundialista es Peter Bonetti después de que el Chelsea, equipo en el que hizo historia como arquero, anunció su partida tras “lidiar con una larga enfermedad”.
La mayoría de los medios británicos sólo se hicieron eco del comunicado que publicó el conjunto Blue, sin embargo, el “Dailymail” estableció la posibilidad de que también haya padecido una demencia senil, después de revelar que “un aficionado del Chelsea que visitaba a un familiar en el Hospital Bloxwich por demencia se topó con Bonetti en la sala”. Dichas instalaciones están especialmente equipadas para asistir a personas mayores con problemas de salud mental.
LA LUCHA DE LA ASOCIACIÓN DE FUTBOLISTAS INGLESES CONTRA LA DEMENCIA
Dentro de la página web oficial de la Asociación de futbolistas ingleses (PFA por sus siglas en inglés) se introdujo un apartado llamado “APOYO A LA DEMENCIA”, en donde señalan que su principal misión es “cuidar a todos los miembros pasados, actuales y futuros” de cualquier problema neurológico.
En 2017 la PFA junto a la FA (Football Association) pusieron en marcha una investigación sobre “la Influencia del fútbol en los resultados de por vida y el riesgo de demencia”, el cual se llevó a cabo en la Universidad de Galsgow.
“Los resultados mostraron que los ex futbolistas que participaron en el estudio tenían tres veces y media la tasa de muerte por enfermedades neurodegenerativas que el grupo de control”, fue la conclusión que brindó la web, la cual detalló que fueron 7.674 los ex futbolistas estudiados.
“Cada uno agrupado con tres miembros del público en general no deportistas para la comparación. Los participantes fueron emparejados por edad, nivel socioeconómico y estilo de vida para comparar sus factores de riesgo y estado de demencia”.
Junto a Bobby Charlton, los otros ex campeones del mundo que continúan con vida son: George Eastham, Roger Hunt, Ian Callaghan, Terry Paine, Ronald Flowers, Geoff Hurst, Jimmy Greaves y George Cohen. Mientras que Gordon Banks, Bobby Moore, Alan Ball, Ron Springett, John Connelly, Jimmy Armfield y Norman Hunter (éste último por COVID) estarán contando sus hazañas desde el cielo.
En aquella Copa del Mundo, Inglaterra empató en su debut contra Uruguay 0-0 y accedió a cuartos de final tras vencer a México y Francia (por 2-0 en cada uno). En las rondas eliminatorias superó a Argentina por 1-0 y a Portugal por 2-1 (semifinales). En el recordado partido contra Alemania Federal, el equipo de Alf Ramsey se impuso por 4-2 con un triplete de Geoff Hurst, el único en la historia en marcar tres goles en una final de un Mundial.