El PSG empata y acaba pidiendo la hora ante el Girondins
Los parisinos concedieron 20 disparos contra un rival que le sacó las carencias al contragolpe. Mañana, el Lille podría empatarles en la clasificación.
Tuchel introdujo al joven Pembelé, de 18 años, como central junto a Kimpembe en una alineación que tuvo como principal novedad la vuelta de Marco Verratti. El italiano, que volvió el miércoles contra el Leipzig, recuperó la titularidad tres semanas después de su lesión en el gemelo y acompañó a Paredes y Rafinha, también novedad, en el centro del campo. El retorno de Hatem Ben Arfa y el espectacular homenaje previo a Maradona completaron los alicientes de un partido histórico en del fútbol francés.
A pesar del buen hacer del Burdeos, el PSG poco a poco se fue haciendo con el control del encuentro. Neymar empezó a asociarse con Rafinha, y el ritmo del partido aumentó considerablemente. El brasileño realizó una jugada maradoniana para provocar el penalti de su compatriota Otávio, que antes de la desafortunada acción estaba firmando una actuación colosal. Neymar no perdonó y abrió el camino de la remontada de su equipo.
Los buenos minutos del Burdeos contra el PSG se difuminaron en apenas un minuto. A la torpeza de Otávio hay que añadirle un error de concentración nada más sacar de centro que aprovechó Moise Kean, marcando su sexto gol en nueve encuentros con el conjunto parisino. Sin embargo, los de Gasset no se rindieron y pudieron empatar antes del descanso, pero un imperial Sergio Rico realizó la parada de la noche a un buen disparo con la diestra de Zerkane.
Si la primera parte no defraudó, la segunda fue todavía más espectacular. Jean-Louis Gasset dio entrada a Adli por Basic para intentar tener más presencia en campo rival y el Burdeos encontró un latifundio a la espalda de los centrocampistas del PSG. Adli, precisamente canterano de los parisinos, nos deleitó con un remate espectacular desde la frontal que fue directo a la escuadra.
Con un PSG partido en dos y sin Verratti, que tuvo que ser sustituido ya que no estaba en su mejor estado físico aún, el conjunto ultramarino generó ocasiones con empate para llevarse el partido del Parque de los Príncipes. La más clara, un mano a mano de De Préville contra Sergio Rico que aguantó de maravilla el español y sacó con el pie. El PSG concedió 20 disparos y apenas generó ocasiones al final, cediendo un empate que pudo ser una derrota si el Burdeos hubiera estado más avispado en los metros finales.