La plantilla de fútbol no acudirá a la negociación de la reducción salarial

Los futbolistas no tienen previsto estar presentes este miércoles en la primera reunión para negociar una rebaja salarial, según avanzó la cadena SER.

Javier Miguel
La rebaja salarial que plantea el FC Barcelona a todos los estamentos del club sigue generando polémica y discrepancias en el seno de la plantilla del primer equipo de fútbol. El domingo se filtró que no todos los futbolistas estaban de acuerdo en firmar el burofax que se envió al club para oficializar el rechazo del equipo sobre la propuesta de reducción salarial -Ter Stegen, Lenglet, De Jong, Dest y Pjanic no respaldaron el burofax- y hoy se ha conocido, gracias a una información de la cadena SER, que los futbolistas no tienen previsto acudir este miércoles a la primera reunión con la empresa para iniciar las negociaciones.

La plantilla del primer equipo ha descartado tener un representante en esta reunión, ya que consideran que su contexto es totalmente diferente al de resto de empleados y necesita abordarse en otros términos. De hecho, el Comité de Empresa está de acuerdo con este planteamiento, ya que parten de situaciones totalmente distintas, al no tener nada que ver los sueldos que cobran los empleados del club, que representan un 6% del presupuesto total del Barcelona, y los salarios de los futbolistas del primer equipo, que alcanzan casi el 70%.

También existe el problema añadido que muchos miembros del primer equipo no consideran al actual presidente, Josep Maria Bartomeu, y su actual junta como un interlocutor válido, teniendo en cuenta que dentro de menos de quince días está previsto que se convoque un referéndum de voto de censura que podría llevar a la dimisión de toda la directiva. De ahí, que algunos pesos pesados del equipo, insistan que lo mejor es esperar el desarrollo de esta moción, antes de tomar ninguna decisión. Hay que recordar que hasta el 5 de noviembre hay plazo para cerrar las negociaciones, mientras que el referéndum se convocaría de cara al 1 y 2 de noviembre. En el caso de tener éxito el voto de censura, la actual junta dimitiría en bloque y asumiría las responsabilidades del club una Junta Gestora que, según marcan los Estatutos del club, sólo podría tomar “decisiones administrativas para el correcto funcionamiento de la entidad”.

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