El partido de Múnich dejó al aire carencias en el Atlético
La goleada del Bayern podría acelerar las negociaciones del equipo rojiblanco por Kondogbia. Trippier, sin recambio, no pasa por su mejor momento.
Simeone señaló que había obtenido enseñanzas positivas, entre las que estarían los buenos minutos de Herrera en el centro del campo, el desequilibrio de Carrasco en banda o la labor defensiva de Savic. Pero, en esos minutos donde el equipo pareció descoserse, también se profundizó en ciertas dificultades que sufre la plantilla del Atlético. La primera de ellas pasa por la ausencia de un pivote asentado. La marcha de Thomas en el último día de mercado ha dejado un problema grande en el centro del campo colchonero.
Unas carencias que podrían acelerar la ‘Operación Kondogbia’. El francés es el elegido para suplir a Thomas mientras el mercado sigue abierto para el Atlético (hasta el 5 de noviembre). El jugador sigue trabajando al margen con el Valencia mientras no va convocado a los partidos. Pero, las dificultades económicas complican cerrar su llegada, algo que implicaría esperar hasta enero para buscar un centrocampista. Quizás el partido contra el Bayern sea el argumento con mayor peso para dar un acelerón a su llegada.
Pero además del medio, al Atlético se le vio débil en el costado derecho. Y es que Trippier no pasa por un buen momento de forma y se ha quedado sin ningún competidor por el puesto de lateral derecho. Arias se marchó cedido al Bayer Leverkusen antes de sufrir una grave lesión y Vrsaljko continúa de baja por sus problemas de rodilla. Coman encontró un filón en ese costado y Simeone no tiene más variantes para rotar al inglés o buscarle una alternativa.
Por último, se cometieron errores graves en la salida de pelota y no se estuvo conciso en la definición. Una pólvora mojada que ya fue un gran problema todo el curso pasado y que conllevó que en cuatro llegadas claras no se hiciese ningún gol ante un equipo que sí aprovecha las que tiene. Luis Suárez se ha quedado sin alternativa en la punta de ataque con la lesión de Diego Costa, que ante el Celta se había mostrado como complementario formando una delantera con dos arietes. Una equivocación de Felipe en el pase y la poca contundencia de João Félix en el primer gol o el error en el envío de Llorente que no llegó a enmendar Herrera en el segundo fueron mortales ante un equipo completamente efectivo. Un partido ante el Bayern que puede servir como enseñanza y azuzar al club a buscar alternativas en los días de mercado habilitado que le queda.