El Atlético se queda en nada: sin fútbol ni chispa
Hay partidos en los que no pasa nada. Éste fue uno de ellos. El Atlético suma otro empate ante el Villarreal de Emery que tampoco puso en grandes aprietos a los locales.
Asenjo no tuvo que intervenir en el primer tiempo. El Atlético pasaba sin problemas del centro del campo pero llegar a los dominios del cancerbero ya fue otra cosa. El Villarreal cerró bien su banda derecha, por donde intentaron entrar Lodi y João Félix. Por ahí ni una broma. En cuanto recibía el portugués tenía dos jugadores encima. Sí dejaron algo más suelto a Trippier. El inglés siempre encuentra el hueco para penetrar pero casi nunca acierta con el centro. En ocasiones se pasa, en otras no llega y en muchas oportunidades falla en ese control que es decisivo. Por el centro fue imposible. El Villarreal tampoco chutó mucho a portería: una vez y Oblak sacó la mano a tiro de Mario.
Bonito partido para los analistas, para hablar de los buenos jugadores de uno y otro equipo. Primer tiempo de detalles, con Gerard Moreno sacrificándose en defensa y haciendo algún sombrero a su rival. Para el espectador, un tostón. Pero de los gordos. Ningún equipo cometió errores, por lo que, al descanso, sin goles. Lógico. De Luis Suárez, sin noticias.
En el minuto 70 Simeone intentó que el choque tuviera otro rumbo con la entrada de Diego Costa, Marcos Llorente y Carrasco. El Cholo sí tiene banquillo para revolucionar los partidos. Súarez se fue sin apenas tocar balón. En el primer partido marcó dos y dio una asistencia. En el segundo tuvo una y la falló. En el tercero, ni eso. No tengo duda de que se irá acostumbrando. Cinco minutos después se fue João Félix, anulado durante todo el partido. El Villarreal sabía que con el portugués fuera de combate el Atlético tiene muchos problemas para armar el juego.
La nueva delantera la formaron Marcos Llorente y Costa. El partido pareció animarse un poco. Gerard Moreno le hizo un traje a Lodi y en la otra área Costa estuvo a punto de llegar a un centro de Llorente. Detalles. Sólo cuestión de detalles. Lo peor para el Atlético es que dio la impresión de sentirse impotente para crear peligro al área rival. El rey del empate de la temporada pasada volvió a igualar y a dejarse dos puntos, esta vez en su estadio. El Villarreal estará contento: del 4-0 en el Camp Nou al 0-0 en el Wanda Metropolitano media un abismo.