BENZEMA "¿Renovar? Mi puerta siempre estará abierta a Florentino"
Concedió una entrevista a Universo Valdano y habló sin tapujos. "Cuando me retire quiero ser entrenador, pero es complicado", confesó.
Sergio López de VicenteAs
El 9 de julio de 2009 fue presentado el nuevo delantero del Real Madrid: Karim Benzema. El francés, entonces con el 11 a la espalda, iba a cumplir los 22 años y llegaba del Lyon por 35 millones. Ese mismo día posó ante su nueva afición en un abarrotado Bernabéu, pero también habló para los medios de comunicación en la sala de prensa... Junto a Valdano. El argentino era director deportivo del club y le acompañó en ese trance. Ahora, 11 años después, ambos se han sentado para charlar en el programa Universo Valdano sin tabúes ni peros.
Das muy pocas entrevistas. "Más que antes, hace mucho que estoy en Madrid, pero es que para mí lo importante está en el campo. Esto lo es menos".
Comienzos. "En mi pueblo era como todo el mundo, yo he tenido una vida corriente. Jugaba al fútbol con muchos niños en la calle, ahí di mis primeros toques. En ese ámbito se aprende, porque hay mucha gente y sólo un balón".
Familia. "Tengo nueve hermanos, cuatro hombres y cinco mujeres. Mis padres me enseñaron a respetar siempre a la gente. Si hay un mayor, sea hombre o mujer, te callas y escuchas. Aprendí esa autoridad. Yo no he cambiado con respecto a la vida que tenía antes, sigo siendo Karim y cuando puedo ir a Francia, vuelvo. Dos de mis hermanos que intentaron ser futbolistas, pero no quisieron soportar el sacrificio que esto conlleva. Al fútbol jugaba hasta con mi madre, le decía que se pusiese en la portería y chutaba. Y eso que a ella no le gusta mucho, pero estaba conmigo. Ella siempre me daba la razón y mi padre al contrario, no es que me llevase la contraria para hacerme daño, pero me exigía mucho porque quería que llegase al máximo. Él siempre quería que yo marcase, para él el fútbol eran goles, pero ahora puedo hablar con él de este deporte, porque entiende lo que hago en el campo".
Fichaje por el Lyon. "Tenía ocho años... Con esa edad empecé y ya entrenaba tres o cuatro días a la semana. Hasta los 14-15 yo jugaba al fútbol sin querer ser profesional, pero en ese punto tuve un entrenador que me motivó mucho, muchísimo, me dio confianza y me hizo crecer. Me decía "tienes talento, pero también tienes que correr". Y fui aprendiendo. A partir de él di el salto y a los 17 llegué al fútbol de élite. Yo creo que todo el mundo tiene talento, algunos más, otros menos... Pero lo que marca la diferencia al final son los sacrificios. En el Lyon yo estaba centrado. A veces era suplente, otras estaba desconvocado, pero yo seguía trabajando. Pensaba "son muy buenos", pero no son Ronaldo. Trabajé, trabajé, trabajé y al final uno se lesionó, me dieron la oportundiad. Y me asenté".
Las críticas. "Este deporte ha cambiado mucho. La gente piensa que un delantero tiene que meter goles y sí, vale, pero si un día no te entra... Eso es un problema. Es mejor saber hacer más cosas, tener más registros. Yo miro a Ronaldo Nazario, que no sólo metía goles, hacía de todo. Para mí es un modelo, como lo es Zidane. Si yo meto un gol pero no toco el balón en 90 minutos... No voy a decir que no habré servido para nada, pero me gusta llegar a casa contento de mi partido y yo con mi juego quiero mostrar más cosas. Es difícil, pero poco a poco voy convenciendo a la gente".
Posición en el campo. "¿Qué es un 9? ¿Qué es un 10? Dime. Yo creo que soy un jugador que tiene un poco de todo. Me gusta el juego rápido, toques, movimiento... He cambiado con el tiempo y la gente ya empieza a entender que soy un delantero moderno, que puedo participar y hacer cosas diferentes".
Ronaldo Nazario. "Empecé a ver fútbol por él. Intentaba imitarle, pero es imposible porque no hay nadie como él. Su manera de regatear, de tirar...".
Llegada al Madrid. "Estaba con mis amigos y me dijeron "tienes que venir, está aquí Florentino". Le saludé, hablamos y me dijo que si tenía su palabra para firmar. Le dije que sí, claro. En el Lyon era el niño mimado y no estaba mentalizado para jugar en el Madrid. Llegué y fue complicado, miras al vestuario y son los mejores. Yo vine muy joven y no sabía de verdad lo que es este club, pensaba que tendría que salir al campo y ya, pero no, esto es un estilo de vida. Si no te sientes bien fuera es complicado rendir dentro. Quedarte con 20 años solo en Madrid se hace duro, la verdad. El Lyon y el Madrid son dos mundos diferentes".
Cristiano Ronaldo. "Me hablaba mucho, porque sabía un poco de francés. Me decía que cualquier cosa que necesitase se lo dijese, pero a mí me costaba abrirme. A raíz de Cristiano y con el paso de los años fui cambiando mi juego, porque estaba él. En el Lyon era yo quien metía... Ahora toco más el balón. Porque claro, tenía un chico al lado que marcaba como el triple, así que tocó adaptarse".
Idioma. "Tardé alrededor de dos años y medio. Soy un chico reservado y reconozco que fue difícil".
Zidane. "Estamos alineados, entendemos el fútbol igual. Yo a veces hablo con él de cosas que en el campo pueden parecer básicas, pero no lo son. En el vestuario es igual que en el campo, tiene esa capacidad para resolver problemas con mucha naturalidad. Nunca grita, siempre está tranquilo y sereno. Eso nos ayuda, porque nosotros nos podemos equivocar, pero prioriza buscar soluciones".
Capitán. "Ramos es el líder fuera y dentro del campo, lo lleva dentro, creo que ese liderazgo es algo con lo que se nace. Yo soy más capitán en el vestuario".
Su físico. "Empecé a cuidarme más fuera del campo. La comida, dormir mejor, ejercitarme también en casa... Son detalles que luego te ponen a tope y evitan que te lesiones. Cuando tengo una semana de entrenamiento trabajo hasta que acabo muerto porque el sábado, para el partido, quiero estar bien. Juegas como entrenas".
Influencias. "Nadie, yo solo cambié el chip. ¿Me estoy haciendo mayor? Tengo 32 años y siento que puedo correr, correr y correr".
Selección. "Me surgió un problema y pensé "tengo que hablar con el seleccionador". Pero nunca tuve una explicación. Creo que eso vino de arriba. Y se acabó. Lo bueno es que eso me ha dejado descansar más y estar al 100% para el Madrid. No me dolió ver que fuesen campeones del mundo, yo quería estar ahí, claro, pero he ganado Champions... Muchos títulos. Sinceramente, me dolió más que no me diesen explicaciones que el no haber levantado el Mundial. Pero da igual, yo me concentro en mi club y se acabó".
Hijos. "Tengo dos y son lo mejor que me ha pasado en la vida. Con ellos estoy más tranquilo, miro la televisión, hablo de fútbol. Tienen 3 y 6 años. Me considero una persona muy casera, entreno todos los días y luego me quedo descansando en casa".
Dudas. "Jamás me planteé dejar el Madrid, ni en mi peor momento. Siempre pienso en qué puedo mejorar, en poner soluciones a los problemas. Hay años que las cosas no me han salido bien, pero al final he intentado estar en los momentos importantes. Pensaba "tienes un partido para demostrar lo que vales". Y así salía al campo".
Tras la retirada. "Tras mi carrera seguiré ligado al fútbol, eso seguro. ¿Entrenador? Es complicado porque no es sólo poner a 11 futbolistas, tienes que dar explicaciones, estar cerca de la grada... Me gustaría, pero reconozco que es mucho trabajo".
Futuro. "No sé hasta cuando estaré a un gran nivel, yo voy temporada a temporada. Tengo contrato hasta 2022 y vamos a ver... Eso sí, a Florentino le dejaré la puerta de mi casa abierta siempre".