Procuraduría concluye que hubo "actos ilegales y dolosos" en la compra de 170 respiradores españoles
La Procuraduría General del Estado halló actos ilegales y dolosos en el proceso de compra de 170 respiradores españoles que hizo el Gobierno a la empresa GPAInnova a través de IME Consulting.
"Se ha emitido el dictamen donde se ha concluido la responsabilidad, los hallazgos de responsabilidad por la comisión de actos ilegales y dolosos de 13 involucrados", refirió a ATB el Procurador General del Estado, José María Cabrera.
Señaló que la investigación de este caso inició el 20 de mayo y en esta semana se concluyó toda la fase de indagación, llegando a la conclusión de que hubo actos irregulares.
Cabrera señaló que este informe conclusivo se puso a conocimiento del Fiscal General del Estado, la Fiscalía Departamental de La Paz y los fiscales asignados al caso respiradores españoles, para que se sigan los procedimientos que corresponden dentro del proceso investigativo.
La anterior semana, el Ministerio Público informó que la investigación de este caso está en la etapa final y anunció que emitirá una acusación formal para llevar a juicio oral a todos los responsables de este hecho. Entre los principales investigados figura el exministro de Salud, Marcelo Navajas.
La Comisión Especial Mixta de la Asamblea Legislativa Plurinacional (ALP) también se pronunció hace unos días sobre este tema y concluyó, en su informe, que hubo un "flagrante caso de corrupción" en la compra de los 170 respiradores españoles y 324 chinos.
En mayo de este año se destapó este escándalo de corrupción en medio de la cuarentena por el coronavirus (Covid-19). Según las denuncias de este caso, los 170 respiradores españoles fueron adquiridos a través de un intermediario por más de $us 4 millones, se pagó por cada equipo $us 28.080 dólares cuando costaba cerca de $us 8 mil.
El Gobierno pagó un anticipo de $us 2 millones y luego de develarse las irregularidades suspendió el resto del pago comprometiéndose a recuperar el anticipo.
Tanto médicos como especialistas aseguraron que estos respiradores no eran adecuados para la atención de pacientes con Covid-19 en Unidades de Terapia Intensiva.