El Chelsea inicia su revolución
El conjunto londinense se adelantó gracias a un penalti provocado por Werner. James neutralizó rápido el empate de Trossard y Zouma sentenció.
Alberto Muñoz
As
La inversión de 200 millones de euros este verano seguramente demandaba mucho más de lo que se vio sobre el verde, pero, teniendo en cuenta que era el debut en la Premier League y de que se consiguieron los tres puntos, el arranque de los de Lampard fue mucho más que aceptable. Se vieron destellos de Havertz, al que le pesaron los nervios, y de Werner, que provocó un penalti, pero sobre todo se vio un equipo con muchas soluciones. El asunto Kepa, sin embargo, lastra una faceta defensiva que necesita solución ya, tanto para reafirmarle en su puesto como para sustituirle.
Seguramente, por la expectación que han creado los nuevos fichajes, se esperaba mucho más de este Chelsea de lo que se vio durante el partido, pero, teniendo en cuenta que necesitan rodaje y crear automatismo entre ellos, el resultado fue bastante positivo. Los seagulls, que se defendieron como gato panza arriba en su estadio, lo hicieron todo prácticamente perfecto durante los primeros 45 minutos, pero se vieron condenados por un error garrafal de la defensa que propició el penalti de Ryan sobre Werner. Jorginho, nuevo capitán de los blues, no falló desde los once metros.
En el Brighton, una de las caras más apetecibles era sin duda la de Lallana, pero, al inglés, le sigue acompañando una maldición con las lesiones que parece que también le ha perseguido hasta el sur del país. A pesar de que solo ha sido titular en diez partidos en las cuatro últimas temporadas, hoy no consiguió llegar ni siquiera al descanso antes de tener que ser sustituido.
En la reanudación, Trossard, en el segundo disparo de los suyos entre los tres palos, consiguió batir a Kepa desde larga distancia. El español, al que se mira con lupa y quien parece que perderá la titularidad más pronto que tarde, no pudo hacer nada y fue consciente de la losa que cada gol pone en su espalda. Por suerte para él, Reece James, que parece que puede ganar la partida a Azpilicueta en el lateral derecho, marcó su primer gol en Premier League casi acto seguido. Un zapatazo, por cierto, imparable a la escuadra de Ryan.
Alberto Muñoz
As
La inversión de 200 millones de euros este verano seguramente demandaba mucho más de lo que se vio sobre el verde, pero, teniendo en cuenta que era el debut en la Premier League y de que se consiguieron los tres puntos, el arranque de los de Lampard fue mucho más que aceptable. Se vieron destellos de Havertz, al que le pesaron los nervios, y de Werner, que provocó un penalti, pero sobre todo se vio un equipo con muchas soluciones. El asunto Kepa, sin embargo, lastra una faceta defensiva que necesita solución ya, tanto para reafirmarle en su puesto como para sustituirle.
Seguramente, por la expectación que han creado los nuevos fichajes, se esperaba mucho más de este Chelsea de lo que se vio durante el partido, pero, teniendo en cuenta que necesitan rodaje y crear automatismo entre ellos, el resultado fue bastante positivo. Los seagulls, que se defendieron como gato panza arriba en su estadio, lo hicieron todo prácticamente perfecto durante los primeros 45 minutos, pero se vieron condenados por un error garrafal de la defensa que propició el penalti de Ryan sobre Werner. Jorginho, nuevo capitán de los blues, no falló desde los once metros.
En el Brighton, una de las caras más apetecibles era sin duda la de Lallana, pero, al inglés, le sigue acompañando una maldición con las lesiones que parece que también le ha perseguido hasta el sur del país. A pesar de que solo ha sido titular en diez partidos en las cuatro últimas temporadas, hoy no consiguió llegar ni siquiera al descanso antes de tener que ser sustituido.
En la reanudación, Trossard, en el segundo disparo de los suyos entre los tres palos, consiguió batir a Kepa desde larga distancia. El español, al que se mira con lupa y quien parece que perderá la titularidad más pronto que tarde, no pudo hacer nada y fue consciente de la losa que cada gol pone en su espalda. Por suerte para él, Reece James, que parece que puede ganar la partida a Azpilicueta en el lateral derecho, marcó su primer gol en Premier League casi acto seguido. Un zapatazo, por cierto, imparable a la escuadra de Ryan.