Tras el no de Isla a Boca, ¿qué pasará con Buffa?
El lateral chileno que tanto quería Riquelme respondió que ve dificil venir a la Argentina y el Consejo ya le dio de baja. Conocé los motivos de su decisión y cómo vienen las charlas para la renovación del cordobés.
Olé
Fue el jugador que más quiso Juan Román Riquelme. Sí, el máximo ídolo de Boca insistió mucho para que Mauricio Isla se incorporara al equipo de Miguel Ángel Russo con el objetivo de ganar la Libertadores. Lo buscó al principio de su gestión y volvió a ser el principal apuntado durante este mercado de pases. Sin embargo, el sueño se frustró. Tras el ultimátum del Consejo de Fútbol, el lateral derecho chileno dijo no estar convencido de jugar en la Argentina y el club ya le dio de baja. ¿Se encaminará, así, la renovación de Julio Buffarini?
La pregunta cae de maduro: ¿por qué Isla rechazó la propuesta del Xeneize luego de que el mismo futbolista declarara que uno de sus sueños era ponerse la azul y oro? Hay varios motivos que llevaron al Huaso a declinar la propuesta para jugar en Boca. Primero y principal, los tiempos del jugador y del Consejo de Fútbol no eran los mismos. Mientras Román y compañía lo querían ya en Ezeiza, el ex Fenerbahce pretendía tomarse un tiempo más para tomar una decisión.
Es cierto que al carrilero le entusiasma la posibilidad de cambiar de aire y tener su primera experiencia como profesional en Sudamérica. Pero hay una cuestión que no es menor: Boca recién regresó a los entrenamientos este lunes y el resto de los equipos (europeos) que lo pretenden ya compiten oficialmente desde hace rato. El primer partido del Xeneize será recién el 17/9, cuando visite a Libertad de Paraguay por la Copa Libertadores.
El segundo punto por el que Isla rechazó la oferta de Román fue por un tema personal. Su esposa, la modelo Galadriel Caldirola, es española y tiene a toda su familia en ese país. Para ellos sería un cambio muy grande mudarse a la Argentina. Y eso terminó de empantanar la negociación. "Fui claro con Román: no es un tema de dinero. Es también la seguridad que yo quiero tener para mi mujer y mi hija", dijo en su momento el lateral de 32 años.
Por último, el Huaso sabe que si pega la vuelta a Sudamérica, casi que daría por terminada su carrera en Europa, donde juega desde el 2007. Allí jugó en Italia (Udinese, Juventus y Cagliari), Inglaterra (Queens Park Rangers), Francia (Olympique de Marsella) y Turquía (Fenerbahce). De las cinco ligas top, sólo le falta pasar por Alemania y España. Y justamente desde la Liga recibió varios sondeos, el más fuerte del Betis.
La negativa de Isla, de todos modos, pareciera haber inquietado más al Consejo que al propio Miguel Russo, quien más allá de su deseo lógico de contar con la mayor cantidad de futbolistas de jerarquía por puesto, está muy tranquilo con el presente de Buffarini. El problema es que el cordobés todavía no arregló la renovación de su contrato y, si bien tiene vínculo hasta 2021, sigue siendo un tema a tener en cuenta.
La primera oferta del club fue rechazada por Buffarini, cuyo salario quedó completamente desfasado en relación a la escalada del dólar y pretende firmar por dos temporadas más y no por una, como era la intención de Boca. Ya sin Isla de por medio, las charlas continuarán y, según cuentan desde el lado del futbolista, no habrá problemas para llegar a un acuerdo.
Fue el jugador que más quiso Juan Román Riquelme. Sí, el máximo ídolo de Boca insistió mucho para que Mauricio Isla se incorporara al equipo de Miguel Ángel Russo con el objetivo de ganar la Libertadores. Lo buscó al principio de su gestión y volvió a ser el principal apuntado durante este mercado de pases. Sin embargo, el sueño se frustró. Tras el ultimátum del Consejo de Fútbol, el lateral derecho chileno dijo no estar convencido de jugar en la Argentina y el club ya le dio de baja. ¿Se encaminará, así, la renovación de Julio Buffarini?
La pregunta cae de maduro: ¿por qué Isla rechazó la propuesta del Xeneize luego de que el mismo futbolista declarara que uno de sus sueños era ponerse la azul y oro? Hay varios motivos que llevaron al Huaso a declinar la propuesta para jugar en Boca. Primero y principal, los tiempos del jugador y del Consejo de Fútbol no eran los mismos. Mientras Román y compañía lo querían ya en Ezeiza, el ex Fenerbahce pretendía tomarse un tiempo más para tomar una decisión.
Es cierto que al carrilero le entusiasma la posibilidad de cambiar de aire y tener su primera experiencia como profesional en Sudamérica. Pero hay una cuestión que no es menor: Boca recién regresó a los entrenamientos este lunes y el resto de los equipos (europeos) que lo pretenden ya compiten oficialmente desde hace rato. El primer partido del Xeneize será recién el 17/9, cuando visite a Libertad de Paraguay por la Copa Libertadores.
El segundo punto por el que Isla rechazó la oferta de Román fue por un tema personal. Su esposa, la modelo Galadriel Caldirola, es española y tiene a toda su familia en ese país. Para ellos sería un cambio muy grande mudarse a la Argentina. Y eso terminó de empantanar la negociación. "Fui claro con Román: no es un tema de dinero. Es también la seguridad que yo quiero tener para mi mujer y mi hija", dijo en su momento el lateral de 32 años.
Por último, el Huaso sabe que si pega la vuelta a Sudamérica, casi que daría por terminada su carrera en Europa, donde juega desde el 2007. Allí jugó en Italia (Udinese, Juventus y Cagliari), Inglaterra (Queens Park Rangers), Francia (Olympique de Marsella) y Turquía (Fenerbahce). De las cinco ligas top, sólo le falta pasar por Alemania y España. Y justamente desde la Liga recibió varios sondeos, el más fuerte del Betis.
La negativa de Isla, de todos modos, pareciera haber inquietado más al Consejo que al propio Miguel Russo, quien más allá de su deseo lógico de contar con la mayor cantidad de futbolistas de jerarquía por puesto, está muy tranquilo con el presente de Buffarini. El problema es que el cordobés todavía no arregló la renovación de su contrato y, si bien tiene vínculo hasta 2021, sigue siendo un tema a tener en cuenta.
La primera oferta del club fue rechazada por Buffarini, cuyo salario quedó completamente desfasado en relación a la escalada del dólar y pretende firmar por dos temporadas más y no por una, como era la intención de Boca. Ya sin Isla de por medio, las charlas continuarán y, según cuentan desde el lado del futbolista, no habrá problemas para llegar a un acuerdo.
