Primer sorpresón: Orlando Magic gana al mejor equipo del año
Los Magic, sin dos de sus mejores hombres, controlaron a los Bucks, líderes de la NBA en la fase regular, y les ganaron el primer punto.
Mike Maestre
As
La historia se repite. En la apertura de los Playoffs 2019 los Magic dieron la campanada en Toronto al ganar a los Raptors, a la postre campeones de la NBA, cerrando con un triplazo de D.J. Augustin ante Marc Gasol. Esta vez más cerca de su casa, en el complejo de la Walt Disney Company en Florida, los Magic han vuelto a hacerlo. Llegando con muy pocas opciones en las apuestas por su irregularísima fase regular y porque no cuentan con dos de sus mejores hombres (Jonathan Isaac, para toda la temporada, y Aaron Gordon, que regresará pronto), campanazo de nuevo.
Los Magic se han cargado a los Bucks en el primero de los partidos que tienen que jugar en su eliminatoria de la Conferencia Este, una de las cuatro de la primera ronda. La más desigual, a priori, acaba de cambiar de signo nada más empezar. Y sin echar mano de la suerte, pura calidad y trabajo a la hora de detectar los puntos fuertes del rival para anularlos. No es la primera vez que los de Milwaukee se ven frenados por un rival que sabe tocarles la fibra y parece que Steve Clifford y sus jugadores han tocado en la tecla. Hasta donde les llegue la gasolina.
Esto es un sorpresón por todo lo contado anteriormente y porque hablamos de Giannis Antetokounmpo, el que -seguro- va a ser elegido MVP de la Temporada por segunda ocasión consecutiva próximamente y de los Bucks, líder absoluto de la Liga durante todo el año y con un récord total de victorias (56-17) que superaba en 23 al de su rival. Diferencia abismal que no se ha visto en el primer encontronazo, en el que los Magic se han llevado el botín por 110-122.
Dominio absoluto de los tiempos desde los primeros minutos para el equipo de Orlando. Se confió Milwaukee. La diferencia subía fácil de los diez, se instalaba más cercana a los quince o veinte, y todo parecía seguir un plan. Anteto era el primer en llegar a los dobles dígitos en su equipo, que iba relajado sabiendo que con un par de tirones podían situarse cerca. Pero no contaban con que los Magic también jugaban. Durante algunos minutos incluso con Fultz y Augustin en pista al mismo tiempo, se permitió hasta pruebas el conjunto hoy visitante. Los dos bases manejaban a su antojo y era el montenegrino Nikola Vucevic el que ponía la mayoría de los puntos.
Al inicio de la segunda mitad sí lo intentaron los Bucks, pero ahí se dieron cuenta de que delante había una auténtica roca. Mal control de partido de Bledsoe e intentos espurios de Hill, desaparición de Khris Middleton (a los 10 puntos llegó con un 3/10 en tiros) y muy poca aportación de los secundarios. Lopez se estaba pegando con Vucevic, que le sacaba de la zona y le hacía mucha pupa; de los dos intentos en ese tercer periodo, dos tiros desde el mismo flanco del pívot europeo cortaron la racha de los de Wisconsin. Matthews terminó renqueante por un golpe y Korver se fue con la nariz sangrante, pero no es excusa. Antetokounmpo se vio muy solo y cometió errores a la par que fue defendido por exteriores como Ross o Ennis, muy atléticos. Se buscaron emparejamientos con Birch, que no estuvo fino, para sacar faltas, pero no pasó de ahí la imaginación de un equipo del que se esperaba todo tras liderar el Este toda la temporada. Evan Fournier, que llevaba 0 puntos al empezar el último periodo, fue el que declaró visto para sentencia el enfrentamiento con tres triples.
Inútil 31+17 de Giannis frente a un Nikola Vucevic que estuvo presente en ataque, con 35 puntos, y en defensa, algo que se le cuestiona con facilidad, frenando a Lopez y los rechaces (cogió 14) de los tiros exteriores de su contrario.
Mike Maestre
As
La historia se repite. En la apertura de los Playoffs 2019 los Magic dieron la campanada en Toronto al ganar a los Raptors, a la postre campeones de la NBA, cerrando con un triplazo de D.J. Augustin ante Marc Gasol. Esta vez más cerca de su casa, en el complejo de la Walt Disney Company en Florida, los Magic han vuelto a hacerlo. Llegando con muy pocas opciones en las apuestas por su irregularísima fase regular y porque no cuentan con dos de sus mejores hombres (Jonathan Isaac, para toda la temporada, y Aaron Gordon, que regresará pronto), campanazo de nuevo.
Los Magic se han cargado a los Bucks en el primero de los partidos que tienen que jugar en su eliminatoria de la Conferencia Este, una de las cuatro de la primera ronda. La más desigual, a priori, acaba de cambiar de signo nada más empezar. Y sin echar mano de la suerte, pura calidad y trabajo a la hora de detectar los puntos fuertes del rival para anularlos. No es la primera vez que los de Milwaukee se ven frenados por un rival que sabe tocarles la fibra y parece que Steve Clifford y sus jugadores han tocado en la tecla. Hasta donde les llegue la gasolina.
Esto es un sorpresón por todo lo contado anteriormente y porque hablamos de Giannis Antetokounmpo, el que -seguro- va a ser elegido MVP de la Temporada por segunda ocasión consecutiva próximamente y de los Bucks, líder absoluto de la Liga durante todo el año y con un récord total de victorias (56-17) que superaba en 23 al de su rival. Diferencia abismal que no se ha visto en el primer encontronazo, en el que los Magic se han llevado el botín por 110-122.
Dominio absoluto de los tiempos desde los primeros minutos para el equipo de Orlando. Se confió Milwaukee. La diferencia subía fácil de los diez, se instalaba más cercana a los quince o veinte, y todo parecía seguir un plan. Anteto era el primer en llegar a los dobles dígitos en su equipo, que iba relajado sabiendo que con un par de tirones podían situarse cerca. Pero no contaban con que los Magic también jugaban. Durante algunos minutos incluso con Fultz y Augustin en pista al mismo tiempo, se permitió hasta pruebas el conjunto hoy visitante. Los dos bases manejaban a su antojo y era el montenegrino Nikola Vucevic el que ponía la mayoría de los puntos.
Al inicio de la segunda mitad sí lo intentaron los Bucks, pero ahí se dieron cuenta de que delante había una auténtica roca. Mal control de partido de Bledsoe e intentos espurios de Hill, desaparición de Khris Middleton (a los 10 puntos llegó con un 3/10 en tiros) y muy poca aportación de los secundarios. Lopez se estaba pegando con Vucevic, que le sacaba de la zona y le hacía mucha pupa; de los dos intentos en ese tercer periodo, dos tiros desde el mismo flanco del pívot europeo cortaron la racha de los de Wisconsin. Matthews terminó renqueante por un golpe y Korver se fue con la nariz sangrante, pero no es excusa. Antetokounmpo se vio muy solo y cometió errores a la par que fue defendido por exteriores como Ross o Ennis, muy atléticos. Se buscaron emparejamientos con Birch, que no estuvo fino, para sacar faltas, pero no pasó de ahí la imaginación de un equipo del que se esperaba todo tras liderar el Este toda la temporada. Evan Fournier, que llevaba 0 puntos al empezar el último periodo, fue el que declaró visto para sentencia el enfrentamiento con tres triples.
Inútil 31+17 de Giannis frente a un Nikola Vucevic que estuvo presente en ataque, con 35 puntos, y en defensa, algo que se le cuestiona con facilidad, frenando a Lopez y los rechaces (cogió 14) de los tiros exteriores de su contrario.