La movida mundial de Boca
EL Xeneize abrirá consulados en distintos países para los socios del exterior. Y ya hay 64 trámites. Desde Irak hasta Mauritania, una pasión sin fronteras.
Olé
La pasión por Boca no tiene límites. Ni afectivos ni geográficos. Ni étnicos ni idiomáticos. En cada rincón del mundo late un corazón azul y oro y cada vez son más los hinchas que expanden este sentimiento único por diferentes países, regiones y continentes. Ahora cada uno de ellos (y ellas) podrá tener un rol protagónico dentro del propio club. Sí, Boca lanzó un programa para constituir consulados en las principales ciudades del planeta. Desde Andorra hasta Tailandia, pasando por Arabia Saudita, Irak, Japón, China, Marruecos, Mauritania, Túnez, Qatar, Siria y Argelia, entre 44 naciones (y 64 ciudades) que ya se inscribieron para formar parte de esta movida impulsada por el presidente del club, Jorge Amor Ameal.
¿Qué función tienen estos consulados? Básicamente, ser una pata institucional del club en cada uno de los países y trabajar de manera mancomunada con las oficinas de Brandsen 805. Si un hincha de Boca de Arabia quiere asociarse, puede iniciar el trámite desde el sitio web y luego retirar el carnet en el consulado. Si una persona de Nueva Zelanda quiere conocer el Templo, debe gestionar la visita mediante el consulado. ¿Estás en Siria y no sabés por dónde pasan un partido de Boca? Te das una vuelta por el consulado. Estas sedes además funcionarán como punto de encuentro y de consulta para aquellos fanas que residan o se encuentren transitoriamente en otros países.
“Esta iniciativa superó todas las expectativas. Cada vez son más los grupos de hinchas que mandan mails al club para abrir consulados, desde países como España, Francia, Italia o Inglaterra hasta otros más exóticos como Kuwait, Bagdad o Jordania. Soñamos con que en cada país del mundo flamee una bandera azul y oro”, le cuenta a Olé Carlos Colombo, presidente del Departamento de Interior y Exterior. Quien encabeza este proyecto es Martín Montero, a cargo de Exterior, junto a un grupo de dirigentes conformado por Carlos Montero (tesorero del club), Daniel Ivoskus, Fernando Cuscuela, Chelo Núñez, Yamil Mahmud, Vicky Arrúe, Fernando Kocsis y Horacio Paolini.
Salem Aljamiah es el nuevo cónsul del Xeneize en Kuwait, un país árabe ubicado en el Golfo Pérsico, a 13.000 kilómetros de Buenos Aires. Se enamoró de Boca el día de la vuelta de Diego en 1995 y vino cuatro veces al Templo. “Nuestro consulado cuenta con más de 40 miembros y ya arrancamos una campaña masiva para sumar muchos más socios para el club. Más: estamos trabajando para abrir otro consulado en Omán y analizando la posibilidad de expandirnos en 2021 a Arabia Saudita y Bahrein”, le cuenta Salem a Olé, en sintonía con la idea de la dirigencia: llegar al millón de socios en todo el planeta. En Asia hay varios consulados más que están próximos a ponerse en marcha. Uno de ellos es el de Japón, que tendrá como referente a Isamu Kato, un personaje muy popular en las redes sociales que sigue a Boca a todas partes.
Detrás de cada consulado hay una historia. Bruno Bajen nació en la Argentina, pero en 1979 se fue a vivir a Estocolmo. Tenía cuatro años cuando sus padres se exiliaron durante la última dictadura cívico-militar. De muy chiquito vivió en La Boca y cada que viene a Buenos Aires aprovecha a visitar el Templo. “Hoy sigo Boca a través de Olé. Tengo un tatuaje del club y cuando la gente lo ve, enseguida sabe de qué se trata. Nuestro consulado está integrado por unas 35 personas. Y no tengo dudas de que vamos a ser muchos más”, explica.
Israel es uno de los países con mayor cantidad de argentinos. Y los hinchas de Boca son mayoría. Gabriel Eizikovits emigró junto a su familia en 1994 y forma parte de una de las comunidades de bosteros más grandes del planeta. En Facebook son alrededor de 1.400 y cuando juega Boca unos 500 (entre argentinos e israelíes) se juntan a alentar al equipo en un pub. “Hacemos eventos sociales y culturales, asados, ayudamos a socios carenciados o con problemas de salud y aportamos publicidad a todo comercio de hinchas de Boca”, explica Gabriel, titular adjunto y tesorero del consulado.
Entre los países ya inscritos figuran Estados Unidos, México y grupos de hinchas de todo América Latina, que desde hace más de diez años laburan codo a codo con el club. En la misma línea, desde Boca también comenzó a trabajarse en una plataforma digital que les permita a los socios del exterior ver los partidos en directo y que puedan acceder a contenidos exclusivos, chats y reuniones virtuales con los jugadores, entre otros chiches.
Entre los nuevos es inevitable no citar a Cris Achkar, un santafesino con descendencia japonesa que vivió en Japón (estuvo en la final ante el Real) y hace diez años está radicado en China. Hoy tiene su propia empresa y dirige un equipo de fútbol universitario que juega con la camiseta de Boca. “Acá somos unos cuantos y nunca he visto hinchas de otros clubes de Argentina”, dice. Hoy es difícil saber cuántos fanas hay, ya que no se permite el uso de Facebook. ¿Su plan? “Llevar a Boca a lo más alto y que China sepa que somos los más grandes del mundo”.
La misma idea tiene Mariano Valdez, un argentino que vive en Mallorca desde 2019 y desde la isla colabora con el ciclo radial ConectadosXBoca. “En el consulado somos arriba de 200 y contamos con nuestro propio equipo de Primera y Senior, que juega contra peñas de otros clubes argentinos”, comenta. Del otro lado del Estrecho de Gibraltar aparece Mahdi Obeda, un marroquí que jamás pisó la Bombonera pero es fana del club. “Gracias al consulado vamos a sentirnos mucho más cerca de la Argentina”, destaca. Un planeta pintado de cónsul y oro.
Olé
La pasión por Boca no tiene límites. Ni afectivos ni geográficos. Ni étnicos ni idiomáticos. En cada rincón del mundo late un corazón azul y oro y cada vez son más los hinchas que expanden este sentimiento único por diferentes países, regiones y continentes. Ahora cada uno de ellos (y ellas) podrá tener un rol protagónico dentro del propio club. Sí, Boca lanzó un programa para constituir consulados en las principales ciudades del planeta. Desde Andorra hasta Tailandia, pasando por Arabia Saudita, Irak, Japón, China, Marruecos, Mauritania, Túnez, Qatar, Siria y Argelia, entre 44 naciones (y 64 ciudades) que ya se inscribieron para formar parte de esta movida impulsada por el presidente del club, Jorge Amor Ameal.
¿Qué función tienen estos consulados? Básicamente, ser una pata institucional del club en cada uno de los países y trabajar de manera mancomunada con las oficinas de Brandsen 805. Si un hincha de Boca de Arabia quiere asociarse, puede iniciar el trámite desde el sitio web y luego retirar el carnet en el consulado. Si una persona de Nueva Zelanda quiere conocer el Templo, debe gestionar la visita mediante el consulado. ¿Estás en Siria y no sabés por dónde pasan un partido de Boca? Te das una vuelta por el consulado. Estas sedes además funcionarán como punto de encuentro y de consulta para aquellos fanas que residan o se encuentren transitoriamente en otros países.
“Esta iniciativa superó todas las expectativas. Cada vez son más los grupos de hinchas que mandan mails al club para abrir consulados, desde países como España, Francia, Italia o Inglaterra hasta otros más exóticos como Kuwait, Bagdad o Jordania. Soñamos con que en cada país del mundo flamee una bandera azul y oro”, le cuenta a Olé Carlos Colombo, presidente del Departamento de Interior y Exterior. Quien encabeza este proyecto es Martín Montero, a cargo de Exterior, junto a un grupo de dirigentes conformado por Carlos Montero (tesorero del club), Daniel Ivoskus, Fernando Cuscuela, Chelo Núñez, Yamil Mahmud, Vicky Arrúe, Fernando Kocsis y Horacio Paolini.
Salem Aljamiah es el nuevo cónsul del Xeneize en Kuwait, un país árabe ubicado en el Golfo Pérsico, a 13.000 kilómetros de Buenos Aires. Se enamoró de Boca el día de la vuelta de Diego en 1995 y vino cuatro veces al Templo. “Nuestro consulado cuenta con más de 40 miembros y ya arrancamos una campaña masiva para sumar muchos más socios para el club. Más: estamos trabajando para abrir otro consulado en Omán y analizando la posibilidad de expandirnos en 2021 a Arabia Saudita y Bahrein”, le cuenta Salem a Olé, en sintonía con la idea de la dirigencia: llegar al millón de socios en todo el planeta. En Asia hay varios consulados más que están próximos a ponerse en marcha. Uno de ellos es el de Japón, que tendrá como referente a Isamu Kato, un personaje muy popular en las redes sociales que sigue a Boca a todas partes.
Detrás de cada consulado hay una historia. Bruno Bajen nació en la Argentina, pero en 1979 se fue a vivir a Estocolmo. Tenía cuatro años cuando sus padres se exiliaron durante la última dictadura cívico-militar. De muy chiquito vivió en La Boca y cada que viene a Buenos Aires aprovecha a visitar el Templo. “Hoy sigo Boca a través de Olé. Tengo un tatuaje del club y cuando la gente lo ve, enseguida sabe de qué se trata. Nuestro consulado está integrado por unas 35 personas. Y no tengo dudas de que vamos a ser muchos más”, explica.
Israel es uno de los países con mayor cantidad de argentinos. Y los hinchas de Boca son mayoría. Gabriel Eizikovits emigró junto a su familia en 1994 y forma parte de una de las comunidades de bosteros más grandes del planeta. En Facebook son alrededor de 1.400 y cuando juega Boca unos 500 (entre argentinos e israelíes) se juntan a alentar al equipo en un pub. “Hacemos eventos sociales y culturales, asados, ayudamos a socios carenciados o con problemas de salud y aportamos publicidad a todo comercio de hinchas de Boca”, explica Gabriel, titular adjunto y tesorero del consulado.
Entre los países ya inscritos figuran Estados Unidos, México y grupos de hinchas de todo América Latina, que desde hace más de diez años laburan codo a codo con el club. En la misma línea, desde Boca también comenzó a trabajarse en una plataforma digital que les permita a los socios del exterior ver los partidos en directo y que puedan acceder a contenidos exclusivos, chats y reuniones virtuales con los jugadores, entre otros chiches.
Entre los nuevos es inevitable no citar a Cris Achkar, un santafesino con descendencia japonesa que vivió en Japón (estuvo en la final ante el Real) y hace diez años está radicado en China. Hoy tiene su propia empresa y dirige un equipo de fútbol universitario que juega con la camiseta de Boca. “Acá somos unos cuantos y nunca he visto hinchas de otros clubes de Argentina”, dice. Hoy es difícil saber cuántos fanas hay, ya que no se permite el uso de Facebook. ¿Su plan? “Llevar a Boca a lo más alto y que China sepa que somos los más grandes del mundo”.
La misma idea tiene Mariano Valdez, un argentino que vive en Mallorca desde 2019 y desde la isla colabora con el ciclo radial ConectadosXBoca. “En el consulado somos arriba de 200 y contamos con nuestro propio equipo de Primera y Senior, que juega contra peñas de otros clubes argentinos”, comenta. Del otro lado del Estrecho de Gibraltar aparece Mahdi Obeda, un marroquí que jamás pisó la Bombonera pero es fana del club. “Gracias al consulado vamos a sentirnos mucho más cerca de la Argentina”, destaca. Un planeta pintado de cónsul y oro.