Iker Casillas anuncia oficialmente su retirada del fútbol
El guardameta, leyenda del Real Madrid y de la selección española, ha confirmado su adiós a los terrenos de juego un año y tres meses después de sufrir un infarto mientras entrenaba con el Porto
España, El País
Iker Casillas ha anunciado este martes su retirada definitiva del fútbol. Un año y tres meses después del infarto que sufrió mientras entrenaba con el Porto y que le ha mantenido alejado de los terrenos de juego desde entonces, el portero madrileño, de 39 años, ha oficializado lo que ya había ido dejando entrever en los últimos meses. “Hoy es uno de los días más importantes, y a la vez difíciles, de mi carrera deportiva: ha llegado el momento de decir adiós”, ha señalado Casillas en sus redes sociales. “Dejo atrás los tres palos que me vieron crecer como portero, los que en cada momento me colocaron en mi sitio y me obligaron a mantener los pies en la tierra, esos tres palos a los que tanto debo y que seguro que echaré de menos. Y allí también os dejaré a vosotros, mis fieles aliados, allí colgaré mis guantes”, ha profundizado el mostoleño.
“Se despide como jugador profesional uno de los futbolistas más importantes de nuestros 118 años de historia”, ha manifestado el Real Madrid, club en el que Casillas desarrolló la mayor parte de su carrera deportiva, en un comunicado de despedida. “El mejor portero de la historia del club y del fútbol español llegó a nuestra casa con 9 años. Aquí se formó y defendió nuestra camiseta durante 25 años, siendo ya para siempre uno de nuestros capitanes más emblemáticos. Iker Casillas se ha ganado el cariño del madridismo y es un referente de los valores que representan al Real Madrid”.
España, El País
Iker Casillas ha anunciado este martes su retirada definitiva del fútbol. Un año y tres meses después del infarto que sufrió mientras entrenaba con el Porto y que le ha mantenido alejado de los terrenos de juego desde entonces, el portero madrileño, de 39 años, ha oficializado lo que ya había ido dejando entrever en los últimos meses. “Hoy es uno de los días más importantes, y a la vez difíciles, de mi carrera deportiva: ha llegado el momento de decir adiós”, ha señalado Casillas en sus redes sociales. “Dejo atrás los tres palos que me vieron crecer como portero, los que en cada momento me colocaron en mi sitio y me obligaron a mantener los pies en la tierra, esos tres palos a los que tanto debo y que seguro que echaré de menos. Y allí también os dejaré a vosotros, mis fieles aliados, allí colgaré mis guantes”, ha profundizado el mostoleño.
“Se despide como jugador profesional uno de los futbolistas más importantes de nuestros 118 años de historia”, ha manifestado el Real Madrid, club en el que Casillas desarrolló la mayor parte de su carrera deportiva, en un comunicado de despedida. “El mejor portero de la historia del club y del fútbol español llegó a nuestra casa con 9 años. Aquí se formó y defendió nuestra camiseta durante 25 años, siendo ya para siempre uno de nuestros capitanes más emblemáticos. Iker Casillas se ha ganado el cariño del madridismo y es un referente de los valores que representan al Real Madrid”.
El exguardameta del Real Madrid y del Porto, además de la selección, deja atrás de esta forma una trayectoria de casi dos décadas en las que se ha convertido en una de las grandes leyendas del fútbol español. Desde que en septiembre de 1999 debutara con el Real Madrid en un partido de Liga en San Mamés, Casillas disputó 725 partidos oficiales con el club blanco, una cifra solo superada por Raúl, con 741. Ya en el año de su debut se convirtió en el portero más joven en jugar y ganar una final de Champions, al lograr la Octava del club blanco ante el Valencia en lo que sería el preámbulo de una carrera al alcance de muy pocos futbolistas.
Posteriormente llegarían la Novena contra el Bayer Leverkusen, en la que acabó siendo decisivo tras entrar al campo sustituyendo al lesionado César y supuso el punto de inflexión para asentarse como titular en la portería blanca, y la Décima ante el Atlético, ya como capitán. Además, conquistó cinco Ligas y dos Copas del Rey, dejando para el recuerdo multitud de paradas milagrosas y siendo reconocido por la FIFA y la UEFA durante cinco años consecutivos como mejor portero del mundo.
Apenas un año después de debutar con el Madrid le llegó el turno con la selección, con la que también es segundo en número de internacionalidades, con 167, en este caso por detrás de Sergio Ramos. Tras unos primeros capítulos de sinsabores, entre 2008 y 2012 capitaneó a una generación única que logró un triplete inédito, conquistando consecutivamente dos Eurocopas (Austria y Suiza, y Polonia y Ucrania) y el Mundial de Sudáfrica, cita que coronó al combinado nacional como uno de los mejores equipos de la historia.
El 11 de julio de 2010, el mostoleño se convirtió en Johannesburgo en el primer español en alzar como campeón la Copa del Mundo tras una final contra Holanda en la que protagonizó una jugada icónica en un mano a mano con Robben, permitiendo a España llegar a la prórroga con 0-0 inicial, que posteriormente desharía Iniesta. Ese torneo, en el que tuvo actuaciones clave como la de cuartos ante Paraguay, deteniendo un penalti también con 0-0, acabó por consagrarle como uno de los grandes iconos del fútbol español.
Salida al Porto
En 2015, con 25 temporadas como jugador del Real Madrid a sus espaldas (16 en el primer equipo), abandonó el club blanco tras unos últimos años abruptos y firmó por el Oporto, con el que jugó cuatro campañas (156 encuentros oficiales) y siguió dando lustre a su palmarés, al que añadió otra liga. En el club portugués, Casillas continuó una carrera deportiva que le llevó a superar la icónica cifra del millar de partidos como profesional, siendo el séptimo futbolista con más encuentros oficiales hasta la fecha, con 1092.
Llegar a la cuarentena en activo era su último objetivo. Por ello, había firmado en marzo de 2019 un contrato que le vinculaba al Oporto por un año más con opción a otro. Pero tan solo 40 días después, un infarto de miocardio durante un entrenamiento con el Oporto dio al traste con sus intenciones, y obligó al guardameta a convivir con una situación imposible de compatibilizar con la exigencia del deporte competitivo. A partir de ese momento, Casillas empezó a enfilar la retirada sin aludir directamente a ella, primero ejerciendo como nexo entre jugadores, técnicos y directiva del Oporto y, posteriormente, anunciando su intención de concurrir a las elecciones de la Federación Española de Fútbol, una posibilidad que acabó descartando hace dos meses.