Ferrari: una crisis sangrante que va a más
GP Bélgica F1 2020 Quintos en Constructores a 203 puntos de Mercedes
José Luis Ruiz
Marca
¡Vaya fin de semana de Ferrari! El año pasado, Charles Leclerc se llevó la victoria en el icónico circuito de Spa-Francorchamps. Es más, la temporada pasada, los de Maranello firmaron un 1-2 en la parrilla y un 1-2 en la bandera a cuadros. En 2020, el año marcado por la pandemia del coronavirus, la 'Scuderia' ha protagonizado un ridículo tremendo. Sebastian Vettel quedó 13º y Leclerc 14º. Es decir, sin puntos. Nada. El peor resultado de Ferrari en una década.
...Y no sólo fue la carrera. En los entrenamientos libres 3, 'Seb' acabó en... ¡la última plaza! Y en la clasificación hubo instantes que fueron una cruel pesadilla para los 'tifosi'. Los bólidos rojos se vieron abocados al desastre del domingo porque salían desde la séptima fila y tampoco era de esperar que se produjera un milagro del sábado al domingo.
Así no es de extrañar que tras este humillante resultado, Mattia Binotto señalara: "Estamos decepcionados y enojados, al igual que nuestros fans y con buenas razones. Esta es una pista que requiere potencia y eficiencia aerodinámica y de nada sirve esconderse porque de momento nos falta lo uno y lo otro. El año pasado el motor encubría parcialmente los límites del coche, pero este año ya no es así. Los límites del coche están quedando expuestos. En este punto está claro que tenemos que mejorar", agregó el jefe del equipo del 'Cavallino Rampante'. Con esto queda claro que el SF1000 no sólo padece problemas relacionados con la unidad de potencia. Es mucho más. Es un coche que no está siendo competitivo desde el principio. Y esta crisis sangrante ha ido más. Hasta que Ferrari ha tocado fondo en el Gran Premio de Bélgica. En Spa, los de Maranello no se pudieron defender. Las 44 vueltas fueron un suplicio.
Tras siete carreras, Ferrari es quinto en el Campeonato de Constructores con 61 puntos, a años luz de Mercedes: 203 les separan de los líderes del campeonato. "Creo que está mal molestarnos con la palabra crisis por el momento que estamos atravesando. Ciertamente este es un muy mal resultado dentro de la temporada difícil que estamos viviendo. Lo sabíamos, lo vimos con las pruebas de invierno. Luego vino el parón y la imposibilidad de desarrollar el coche. Sabemos lo que estamos construyendo para el futuro. No estamos en crisis, sino en medio de una tormenta. Conocemos nuestra ruta y debemos mantenernos y seguir mirando hacia el futuro. El resultado en Spa es decepcionante y hay poco que decir", ha enfatizado Binotto en declaraciones a 'Sky Sports Italia'.
Binotto ha proseguido así su argumentación: "Todos asumimos la responsabilidad de esta situación. Yo lo asumo como jefe de equipo, así como todos los que trabajan en Maranello hacen lo propio. Estamos todos en el mismo barco. Aunque el equipo está en medio de la tormenta, estamos muy unidos".
En el Gran Premio de Bélgica, la 'Scuderia quedó como octava escudería. Perdió la batalla contra los AlphaTauri y Alfa Romeo y sólo fue capaz de estar por delante de Haas y Williams. De cara a Monza y Mugello, dos carreras seguidas en Italia (serán los grande premios número 999 y 1000 de la Scuderia en la historia del Mundial de F1), la cosa tampoco pinta muy bien. Así lo admite un Sebastian Vettel resignado. "Tenemos dos carreras importantes para el equipo en las próximas dos semanas, así que ahí es donde nos tenemos que centrar, pero también tenemos que ser realistas, ya que no podemos esperar milagros. El paquete es el que es, no somos tan fuertes como quisiéramos, por lo que debemos mantenernos optimistas y ver las cosas buenas, incluso aunque en este momento no haya muchas", ha recalcado el tetracampeón.
Seb sabía de antemano lo que le esperaba en Spa: "Probé muchas cosas en la carrera en cuanto a pilotaje para tratar de evitar los problemas del monoplaza, pero simplemente no fuimos lo suficientemente rápidos. No se pueden realizar milagros durante la carrera. Puedes trabajar un par de décimas, pero creo que era difícil tener un ritmo decente en esta carrera y este fin de semana. Como dije, hay muchas cosas que hemos aprendido y tenemos que mantener la calma y no frustrarnos, porque la frustración generalmente no nos lleva a ningún lado".
Por su parte, Charles Leclerc estaba más hundido que su compañero de equipo. Y eso que Vettel es 13º en el campeonato con 16 puntos, mientras que el monegasco es 5º con 45 unidades en su casillero. "Esto es feo, muy feo. Tenemos que hacer algo. Ha sido muy frustrante porque ha sido un fin de semana muy difícil para nosotros y la carrera no ha sido mejor, ya que hemos tenido problemas en las dos paradas en boxes que hicimos, lo cual me hizo perder bastante tiempo y posiciones. Traté de remontar, pero es muy difícil para nosotros adelantar incluso con DRS, así que tenemos que trabajar y encontrar algo, porque así es muy difícil", ha apostillado.
Leclerc no esperaba que haya un gran cambio a corto plazo. Es pesimista y no lo oculta. "En Monza será muy difícil. Si hablamos de Mugello o Imola, quizás haya alguna esperanza, pero Monza será realmente difícil para nosotros, es muy similar a Spa", ha sentenciado.
José Luis Ruiz
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¡Vaya fin de semana de Ferrari! El año pasado, Charles Leclerc se llevó la victoria en el icónico circuito de Spa-Francorchamps. Es más, la temporada pasada, los de Maranello firmaron un 1-2 en la parrilla y un 1-2 en la bandera a cuadros. En 2020, el año marcado por la pandemia del coronavirus, la 'Scuderia' ha protagonizado un ridículo tremendo. Sebastian Vettel quedó 13º y Leclerc 14º. Es decir, sin puntos. Nada. El peor resultado de Ferrari en una década.
...Y no sólo fue la carrera. En los entrenamientos libres 3, 'Seb' acabó en... ¡la última plaza! Y en la clasificación hubo instantes que fueron una cruel pesadilla para los 'tifosi'. Los bólidos rojos se vieron abocados al desastre del domingo porque salían desde la séptima fila y tampoco era de esperar que se produjera un milagro del sábado al domingo.
Así no es de extrañar que tras este humillante resultado, Mattia Binotto señalara: "Estamos decepcionados y enojados, al igual que nuestros fans y con buenas razones. Esta es una pista que requiere potencia y eficiencia aerodinámica y de nada sirve esconderse porque de momento nos falta lo uno y lo otro. El año pasado el motor encubría parcialmente los límites del coche, pero este año ya no es así. Los límites del coche están quedando expuestos. En este punto está claro que tenemos que mejorar", agregó el jefe del equipo del 'Cavallino Rampante'. Con esto queda claro que el SF1000 no sólo padece problemas relacionados con la unidad de potencia. Es mucho más. Es un coche que no está siendo competitivo desde el principio. Y esta crisis sangrante ha ido más. Hasta que Ferrari ha tocado fondo en el Gran Premio de Bélgica. En Spa, los de Maranello no se pudieron defender. Las 44 vueltas fueron un suplicio.
Tras siete carreras, Ferrari es quinto en el Campeonato de Constructores con 61 puntos, a años luz de Mercedes: 203 les separan de los líderes del campeonato. "Creo que está mal molestarnos con la palabra crisis por el momento que estamos atravesando. Ciertamente este es un muy mal resultado dentro de la temporada difícil que estamos viviendo. Lo sabíamos, lo vimos con las pruebas de invierno. Luego vino el parón y la imposibilidad de desarrollar el coche. Sabemos lo que estamos construyendo para el futuro. No estamos en crisis, sino en medio de una tormenta. Conocemos nuestra ruta y debemos mantenernos y seguir mirando hacia el futuro. El resultado en Spa es decepcionante y hay poco que decir", ha enfatizado Binotto en declaraciones a 'Sky Sports Italia'.
Binotto ha proseguido así su argumentación: "Todos asumimos la responsabilidad de esta situación. Yo lo asumo como jefe de equipo, así como todos los que trabajan en Maranello hacen lo propio. Estamos todos en el mismo barco. Aunque el equipo está en medio de la tormenta, estamos muy unidos".
En el Gran Premio de Bélgica, la 'Scuderia quedó como octava escudería. Perdió la batalla contra los AlphaTauri y Alfa Romeo y sólo fue capaz de estar por delante de Haas y Williams. De cara a Monza y Mugello, dos carreras seguidas en Italia (serán los grande premios número 999 y 1000 de la Scuderia en la historia del Mundial de F1), la cosa tampoco pinta muy bien. Así lo admite un Sebastian Vettel resignado. "Tenemos dos carreras importantes para el equipo en las próximas dos semanas, así que ahí es donde nos tenemos que centrar, pero también tenemos que ser realistas, ya que no podemos esperar milagros. El paquete es el que es, no somos tan fuertes como quisiéramos, por lo que debemos mantenernos optimistas y ver las cosas buenas, incluso aunque en este momento no haya muchas", ha recalcado el tetracampeón.
Seb sabía de antemano lo que le esperaba en Spa: "Probé muchas cosas en la carrera en cuanto a pilotaje para tratar de evitar los problemas del monoplaza, pero simplemente no fuimos lo suficientemente rápidos. No se pueden realizar milagros durante la carrera. Puedes trabajar un par de décimas, pero creo que era difícil tener un ritmo decente en esta carrera y este fin de semana. Como dije, hay muchas cosas que hemos aprendido y tenemos que mantener la calma y no frustrarnos, porque la frustración generalmente no nos lleva a ningún lado".
Por su parte, Charles Leclerc estaba más hundido que su compañero de equipo. Y eso que Vettel es 13º en el campeonato con 16 puntos, mientras que el monegasco es 5º con 45 unidades en su casillero. "Esto es feo, muy feo. Tenemos que hacer algo. Ha sido muy frustrante porque ha sido un fin de semana muy difícil para nosotros y la carrera no ha sido mejor, ya que hemos tenido problemas en las dos paradas en boxes que hicimos, lo cual me hizo perder bastante tiempo y posiciones. Traté de remontar, pero es muy difícil para nosotros adelantar incluso con DRS, así que tenemos que trabajar y encontrar algo, porque así es muy difícil", ha apostillado.
Leclerc no esperaba que haya un gran cambio a corto plazo. Es pesimista y no lo oculta. "En Monza será muy difícil. Si hablamos de Mugello o Imola, quizás haya alguna esperanza, pero Monza será realmente difícil para nosotros, es muy similar a Spa", ha sentenciado.