Murillo ordena romper candado para abrir un pabellón sin uso de la cárcel en Cantumarca
Potosí, Página Siete Digital
El ministro de Gobierno, Arturo Murillo, ordenó la apertura de un ala del Centro de Rehabilitación Santo Domingo, en Cantumarca, Potosí, sector que permanecía cerrado desde hace seis meses a la espera de una inauguración por parte de la Gobernación. El hecho ocurrió el 4 de julio.
La autoridad lamentó la actitud del gobernador Omar Véliz, a “quien no le daba la gana de entregar (la obra), quería hacer su inauguración”.
Según Murillo, este pabellón tiene una capacidad para 120 privados de libertad, lo que permitirá descongestionar el centro penitenciario y evitar que haya sufrimiento entre quienes cometieron un error y están pagando ante la sociedad.
A su llegada, Murillo pidió un esmeril para cortar el candado. “Vuelen esa mierda”, dijo el ministro. Luego de que se abrió la reja indicó que el ala estaba inauguarda y bromeó, “guárdenme una pieza, uno nunca sabe”.
“Es un delito, no puede tener a los privados de libertad hacinados teniendo semejante pabellón. Rompimos el candado y se está disponiendo que estos pabellones sean ocupados y se baje el asinamiento”, señaló, según un video de el Federal.
Añadió que los privados de libertad ya están pagando por los errores que cometieron, pero que no pueden pagar por doble partida. “Nos parece una vergüenza y lo denunciamos. Ojalá que él (el Gobernador de Potosí) no venga a pasar unos días porque es la casa del jabonero”.
El ministro de Gobierno, Arturo Murillo, ordenó la apertura de un ala del Centro de Rehabilitación Santo Domingo, en Cantumarca, Potosí, sector que permanecía cerrado desde hace seis meses a la espera de una inauguración por parte de la Gobernación. El hecho ocurrió el 4 de julio.
La autoridad lamentó la actitud del gobernador Omar Véliz, a “quien no le daba la gana de entregar (la obra), quería hacer su inauguración”.
Según Murillo, este pabellón tiene una capacidad para 120 privados de libertad, lo que permitirá descongestionar el centro penitenciario y evitar que haya sufrimiento entre quienes cometieron un error y están pagando ante la sociedad.
A su llegada, Murillo pidió un esmeril para cortar el candado. “Vuelen esa mierda”, dijo el ministro. Luego de que se abrió la reja indicó que el ala estaba inauguarda y bromeó, “guárdenme una pieza, uno nunca sabe”.
“Es un delito, no puede tener a los privados de libertad hacinados teniendo semejante pabellón. Rompimos el candado y se está disponiendo que estos pabellones sean ocupados y se baje el asinamiento”, señaló, según un video de el Federal.
Añadió que los privados de libertad ya están pagando por los errores que cometieron, pero que no pueden pagar por doble partida. “Nos parece una vergüenza y lo denunciamos. Ojalá que él (el Gobernador de Potosí) no venga a pasar unos días porque es la casa del jabonero”.