Los verdaderos motivos del caos de Independiente
Pusineri se reunió con Burruchaga y los dirigentes para interiorizarse acerca de cuál es la situación del club porque no quiere más sorpresas. Olé te cuenta al detalle cómo está el difícil panorama.
Olé
La sensación que se percibe en Independiente es que cada mañana puede explotar una bomba. Lo sabe el técnico, Lucas Pusineri. Lo advierte el manager, Jorge Burruchaga. Lo tienen claro los dirigentes. Los cimientos del club se sacudieron con pésimas noticias en los últimos meses: intimaciones por parte de jugadores, fallos de la FIFA en contra, reclamos por deudas que se acumularon, embargos y ahora hay futbolistas que amenazan con quedar libres si no aceptan venderlos.
El entrenador quedó en medio de un bombardeo entre el plantel y los directivos. Es por eso que ayer mantuvo una reunión de cinco horas con Burruchaga, el vicepresidente, Pablo Moyano, el secretario general, Héctor Maldonado, el secretario deportivo, Jorge Damiani, y los abogados del club para interiorizarse acerca de cuáles son los focos de incendio que pueden llegar a propagarse en los próximos días. En definitiva, Pusineri no quiere más sorpresas y es por eso que desea estar al tanto de todos los inconvenientes que aquejan al club.
Fueron muchos los problemas que estallaron desde que comenzó la cuarentena. A pesar de que aún esperan el fallo del TAS, Gastón Silva quedó libre por falta de pago. Cecilio Domínguez hizo lo mismo y ahora comenzó una batalla legal para tratar de evitar su salida. Martín Campaña pidió ser vendido y los dirigentes le exigieron que traiga una oferta de al menos 2.000.000 de dólares. Juan Sánchez Miño expuso su deseo de partir. Silvio Romero avisó que su ciclo está cumplido. Y son varios los jugadores que podrían seguir el mismo camino. La realidad es que los directivos les plantearon a muchos futbolistas que sólo están en condiciones de pagarles el 5% de lo que figura en sus contratos y no muchos están dispuestos a aceptar esas condiciones. Independiente no tiene dinero y la CD depende exclusivamente de la buena predisposición de los jugadores para evitar que un gran porcentaje del plantel se considere despedido por falta de pago, lo que incrementaría exponencialmente el pasivo ya que el club debería abonar onerosas indemnizaciones que lo dejarían a orillas de la quiebra.
Independiente se encuentra sumergido en un contexto en el que se precisa mucha cintura para negociar. No hay plata y sobran deudas. El club tiene que pagar 20.238.889 dólares de acá a fin de año. Se trata de una cifra en la que se contemplan deudas de pases, multas por atrasos en los pagos, rescisiones anticipadas de contratos e indemnizaciones. Es por eso que los directivos piensan crear un Comité Económico para tratar los temas de urgencia.
¿Cuánto dinero le ingresará al club? Apenas 940.000 dólares de la venta de Víctor Cuesta a Inter de Porto Alegre. Los u$s 1.600.000 que entraron por la transferencia de Nicolás Figal a Inter de Miami ya fueron destinados a pagar los sueldos de parte del plantel hasta abril.
Esta semana, le pagarían al plantel los salarios de mayo. El problema es que, como consecuencia de un embargo de 130.000 dólares que impuso el ex directivo Claudio Ciancio, son muchos los empleados de la institución que aún no vieron depositados los haberes del corriente mes.
Todos los problemas tienen un denominador común: las deudas. Es por eso que Pusineri quiere saber qué, cuánto y a quiénes se les debe dinero para tener un panorama certero acerca de cuál es el escenario sobre el que está parado.
El Rojo tiene que pagarle dos cuotas de 1.600.000 dólares y una penalidad de 800.000 a América de México por Cecilio. A ese mismo club también debe abonarle 1.841.389 por el pase de Silvio Romero y 637.500 de multa por no haber cumplido con los plazos establecidos. La FIFA también falló en contra de Independiente por no haber terminado de cancelar una deuda de 1.580.000 con Defensor Sporting por Carlos Benavídez y, en ese caso, el club también tendrá que desembolsar 200.000 de penalidad. Además habrá que pagarle 1.600.000 a Torino por Gastón Silva, 270.000 a Pumas por haberle soplado al jugador de forma irregular y el central exige 2.000.000 en concepto de indemnización. Si bien el caso fue elevado al TAS, todo se trató de una estrategia para ganar tiempo ya que en el Rojo saben que el fallo será a favor del jugador. Celta de Vigo reclama 900.000 por Pablo Hernández, River pide 750.000 por Alexander Barboza, Boca exige 600.000 por Pablo Pérez, a quien además falta pagarle 920.000 de indemnización. A Aldosivi se le deben 770.000 por Christian Chávez y 100.000 a Chongqing Lifan por Emmanuel Gigliotti. Además, Gonzalo Verón exige 1.300.000, Francisco Silva 890.000 y Emiliano Rigoni 300.000. Y el 15 de diciembre Independiente deberá desembolsar 450.000 para que Andrés Roa no vuelva a Deportivo Cali.
Los inconvenientes financieros vienen desde hace mucho tiempo en Independiente. En lo que va de la presidencia de Hugo Moyano, que comenzó a mediados de 2014, se cancelaron 24 deudas por un monto de 39.870.756 dólares. Las mismas fueron contraídas en gestiones anteriores. El líder camionero logró estabilizar la economía de la institución en sus primeros tres años de presidencia. Para armar el equipo que ganó la Sudamericana, Ariel Holan llevó al club a gastar apenas u$s 2.800.000 para traer diez jugadores de los que nueve llegaron con el pase en su poder. Tras la vuelta olímpica en el Maracaná, el Profesor llevó al club a gastar 24.7000.000 para sumar refuerzos con salarios astronómicos que en la mayoría de los casos no rindieron como se esperaba. Y fue en ese período cuando comenzó la debacle que se profundizó cuando a Sebastián Beccacece , quien duró apenas 16 partidos, le permitieron gastar 16.500.000 verdes. En síntesis, en lo que va del ciclo de Moyano se gastaron 73.935.000 dólares para incorporar 57 futbolistas. De ese monto, 32.100.000 fueron invertidos en la primera presidencia y 41.835.000 en los últimos dos años y medio, lo que delata que la crisis de desató en los últimos tiempos y se agudizó con las devaluaciones.
El Rojo ahora está pagando el precio. Traigan contadores, que deudas sobran.
Olé
La sensación que se percibe en Independiente es que cada mañana puede explotar una bomba. Lo sabe el técnico, Lucas Pusineri. Lo advierte el manager, Jorge Burruchaga. Lo tienen claro los dirigentes. Los cimientos del club se sacudieron con pésimas noticias en los últimos meses: intimaciones por parte de jugadores, fallos de la FIFA en contra, reclamos por deudas que se acumularon, embargos y ahora hay futbolistas que amenazan con quedar libres si no aceptan venderlos.
El entrenador quedó en medio de un bombardeo entre el plantel y los directivos. Es por eso que ayer mantuvo una reunión de cinco horas con Burruchaga, el vicepresidente, Pablo Moyano, el secretario general, Héctor Maldonado, el secretario deportivo, Jorge Damiani, y los abogados del club para interiorizarse acerca de cuáles son los focos de incendio que pueden llegar a propagarse en los próximos días. En definitiva, Pusineri no quiere más sorpresas y es por eso que desea estar al tanto de todos los inconvenientes que aquejan al club.
Fueron muchos los problemas que estallaron desde que comenzó la cuarentena. A pesar de que aún esperan el fallo del TAS, Gastón Silva quedó libre por falta de pago. Cecilio Domínguez hizo lo mismo y ahora comenzó una batalla legal para tratar de evitar su salida. Martín Campaña pidió ser vendido y los dirigentes le exigieron que traiga una oferta de al menos 2.000.000 de dólares. Juan Sánchez Miño expuso su deseo de partir. Silvio Romero avisó que su ciclo está cumplido. Y son varios los jugadores que podrían seguir el mismo camino. La realidad es que los directivos les plantearon a muchos futbolistas que sólo están en condiciones de pagarles el 5% de lo que figura en sus contratos y no muchos están dispuestos a aceptar esas condiciones. Independiente no tiene dinero y la CD depende exclusivamente de la buena predisposición de los jugadores para evitar que un gran porcentaje del plantel se considere despedido por falta de pago, lo que incrementaría exponencialmente el pasivo ya que el club debería abonar onerosas indemnizaciones que lo dejarían a orillas de la quiebra.
Independiente se encuentra sumergido en un contexto en el que se precisa mucha cintura para negociar. No hay plata y sobran deudas. El club tiene que pagar 20.238.889 dólares de acá a fin de año. Se trata de una cifra en la que se contemplan deudas de pases, multas por atrasos en los pagos, rescisiones anticipadas de contratos e indemnizaciones. Es por eso que los directivos piensan crear un Comité Económico para tratar los temas de urgencia.
¿Cuánto dinero le ingresará al club? Apenas 940.000 dólares de la venta de Víctor Cuesta a Inter de Porto Alegre. Los u$s 1.600.000 que entraron por la transferencia de Nicolás Figal a Inter de Miami ya fueron destinados a pagar los sueldos de parte del plantel hasta abril.
Esta semana, le pagarían al plantel los salarios de mayo. El problema es que, como consecuencia de un embargo de 130.000 dólares que impuso el ex directivo Claudio Ciancio, son muchos los empleados de la institución que aún no vieron depositados los haberes del corriente mes.
Todos los problemas tienen un denominador común: las deudas. Es por eso que Pusineri quiere saber qué, cuánto y a quiénes se les debe dinero para tener un panorama certero acerca de cuál es el escenario sobre el que está parado.
El Rojo tiene que pagarle dos cuotas de 1.600.000 dólares y una penalidad de 800.000 a América de México por Cecilio. A ese mismo club también debe abonarle 1.841.389 por el pase de Silvio Romero y 637.500 de multa por no haber cumplido con los plazos establecidos. La FIFA también falló en contra de Independiente por no haber terminado de cancelar una deuda de 1.580.000 con Defensor Sporting por Carlos Benavídez y, en ese caso, el club también tendrá que desembolsar 200.000 de penalidad. Además habrá que pagarle 1.600.000 a Torino por Gastón Silva, 270.000 a Pumas por haberle soplado al jugador de forma irregular y el central exige 2.000.000 en concepto de indemnización. Si bien el caso fue elevado al TAS, todo se trató de una estrategia para ganar tiempo ya que en el Rojo saben que el fallo será a favor del jugador. Celta de Vigo reclama 900.000 por Pablo Hernández, River pide 750.000 por Alexander Barboza, Boca exige 600.000 por Pablo Pérez, a quien además falta pagarle 920.000 de indemnización. A Aldosivi se le deben 770.000 por Christian Chávez y 100.000 a Chongqing Lifan por Emmanuel Gigliotti. Además, Gonzalo Verón exige 1.300.000, Francisco Silva 890.000 y Emiliano Rigoni 300.000. Y el 15 de diciembre Independiente deberá desembolsar 450.000 para que Andrés Roa no vuelva a Deportivo Cali.
Los inconvenientes financieros vienen desde hace mucho tiempo en Independiente. En lo que va de la presidencia de Hugo Moyano, que comenzó a mediados de 2014, se cancelaron 24 deudas por un monto de 39.870.756 dólares. Las mismas fueron contraídas en gestiones anteriores. El líder camionero logró estabilizar la economía de la institución en sus primeros tres años de presidencia. Para armar el equipo que ganó la Sudamericana, Ariel Holan llevó al club a gastar apenas u$s 2.800.000 para traer diez jugadores de los que nueve llegaron con el pase en su poder. Tras la vuelta olímpica en el Maracaná, el Profesor llevó al club a gastar 24.7000.000 para sumar refuerzos con salarios astronómicos que en la mayoría de los casos no rindieron como se esperaba. Y fue en ese período cuando comenzó la debacle que se profundizó cuando a Sebastián Beccacece , quien duró apenas 16 partidos, le permitieron gastar 16.500.000 verdes. En síntesis, en lo que va del ciclo de Moyano se gastaron 73.935.000 dólares para incorporar 57 futbolistas. De ese monto, 32.100.000 fueron invertidos en la primera presidencia y 41.835.000 en los últimos dos años y medio, lo que delata que la crisis de desató en los últimos tiempos y se agudizó con las devaluaciones.
El Rojo ahora está pagando el precio. Traigan contadores, que deudas sobran.