Arsenal eliminó al City y enseñó el camino al Madrid
Un doblete de Aubameyang selló el pase del Arsenal a la final de la FA Cup. Se enfrentarán al ganador del Manchester United-Chelsea (este domingo, 13:00 horas).
Alberto Muñoz
As
Si quedaba alguna duda de que el Arsenal, este Arsenal que hace nada se desangraba por los cuatro costados, estaba en pleno crecimiento, este sábado, ante el todopoderoso Manchester City de Pep Guardiola, las ha despejado todas. Partido perfecto de los gunners desde el minuto 1 al 90, seguramente el único camino para eliminar a los citizens, expertos en los torneos del K.O. ingleses. Que tome nota el Real Madrid de lo visto este sábado en Wembley.
En los banquillos, Pep, cabizbajo, se resignaba ante su alumno aventajado, un joven Arteta que ha sabido absorber como una esponja la necesidad de hacer suya una filosofía futbolística y llevarla hasta el final. El premio, conseguido gracias a dos golazos de Aubameyang, no es solo la final de la FA Cup ante Chelsea o Manchester United, sino la posibilidad de conseguir un billete directo a la Europa League.
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Desde el primer momento el Arsenal mostró los frutos del trabajo que lleva haciendo Arteta desde que llegó al cargo a finales del año pasado. De las ruinas de un equipo que estaba fracturado en todos sus estamentos -vestuario, afición y directiva-, el español ha sido capaz de ir sanando las heridas y convenciendo a todos de su idea de juego. El mejor ejemplo fue, sin duda, el balón que perdió Mustafi en los primeros minutos dentro de su área por intentar sacarlo jugado. Si los jugadores no confiasen en la filosofía del técnico, no habrían insistido en la idea que llevó al primer gol de Aubameyang, una maravillosa jugada de equipo que terminó con el gabonés clavando un remate precioso al palo largo de Ederson.
Los primeros 45 minutos de los londinenses fueron tan redondos que consiguieron que el City ni siquiera rematase entre los tres palos. Y todo ello a pesar de que los citizens les habían ganado los siete últimos duelos, eran los vigentes campeones de la FA Cup y llevaban diez encuentros sin caer en esta competición.
Del primero al último, los jugadores del Arsenal respondieron muy bien en todas las facetas, no solo en la ofensiva de la primera mitad sino también en la defensiva cuando los mancunianos salieron en tromba tras el descanso. La resistencia tuvo su premio y Tierney, que se está consolidando a pesar de que hoy le tocase actuar como tercer central, puso un balón en profundidad precioso para que Aubameyang, que dejó muy atrás al joven Eric García, marcase el segundo por entre las piernas de Ederson.
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Si quedaba alguna duda de que el Arsenal, este Arsenal que hace nada se desangraba por los cuatro costados, estaba en pleno crecimiento, este sábado, ante el todopoderoso Manchester City de Pep Guardiola, las ha despejado todas. Partido perfecto de los gunners desde el minuto 1 al 90, seguramente el único camino para eliminar a los citizens, expertos en los torneos del K.O. ingleses. Que tome nota el Real Madrid de lo visto este sábado en Wembley.
En los banquillos, Pep, cabizbajo, se resignaba ante su alumno aventajado, un joven Arteta que ha sabido absorber como una esponja la necesidad de hacer suya una filosofía futbolística y llevarla hasta el final. El premio, conseguido gracias a dos golazos de Aubameyang, no es solo la final de la FA Cup ante Chelsea o Manchester United, sino la posibilidad de conseguir un billete directo a la Europa League.
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Desde el primer momento el Arsenal mostró los frutos del trabajo que lleva haciendo Arteta desde que llegó al cargo a finales del año pasado. De las ruinas de un equipo que estaba fracturado en todos sus estamentos -vestuario, afición y directiva-, el español ha sido capaz de ir sanando las heridas y convenciendo a todos de su idea de juego. El mejor ejemplo fue, sin duda, el balón que perdió Mustafi en los primeros minutos dentro de su área por intentar sacarlo jugado. Si los jugadores no confiasen en la filosofía del técnico, no habrían insistido en la idea que llevó al primer gol de Aubameyang, una maravillosa jugada de equipo que terminó con el gabonés clavando un remate precioso al palo largo de Ederson.
Los primeros 45 minutos de los londinenses fueron tan redondos que consiguieron que el City ni siquiera rematase entre los tres palos. Y todo ello a pesar de que los citizens les habían ganado los siete últimos duelos, eran los vigentes campeones de la FA Cup y llevaban diez encuentros sin caer en esta competición.
Del primero al último, los jugadores del Arsenal respondieron muy bien en todas las facetas, no solo en la ofensiva de la primera mitad sino también en la defensiva cuando los mancunianos salieron en tromba tras el descanso. La resistencia tuvo su premio y Tierney, que se está consolidando a pesar de que hoy le tocase actuar como tercer central, puso un balón en profundidad precioso para que Aubameyang, que dejó muy atrás al joven Eric García, marcase el segundo por entre las piernas de Ederson.
