Trinidad se encapsula en medio de un virus que se expande, con infraestructura hospitalaria deficiente y una población asustada
Beni, El Deber
Mientras algunas regiones entran a una cuarentena dinámica, la capital beniana, Trinidad, se encapsula y se aísla del resto del país para frenar el avance del coronavirus. La acción se toma en un departamento que tiene una infraestructura hospitalaria deficiente, poco personal médico y una población asustada ante el avance de los contagios y las muertes.
Y es que la situación sanitaria de la región amazónica es franciscana. En un video que circula por las redes sociales se observa a un camillero llorando de impotencia al ver que un paciente, con síntomas de coronavirus, no puede ingresar al hospital de Trinidad debido a la saturación del centro de salud.
“Es triste ver que no atiendan al señor. Nosotros hacemos todo lo posible para llegar con el paciente, pero ni siquiera lo atienden, nos dicen: 'llévenselo, no podemos atenderlo'”, relata llorando.
Tan grave es la situación que algunos médicos tienen que elegir a qué pacientes salvar y a quiénes no. Para los fallecidos víctimas del Covid-19, en Trinidad se ha improvisado un cementerio en las afueras de la ciudad.
Las cifras oficiales de contagios con el nuevo virus son alarmantes y cada día suben y suben. En la última actualización de datos realizada por el Ministerio de Salud, se reportaron 1.809 casos y 87 fallecidos.
Mientras algunas regiones entran a una cuarentena dinámica, la capital beniana, Trinidad, se encapsula y se aísla del resto del país para frenar el avance del coronavirus. La acción se toma en un departamento que tiene una infraestructura hospitalaria deficiente, poco personal médico y una población asustada ante el avance de los contagios y las muertes.
Y es que la situación sanitaria de la región amazónica es franciscana. En un video que circula por las redes sociales se observa a un camillero llorando de impotencia al ver que un paciente, con síntomas de coronavirus, no puede ingresar al hospital de Trinidad debido a la saturación del centro de salud.
“Es triste ver que no atiendan al señor. Nosotros hacemos todo lo posible para llegar con el paciente, pero ni siquiera lo atienden, nos dicen: 'llévenselo, no podemos atenderlo'”, relata llorando.
Tan grave es la situación que algunos médicos tienen que elegir a qué pacientes salvar y a quiénes no. Para los fallecidos víctimas del Covid-19, en Trinidad se ha improvisado un cementerio en las afueras de la ciudad.
Las cifras oficiales de contagios con el nuevo virus son alarmantes y cada día suben y suben. En la última actualización de datos realizada por el Ministerio de Salud, se reportaron 1.809 casos y 87 fallecidos.