Tensión entre Messi y Eder Sarabia en una pausa en Vigo
Las cámaras de Movistar El Partidazo captaron las pausas para hidratación del Barça en Vigo, que dejaron curiosas imágenes del crack argentino con el segundo de Setién.
As.com
El Barcelona se dejó en Balaídos ante el Celta parte de sus opciones de conquistar la liga y las sensaciones vistas en el campo no fueron buenas. Las cámaras de Movistar Partidazo captaron las pausas para hidratación del conjunto culé y la estampa fue de lo más gráfica.
Se puede ver a un Quique Setién pensativo y reflexivo, casi en segundo plano, dejando a que sus jugadores beban agua y tomen un respiro antes de volver a la actividad. Pero llamó muchísimo la atención la actitud del argentino Messi con Eder Sarabia.
Según las imágenes captadas por Movistar Partidazo, Eder Sarabia, segundo de Setién, intenta hacer alguna indicación al futbolista argentino pero Messi está concentrado y apenas reacciona a sus palabras. Cuando se dirige a él, el argentino se aleja diciendo algo que no se adivina. Curiosa estampa que demuestra que el Barça era consciente de que un pinchazo en Vigo era casi decir adiós al título y del nerviosismo entre los jugadores. Igual ocurre con Rakitic y Luis Suárez, en otros momentos del cooling break. Al Barça se le escapaba la liga y había mucha tensión sobre el césped de Balaídos.
El Barcelona se dejó en Balaídos ante el Celta parte de sus opciones de conquistar la liga y las sensaciones vistas en el campo no fueron buenas. Las cámaras de Movistar Partidazo captaron las pausas para hidratación del conjunto culé y la estampa fue de lo más gráfica.
Se puede ver a un Quique Setién pensativo y reflexivo, casi en segundo plano, dejando a que sus jugadores beban agua y tomen un respiro antes de volver a la actividad. Pero llamó muchísimo la atención la actitud del argentino Messi con Eder Sarabia.
Según las imágenes captadas por Movistar Partidazo, Eder Sarabia, segundo de Setién, intenta hacer alguna indicación al futbolista argentino pero Messi está concentrado y apenas reacciona a sus palabras. Cuando se dirige a él, el argentino se aleja diciendo algo que no se adivina. Curiosa estampa que demuestra que el Barça era consciente de que un pinchazo en Vigo era casi decir adiós al título y del nerviosismo entre los jugadores. Igual ocurre con Rakitic y Luis Suárez, en otros momentos del cooling break. Al Barça se le escapaba la liga y había mucha tensión sobre el césped de Balaídos.
