La cocina de la guerra interna en Boca
Tras la propuesta de Tevez de seguir sólo seis meses y donar su sueldo, la respuesta fue más fuego cruzado del Patrón. Así, se abrió el frente de batalla, que ya es entre Riquelme y Carlitos. ¿Hay lugar para convivir así?
Olé
Si Tevez creía que el viernes había desactivado cualquier foco de conflicto sobre su renovación, si pensaba que jugando seis meses más iba a solucionar el tema de la duración de su vínculo, si imaginaba que donando su contrato no sólo iba a ayudar a los más necesitados sino que iba a evitar el desgaste de negociar por dinero, pues no.
La primera respuesta fue una patada al pecho del Patrón. Sí, Jorge Bermúdez, el mismo que había dicho que cuando la nueva conducción llegó Carlitos lucía como un “ex jugador”, el mismo al que el Apache salió a contestarle por radio, redobló la apuesta. Y lejos de usar un matafuego, tiró hidrógeno. Compartió una nota publicada en un sitio web político y terminó acusando a Carlitos de querer llegar a una futura presidencia del club de la mano de Daniel Angelici. Así, abrió el frente de batalla. Porque declaró la guerra explícita del Consejo del Fútbol contra el capitán. O entre los dos 10.
El Patrón tuiteó una nota que publicó el sitio Expediente Político, que toma una frase de Tevez (“Tal vez me tire para ser presidente”) para decir que detrás de esa intención asoma otra vez la figura de Angelici. Incluso, que en la decisión del capitán de donar su nuevo contrato con Boca a una ONG estaba la influencia del ex presidente. Esta sospecha del Tano como “operador en las sombras” ya estaba instalada en el Consejo del Fútbol. Y el ex defensor no sólo la dio por válida, sino que fue más allá: “Reconforta que haya medios independientes sin compromisos que aborden el tema con tacto y coherencia. La verdad prevalece siempre donde la mentira hace muchos esfuerzos por aparecer”, tuiteó Bermúdez. Sí, básicamente, trató al Apache de... mentiroso.
Pero si hay una razón por la que esta respuesta excede al Patrón y plantea la batalla directa de Riquelme vs. Tevez, es que nada de lo que hacen los hombres del Consejo tiene el desconocimiento de Román. A JR quizá no le gusten las formas de uno de sus soldados más vehementes, pero acompaña la jugada y da las directivas.
Por lo tanto, Bermúdez declaró la guerra por todos. De hecho, al vice no le gustó nada lo que Tevez salió a declarar el viernes. Esperaba que el planteo del Apache (jugar seis meses y donar su sueldo), primero se lo dijera al club, que se llegara a un acuerdo y que luego sí se hiciera público. “En la primera contraoferta pidió 18 meses y luego salió con esto. El mail con esa propuesta nos llegó después de que habló en la radio. Así no es”, dicen en Boca.
Del lado de Carlitos, plantean que Tevez tiró la idea de jugar seis meses por varias razones. Primero, porque olió un clima hostil a partir del discurso unificado de Cascini y Bermúdez. Luego, porque quería evaluarse deportivamente tras el parate de la pandemia. Y además, porque en lo legal, el nuevo acuerdo entre AFA-Agremiados estipula que los contratos ahora van de enero a diciembre. “Por lo tanto, es imposible firmar hasta el 30 de junio. Es por seis meses o por 18. Tevez aceptó la oferta que le hacían, pero hasta diciembre. Si decían que sí, hoy estábamos firmando el acuerdo y listo, a fin de año veíamos”, cuentan en su entorno.
Sin embargo, en Boca aseguran lo mismo, que si Tevez aceptaba por un año, luego se podía extender por seis meses más para acomodarse a lo legal y punto. Por eso JR y Cía. creen que Carlitos cambió de discurso: que si bien dijo que el dinero no le importaba, al punto de donarlo a una entidad benéfica, de entrada les pidió una suma importante. Y que tienen pruebas escritas de eso. “No sabemos a quién creerle: si al que negociaba por mail o al que habló en la radio. Le propusimos retirarse en Boca y ahora parece que quiere hacerlo en otro lado”, avisan.
Como fuere, todo eso parece haber quedado en un segundo plano. Porque aunque Román no hable, está claro que el 10 de antes no tiene feeling con el 10 de ahora. Como contó Carlitos, el último mensaje entre ellos fue por el título. Luego, se contactaron por el tema de los premios, pero nada de llamados personales. “No se quieren. Y está claro”, dicen en el club los que lo ven desde afuera.
Aun así, hay un escenario para que Tevez siga. ¿Cómo? El Consejo se volvió a comunicar con el Apache tras sus declaraciones y le ratificó que la oferta es por un año. Es decir, técnicamente, rechazaron su idea de jugar seis meses. Ahora el capitán tiene otra vez la pelota, pero... “Carlitos ya dio su respuesta el viernes: aceptó por seis meses”, insisten en su círculo íntimo. Para que siga, una parte deberá aflojar. Pero la guerra está declarada. ¿Es posible convivir así?
Olé
Si Tevez creía que el viernes había desactivado cualquier foco de conflicto sobre su renovación, si pensaba que jugando seis meses más iba a solucionar el tema de la duración de su vínculo, si imaginaba que donando su contrato no sólo iba a ayudar a los más necesitados sino que iba a evitar el desgaste de negociar por dinero, pues no.
La primera respuesta fue una patada al pecho del Patrón. Sí, Jorge Bermúdez, el mismo que había dicho que cuando la nueva conducción llegó Carlitos lucía como un “ex jugador”, el mismo al que el Apache salió a contestarle por radio, redobló la apuesta. Y lejos de usar un matafuego, tiró hidrógeno. Compartió una nota publicada en un sitio web político y terminó acusando a Carlitos de querer llegar a una futura presidencia del club de la mano de Daniel Angelici. Así, abrió el frente de batalla. Porque declaró la guerra explícita del Consejo del Fútbol contra el capitán. O entre los dos 10.
El Patrón tuiteó una nota que publicó el sitio Expediente Político, que toma una frase de Tevez (“Tal vez me tire para ser presidente”) para decir que detrás de esa intención asoma otra vez la figura de Angelici. Incluso, que en la decisión del capitán de donar su nuevo contrato con Boca a una ONG estaba la influencia del ex presidente. Esta sospecha del Tano como “operador en las sombras” ya estaba instalada en el Consejo del Fútbol. Y el ex defensor no sólo la dio por válida, sino que fue más allá: “Reconforta que haya medios independientes sin compromisos que aborden el tema con tacto y coherencia. La verdad prevalece siempre donde la mentira hace muchos esfuerzos por aparecer”, tuiteó Bermúdez. Sí, básicamente, trató al Apache de... mentiroso.
Pero si hay una razón por la que esta respuesta excede al Patrón y plantea la batalla directa de Riquelme vs. Tevez, es que nada de lo que hacen los hombres del Consejo tiene el desconocimiento de Román. A JR quizá no le gusten las formas de uno de sus soldados más vehementes, pero acompaña la jugada y da las directivas.
Por lo tanto, Bermúdez declaró la guerra por todos. De hecho, al vice no le gustó nada lo que Tevez salió a declarar el viernes. Esperaba que el planteo del Apache (jugar seis meses y donar su sueldo), primero se lo dijera al club, que se llegara a un acuerdo y que luego sí se hiciera público. “En la primera contraoferta pidió 18 meses y luego salió con esto. El mail con esa propuesta nos llegó después de que habló en la radio. Así no es”, dicen en Boca.
Del lado de Carlitos, plantean que Tevez tiró la idea de jugar seis meses por varias razones. Primero, porque olió un clima hostil a partir del discurso unificado de Cascini y Bermúdez. Luego, porque quería evaluarse deportivamente tras el parate de la pandemia. Y además, porque en lo legal, el nuevo acuerdo entre AFA-Agremiados estipula que los contratos ahora van de enero a diciembre. “Por lo tanto, es imposible firmar hasta el 30 de junio. Es por seis meses o por 18. Tevez aceptó la oferta que le hacían, pero hasta diciembre. Si decían que sí, hoy estábamos firmando el acuerdo y listo, a fin de año veíamos”, cuentan en su entorno.
Sin embargo, en Boca aseguran lo mismo, que si Tevez aceptaba por un año, luego se podía extender por seis meses más para acomodarse a lo legal y punto. Por eso JR y Cía. creen que Carlitos cambió de discurso: que si bien dijo que el dinero no le importaba, al punto de donarlo a una entidad benéfica, de entrada les pidió una suma importante. Y que tienen pruebas escritas de eso. “No sabemos a quién creerle: si al que negociaba por mail o al que habló en la radio. Le propusimos retirarse en Boca y ahora parece que quiere hacerlo en otro lado”, avisan.
Como fuere, todo eso parece haber quedado en un segundo plano. Porque aunque Román no hable, está claro que el 10 de antes no tiene feeling con el 10 de ahora. Como contó Carlitos, el último mensaje entre ellos fue por el título. Luego, se contactaron por el tema de los premios, pero nada de llamados personales. “No se quieren. Y está claro”, dicen en el club los que lo ven desde afuera.
Aun así, hay un escenario para que Tevez siga. ¿Cómo? El Consejo se volvió a comunicar con el Apache tras sus declaraciones y le ratificó que la oferta es por un año. Es decir, técnicamente, rechazaron su idea de jugar seis meses. Ahora el capitán tiene otra vez la pelota, pero... “Carlitos ya dio su respuesta el viernes: aceptó por seis meses”, insisten en su círculo íntimo. Para que siga, una parte deberá aflojar. Pero la guerra está declarada. ¿Es posible convivir así?