El futbolista que ganó todas las ligas que jugó
Luego de la consagración del Bayern Munich en la Bundesliga, un jugador del campeón consiguió una marca increíble: desde que debutó en 2013 alzó los ocho títulos locales que disputó. De yapa, lo hizo en tres equipos distintos.
Olé
Apenas tiene 24 años y ya puede decir que fue partícipe de ocho planteles campeones de ligas locales. Kingsley Coman debutó en la primera del PSG en febrero de 2013 y, desde entonces, ganó todos los títulos de liga que disputó. Asimismo, alcanzó la gloria con tres equipos de tres certámenes distintos.
¿Dónde lo logró? 2013/2014 y 2014/2015 con PSG, 2014/2015 con Juventus, y desde la 2015/2016 hasta la reciente 2019/2020 con Bayern Munich. Si bien en el conjunto parisino y en el gigante italiano no tuvo un rol protagónico, siempre disputó al menos unos minutos para ser parte de los miembros que al final de la temporada se cuelgan la medalla de ganador.
Claro que, más allá de que venía dando vueltas, encontró en Munich su lugar en el mundo: los últimos entrenadores (principalmente Guardiola y Hansi Flick) confiaron en él y explotaron sus virtudes como extremo por la banda izquierda. A pesar de todos los refuerzos que fueron llegando en su sector (Coutinho y Perisic, por ejemplo), se terminó imponiendo en todas las oportunidades para quedarse con el puesto.
Además de contar con un récord increíble, Coman también supo ganar otros torneos como la Copa de Alemania en dos oportunidades (en unas semanas intentará ganar la tercera), la Supercopa alemana (tres veces), la Copa de la Ligue 1, el Trofeo de campeones de Francia, la Copa Italia y la Supercopa italiana (en una ocasión cada una).
Más allá de la cantidad de éxitos conseguidos a tan corta edad, el francés no vivió todos gratos momentos, sino más bien todo lo contrario. Lesiones ligamentarias en el tobillo y en la rodilla y tantas otras musculares le hicieron perderse casi un año de competencia si se suman todo el tiempo que estuvo parado. De hecho, llegó a declarar poco tiempo atrás que si volvía a sufrir un nuevo problema físico de gravedad analizaba colgar los botines para siempre.
De todos modos, el parisino no bajó los brazos, continuó luchando y los resultados cayeron en su lado. Y, por ahora y al menos hasta dentro de un año, seguirá ostentando una marca difícil de igualar.
Apenas tiene 24 años y ya puede decir que fue partícipe de ocho planteles campeones de ligas locales. Kingsley Coman debutó en la primera del PSG en febrero de 2013 y, desde entonces, ganó todos los títulos de liga que disputó. Asimismo, alcanzó la gloria con tres equipos de tres certámenes distintos.
¿Dónde lo logró? 2013/2014 y 2014/2015 con PSG, 2014/2015 con Juventus, y desde la 2015/2016 hasta la reciente 2019/2020 con Bayern Munich. Si bien en el conjunto parisino y en el gigante italiano no tuvo un rol protagónico, siempre disputó al menos unos minutos para ser parte de los miembros que al final de la temporada se cuelgan la medalla de ganador.
Claro que, más allá de que venía dando vueltas, encontró en Munich su lugar en el mundo: los últimos entrenadores (principalmente Guardiola y Hansi Flick) confiaron en él y explotaron sus virtudes como extremo por la banda izquierda. A pesar de todos los refuerzos que fueron llegando en su sector (Coutinho y Perisic, por ejemplo), se terminó imponiendo en todas las oportunidades para quedarse con el puesto.
Además de contar con un récord increíble, Coman también supo ganar otros torneos como la Copa de Alemania en dos oportunidades (en unas semanas intentará ganar la tercera), la Supercopa alemana (tres veces), la Copa de la Ligue 1, el Trofeo de campeones de Francia, la Copa Italia y la Supercopa italiana (en una ocasión cada una).
Más allá de la cantidad de éxitos conseguidos a tan corta edad, el francés no vivió todos gratos momentos, sino más bien todo lo contrario. Lesiones ligamentarias en el tobillo y en la rodilla y tantas otras musculares le hicieron perderse casi un año de competencia si se suman todo el tiempo que estuvo parado. De hecho, llegó a declarar poco tiempo atrás que si volvía a sufrir un nuevo problema físico de gravedad analizaba colgar los botines para siempre.
De todos modos, el parisino no bajó los brazos, continuó luchando y los resultados cayeron en su lado. Y, por ahora y al menos hasta dentro de un año, seguirá ostentando una marca difícil de igualar.
