El Atalanta sigue siendo una máquina
Los de Bérgamo destrozaron al Sassuolo, con un doblete de Duván Zapata, y demostraron no haber perdido su fuerza, alargando su ventaja sobre Roma y Nápoles hasta 6 y 12 puntos.
Mirko Calemme
As
El fútbol ha vuelto también en Bérgamo, la ciudad que más ha sufrido por el COVID-19 y que se hizo famosa en todo el mundo por los carros militares que llevaban los ataúdes de sus fallecidos. Han pasado más de tres meses desde el último partido del Atalanta, pero viéndola en el campo nadie lo diría.
El conjunto de Gasperini (expulsado con 4-0 en el marcador: dice mucho de él) firmó ante el Sassuolo la enésima goleada de su curso, sumando 74 goles en 26 jornadas. Como comunicó la 'Opta', es el sexto mejor registro de todos los tiempos y el mejor desde 1959.
El dato demuestra cuánto los nerazzurri estén haciendo historia y cómo sus principios de juego sean inatacables, más allá de parones y ausencias. Este domingo, por ejemplo, faltaba la estrella Ilicic, pero apenas se notó.
Después de un cuarto de hora, el defensa Djimsiti ya había abierto la lata en un córner, y poco después el colegiado, con la ayuda del VAR, anuló el 2-0 de Gómez por una dudosa mano de Gosens. La superioridad era evidente y el segundo llegó, de todos modos, en el 31', con un cabezazo de Zapata (que luego también cabeceó al larguero otra oportunidad). Los locales remataron la faena antes del descanso, con una estirada en propia puerta de Bourabia.
Viendo el resultado no se diría, pero el Sassuolo también tuvo sus momentos en el partido, aunque entre falta de puntería y paradones de Gollini nunca consiguió volver a ajustar el marcador. El conjunto de De Zerbi tuvo que esperar hasta el 92’ para el gol del honor, que realizó Bourabia con un bonito lanzamiento de falta.
Antes, Zapata había completado el póker y su doblete (para el cafetero van 14 dianas en 20 partidos) a pase de Gómez. El triunfo refuerza el cuarto puesto del Atalanta, que alarga su ventaja sobre Roma y Nápoles hasta 6 y 12 puntos, y confirma que la 'Dea' sigue siendo una máquina casi imparable.
Mirko Calemme
As
El fútbol ha vuelto también en Bérgamo, la ciudad que más ha sufrido por el COVID-19 y que se hizo famosa en todo el mundo por los carros militares que llevaban los ataúdes de sus fallecidos. Han pasado más de tres meses desde el último partido del Atalanta, pero viéndola en el campo nadie lo diría.
El conjunto de Gasperini (expulsado con 4-0 en el marcador: dice mucho de él) firmó ante el Sassuolo la enésima goleada de su curso, sumando 74 goles en 26 jornadas. Como comunicó la 'Opta', es el sexto mejor registro de todos los tiempos y el mejor desde 1959.
El dato demuestra cuánto los nerazzurri estén haciendo historia y cómo sus principios de juego sean inatacables, más allá de parones y ausencias. Este domingo, por ejemplo, faltaba la estrella Ilicic, pero apenas se notó.
Después de un cuarto de hora, el defensa Djimsiti ya había abierto la lata en un córner, y poco después el colegiado, con la ayuda del VAR, anuló el 2-0 de Gómez por una dudosa mano de Gosens. La superioridad era evidente y el segundo llegó, de todos modos, en el 31', con un cabezazo de Zapata (que luego también cabeceó al larguero otra oportunidad). Los locales remataron la faena antes del descanso, con una estirada en propia puerta de Bourabia.
Viendo el resultado no se diría, pero el Sassuolo también tuvo sus momentos en el partido, aunque entre falta de puntería y paradones de Gollini nunca consiguió volver a ajustar el marcador. El conjunto de De Zerbi tuvo que esperar hasta el 92’ para el gol del honor, que realizó Bourabia con un bonito lanzamiento de falta.
Antes, Zapata había completado el póker y su doblete (para el cafetero van 14 dianas en 20 partidos) a pase de Gómez. El triunfo refuerza el cuarto puesto del Atalanta, que alarga su ventaja sobre Roma y Nápoles hasta 6 y 12 puntos, y confirma que la 'Dea' sigue siendo una máquina casi imparable.