Del “puedo quedar marcado” al “no estar al 100% de acuerdo”
Silvio Romero admitió que el conflicto por falta de pago puede dejar “secuelas” en Independiente, dijo que no estuvo totalmente en sintonía con sus compañeros y reveló un reproche de la dirigencia a los jugadores: “Hace dos años que están de vacaciones”.
Olé
Silvio Romero, capitán de Independiente, dio su versión luego del conflicto que hubo con la dirigencia por falta de pago. "Gran parte del problema se ha solucionado, hay tranquilidad para todos", explicó. Aunque dejó dudas en cuanto a su futuro en el Rojo.
"El reclamo puede ser injusto o justo. El momento no era indicado, por eso cayó como cayó, en medio de una pandemia. Pero esto viene de antes del virus. Desde noviembre estábamos con deudas, y teníamos que ponerle fin, se hacía insostenible. Por eso tomamos la decisión grupal de reclamar lo que nos debían. Fue eso. Entiendo que era un momento y sigue siendo súper delicado para todos los argentinos. La carta documento tiene un plazo de 48 horas y nosotros nunca lo ejercimos. Tuvieron un mes para pagar la deuda y eso se venció, nunca tuvimos la intención de romper un contrato. Siempre tuvimos la buena disposición para llegar a un buen puerto. Le toca al club pagar lo que había asumido, nosotros a reclamar", dijo.
"Con respecto al hincha, quiere que le respondamos dentro de la cancha. En eso estamos en deuda, lo dijimos. Yo recibí muchos mensajes de apoyo en redes sociales. Aunque para el hincha, hay que ganar", agregó.
"Con la dirigencia, siempre tuve muy buen diálogo. Puedo quedar marcado, pero yo estoy tranquilo porque el diálogo que tuve y tengo es excelente. También, se puede decir que fui el capitán de esta protesta, pero te lo pueden decir los dirigentes, si no tienen ganas de decirlo ya es su problema, pero tuve muy buen diálogo hasta el día de hoy. Esto obviamente va surgiendo un desgaste. El club se perjudica porque tiene que pagar un contrato que ellos asumieron en un momento complicado. Con mis compañeros fui frontal, siempre les dije lo que pensaba. Inclusive, tomamos una decisión en la que yo no estaba 100% de acuerdo pero lo respeté por el grupo. Con los dirigentes fui frontal, les conté cómo estaba el termómetro del grupo", contó en Closs Continental.
"Para un dirigente, por más que le diga que es rubio y de ojos celestes, pero a su vez le mando una carta documento, le duele... Les hacíamos un reclamo que consideramos que era justo en lo económico", dijo el Chino.
"Tengo la tranquilidad de que me manejé con buen diálogo. Recibí algo del otro lado que no esperaba: 'Ustedes hace dos años que están de vacaciones'. Es parte de todo esto. Son diálogos, cosas que me pueden traer secuelas. Pero como capitán, apoyado por los demás referentes, fui llevando esta situación de la manera más cordial posible", anticipó.
"Mi voluntad no es generar un conflicto en el que cada tres meses estemos hablando de lo mismo. Les dije a los dirigentes: 'Si ustedes no pagan, yo reclamo, y soy el hijo de puta. ¿Se justifica que sigamos?'. No me siento cómodo intimando a un club porque no paga. Hay que hablar qué es lo que me sirve a mí, tengo una familia atrás y debo responder", dijo, con lo que le puso otro signo de interrogación a su continuidad.
"No es mi intención buscar otro club. Primero debo solucionar los posibles conflictos en Independiente, en el cual estoy muy cómodo. Pero si el club no se sincera y te dice 'no te puedo cumplir', ahí será otra cosa", insistió el delantero, goleador de la última Superliga con el Rojo.
"Salí a desmentir que estuviera mal con mis compañeros. Hablé con el periodista que lo publicó: 'Vos publicá lo que quieras pero corroboralo'. El me decía que tenía esa versión. No iba a explayarme demasiado, yo estoy tranquilo, sé cómo me manejé. A mí no me pueden contar qué pasó", relató Romero. Se refiere a Olé, que ratificó su publicación.
"Yo pongo las manos en el fuego de que tengo el respaldo de todos mis compañeros. Me podés decir si algún compañero te apoya más, y sí... Aunque con este episodio no hubo reproches", contó el cordobés.
Olé
Silvio Romero, capitán de Independiente, dio su versión luego del conflicto que hubo con la dirigencia por falta de pago. "Gran parte del problema se ha solucionado, hay tranquilidad para todos", explicó. Aunque dejó dudas en cuanto a su futuro en el Rojo.
"El reclamo puede ser injusto o justo. El momento no era indicado, por eso cayó como cayó, en medio de una pandemia. Pero esto viene de antes del virus. Desde noviembre estábamos con deudas, y teníamos que ponerle fin, se hacía insostenible. Por eso tomamos la decisión grupal de reclamar lo que nos debían. Fue eso. Entiendo que era un momento y sigue siendo súper delicado para todos los argentinos. La carta documento tiene un plazo de 48 horas y nosotros nunca lo ejercimos. Tuvieron un mes para pagar la deuda y eso se venció, nunca tuvimos la intención de romper un contrato. Siempre tuvimos la buena disposición para llegar a un buen puerto. Le toca al club pagar lo que había asumido, nosotros a reclamar", dijo.
"Con respecto al hincha, quiere que le respondamos dentro de la cancha. En eso estamos en deuda, lo dijimos. Yo recibí muchos mensajes de apoyo en redes sociales. Aunque para el hincha, hay que ganar", agregó.
"Con la dirigencia, siempre tuve muy buen diálogo. Puedo quedar marcado, pero yo estoy tranquilo porque el diálogo que tuve y tengo es excelente. También, se puede decir que fui el capitán de esta protesta, pero te lo pueden decir los dirigentes, si no tienen ganas de decirlo ya es su problema, pero tuve muy buen diálogo hasta el día de hoy. Esto obviamente va surgiendo un desgaste. El club se perjudica porque tiene que pagar un contrato que ellos asumieron en un momento complicado. Con mis compañeros fui frontal, siempre les dije lo que pensaba. Inclusive, tomamos una decisión en la que yo no estaba 100% de acuerdo pero lo respeté por el grupo. Con los dirigentes fui frontal, les conté cómo estaba el termómetro del grupo", contó en Closs Continental.
"Para un dirigente, por más que le diga que es rubio y de ojos celestes, pero a su vez le mando una carta documento, le duele... Les hacíamos un reclamo que consideramos que era justo en lo económico", dijo el Chino.
"Tengo la tranquilidad de que me manejé con buen diálogo. Recibí algo del otro lado que no esperaba: 'Ustedes hace dos años que están de vacaciones'. Es parte de todo esto. Son diálogos, cosas que me pueden traer secuelas. Pero como capitán, apoyado por los demás referentes, fui llevando esta situación de la manera más cordial posible", anticipó.
"Mi voluntad no es generar un conflicto en el que cada tres meses estemos hablando de lo mismo. Les dije a los dirigentes: 'Si ustedes no pagan, yo reclamo, y soy el hijo de puta. ¿Se justifica que sigamos?'. No me siento cómodo intimando a un club porque no paga. Hay que hablar qué es lo que me sirve a mí, tengo una familia atrás y debo responder", dijo, con lo que le puso otro signo de interrogación a su continuidad.
"No es mi intención buscar otro club. Primero debo solucionar los posibles conflictos en Independiente, en el cual estoy muy cómodo. Pero si el club no se sincera y te dice 'no te puedo cumplir', ahí será otra cosa", insistió el delantero, goleador de la última Superliga con el Rojo.
"Salí a desmentir que estuviera mal con mis compañeros. Hablé con el periodista que lo publicó: 'Vos publicá lo que quieras pero corroboralo'. El me decía que tenía esa versión. No iba a explayarme demasiado, yo estoy tranquilo, sé cómo me manejé. A mí no me pueden contar qué pasó", relató Romero. Se refiere a Olé, que ratificó su publicación.
"Yo pongo las manos en el fuego de que tengo el respaldo de todos mis compañeros. Me podés decir si algún compañero te apoya más, y sí... Aunque con este episodio no hubo reproches", contó el cordobés.