Policía rinde honores al oficial fallecido por el Covid-19 y recibe ascenso póstumo a teniente
Santa Cruz, El Deber
El subteniente Pablo Daniel Aracena, el segundo miembro del contingente policial en Santa Cruz fallecido a consecuencia del coronavirus, recibió los honores del Comando Departamental de la Policía cruceña la mañana de este domingo en las afueras del edificio policial.
El homenaje, dirigido por el comandante José Enrique Terán, contó con la presencia de la madre del fallecido, Edith Aracena, quien recibió la bandera boliviana y la medalla de valor, máximo galardón que entrega la institución a los caídos en el cumplimiento de su deber.
El acto que hizo derramar lágrimas a más de uno de los agentes que estaban sobre el segundo anillo, fue matizado por las palabras que dio uno de los representantes de la promoción de la Academía de Policía 2016, a la que pertenecía el subteniente, recordando que ingresó a la institución de formación nacional en enero de 2013.
Terán manifestó, con pesar, que ahora la Policía se enfrenta a dos grandes enemigos: el coronavirus y la ignorancia de la gente que se niega a permanecer en sus casas, como una de las medidas de prevención más efectiva para impedir que el Covid-19 siga expandiéndose.
Aracena estaba cumpliendo sus funciones en la unidad de Radio Patrullas 110 del Comando Provincial de Montero, municipio en el cual se presume se contagió del coronavirus en uno de los tantos servicios de control que han realizado los agentes durante este tiempo de caurentena.
Luego del acto realizado en la capital cruceña, una comitiva de policías se dirigió a Montero, donde luego de dar una vuelta por la circunvalación de esta comuna, rindieron los mismos homenajes póstumos al oficial que fue infectado por el coronavirus y murió en nuestra capital.
El subteniente Pablo Daniel Aracena, el segundo miembro del contingente policial en Santa Cruz fallecido a consecuencia del coronavirus, recibió los honores del Comando Departamental de la Policía cruceña la mañana de este domingo en las afueras del edificio policial.
El homenaje, dirigido por el comandante José Enrique Terán, contó con la presencia de la madre del fallecido, Edith Aracena, quien recibió la bandera boliviana y la medalla de valor, máximo galardón que entrega la institución a los caídos en el cumplimiento de su deber.
El acto que hizo derramar lágrimas a más de uno de los agentes que estaban sobre el segundo anillo, fue matizado por las palabras que dio uno de los representantes de la promoción de la Academía de Policía 2016, a la que pertenecía el subteniente, recordando que ingresó a la institución de formación nacional en enero de 2013.
Terán manifestó, con pesar, que ahora la Policía se enfrenta a dos grandes enemigos: el coronavirus y la ignorancia de la gente que se niega a permanecer en sus casas, como una de las medidas de prevención más efectiva para impedir que el Covid-19 siga expandiéndose.
Aracena estaba cumpliendo sus funciones en la unidad de Radio Patrullas 110 del Comando Provincial de Montero, municipio en el cual se presume se contagió del coronavirus en uno de los tantos servicios de control que han realizado los agentes durante este tiempo de caurentena.
Luego del acto realizado en la capital cruceña, una comitiva de policías se dirigió a Montero, donde luego de dar una vuelta por la circunvalación de esta comuna, rindieron los mismos homenajes póstumos al oficial que fue infectado por el coronavirus y murió en nuestra capital.