Mariela Camacho: Los dolores emocionales brotan con fuerza en las crisis, como la pandemia
Redacción Los Tiempos
La Asociación Uyarina-Punto de Encuentro, institución sin fines de lucro, realiza atención psicológica por teléfono a niños, jóvenes y adultos que viven en “situación de riesgo”; es decir, que conviven con sus familias, pero que están a un paso de irse a vivir a la calle.
La psicoanalista Mariela Camacho explicó que la atención psicológica se realiza vía teléfono, debido a que la institución, que tiene sus consultorios en la zona de la laguna Alalay, dejó de dar ese servicio por las restricciones adoptadas por la pandemia del coronavirus.
La directora del centro dijo que se ofrece el servicio, porque existe una demanda que no era satisfecha por ninguna otra institución. También dijo que continuarán en la poscuarentena, debido a que se debe hacer seguimiento a los pacientes que tuvieron problemas en el distanciamiento físico, ya que se prevé que después pasarán a una fase aguda.
Actualmente la atención es de 8:00 a 12:00 y de 14:00 a 16:00 los lunes, martes y miércoles, y los jueves y viernes, de 14:00 a 16:00. Para conocer un poco más sobre los detalles de este tipo de atención que se da a los chicos que pasan por problemas y pretenden irse de sus casas a la calle, hablamos con la directora de Uyarina ampliamente sobre el tema.
¿Cuál es la población en riesgo y qué características tiene?
Para Uyarina-Punto de Encuentro la población de riesgo se encuentra conformada por niños, niñas, adolescentes, jóvenes y adultos que, por diferentes precariedades, sean éstas económicas, sociales o simbólicas, se ven en riesgo de pasar a una situación de vivencia en calle.
Por lo general, esta población vive situaciones de violencia, abandono físico y/o afectivo, contacto directo con el abuso de sustancias toxicas, que por las necesidades básicas insatisfechas muchas veces se les hace difícil reconocer que el tratamiento del sufrimiento psíquico es un derecho fundamental que todo ser humano debería tener. Uyarina oferta un espacio de escucha ante estas dificultades.
¿En qué consiste el plan de atención psicológica a los chicos en riesgo en la cuarentena por la pandemia y la poscuarentena?
Para el equipo de Uyarina fue difícil tomar la decisión de cerrar las puertas de la institución durante la cuarentena, pues sabemos que los dolores emocionales no iban a cesar; por el contrario, tienden a aumentar en crisis.
Sin embargo, a las pocas semanas comenzaron a llegar demandas de atención mediante nuestra página de Facebook, que nos hizo replantear nuestra oferta y hacer que ésta pueda adecuarse a las necesidades del momento, con los medios que disponíamos. Sin embargo, teníamos la decisión de mantener la línea de intervención que nos caracteriza, que es alojar la palabra de las personas que se acercan a la institución en busca de alivio o reducción de su sufrimiento; es decir, dar un espacio que los pueda alojar recociendo que cada uno es diferente del otro.
¿Y qué hicieron para adecuarse?
Se han habilitado horarios de atención de lunes a viernes mediante teléfono, que dada la contingencia de salud actual, es el único medio por el que podemos sostener nuestra atención.
En esta época, la incertidumbre de lo que nos depara ha hecho que muchas personas entren en una situación de urgencia; es decir, que todo aquello que conocían, de un día al otro se les desmoronó, viéndose afectados y con la necesidad de buscar contención emocional. Nuestra tarea es que esta urgencia que es general a todos, pase a una urgencia subjetiva, que le permita a cada persona identificar qué es lo que se le ha movido con esta cuarentena, que es lo que ya no anda y eso es singular a cada uno de ellos.
¿Cómo el aislamiento social puede haber afectado la salud mental de la población que vive en riesgo?
He visto un video que circula, es una metáfora que puede servir para comprender la dificultad de este momento para personas que viven en situación de riesgo: “todos estamos en la misma tempestad, pero en el mismo barco”. Pero paradójicamente, la pandemia ha hecho más evidentes las diferencias y situaciones de precariedad que siempre se ha querido tapar o la sociedad no ha querido ver. No es lo mismo estar encerrados y sufriendo por no salir de una casa donde cada uno de los integrantes tiene su propio espacio, que una familia esté en un espacio que debe ser compartido por todos y donde es difícil mantener una separación necesaria del otro, no solo para evitar contagios, sino para mantener un equilibrio mental. De esto se habla poco.
Han ido creciendo las cifras de violencia en esta población, el no contar con recursos económicos, de salud, de alimentación, de acceso a la educación, traen consigo afectaciones a nivel emocional y mental, que hacen que muchas veces se deje de lado el bienestar psíquico, a pesar de que este es tan importante como cualquier otra necesidad básica.
En esta población la amenaza es mucho más real, pues no basta con no salir para mantener su salud, sino que quedarse adentro es igualmente nocivo, haber perdido su privacidad por falta de espacio es otra gran dificultad. ¿Cómo no va a traer consigo serias alteraciones? Y es algo sobre lo que debemos reflexionar y encaminar medios para su atención.
¿Qué tipo de problemas son más comunes en esta población?
Cualquier acontecimiento que pueda provocar malestar o afectar el estado emocional del ser humano sin importar su sexo, status económico o social. En este sentido, las afectaciones van a ser diversas, puede haber un sentimiento de desamparo que lo deja sin ganas de hacer nada, manifestaciones que ante la imposibilidad de poner en palabras lo que sucede se traslada al cuerpo, aparecen dolores de cabeza o imposibilidad de respirar, entre otros síntomas, que pueden ser confundidos con otras afecciones.
Como mencioné, cada uno va a responder a esta amenaza general a su manera. Sin embargo, no es lo mismo quedar encerrado en un espacio con todo lo necesario, que no tener esa opción.
La población a la que dirige su atención Uyarina-Punto de Encuentro se encuentra segregada de la sociedad, sumando de esta manera más riesgo. Si bien la violencia no diferencia círculos sociales, las manifestaciones de ésta difieren de un grupo a otro y ese es uno de los problemas más grandes que afecta a esta población. Las instituciones gubernamentales han ido recibiendo denuncias de un incremento en la violencia intrafamiliar y es un tema al que se debería prestar más atención de la que se da.
¿Qué tipo de terapia aplican y en qué consiste?
Hablemos mejor de tratamiento mediante la palabra. Tratamiento a las personas angustiadas, con miedo, incertidumbre y que al poner en palabras su malestar, éste se reduce.
Uyarina, en este momento, ante la imposibilidad del acercamiento físico, abre el espacio de escucha mediante comunicación telefónica, en este espacio que es siempre acorde a la persona que solicita la atención, se genera una posibilidad de encuentro. ¿Qué encuentro? De la persona que habla y que dirige lo que dice a alguien que escucha y le posibilita ver, en primer lugar, qué es lo que hay de lo propio en eso que dice y que le causa sufrimiento.
Por teléfono, lo que se puede hacer, es escuchar eso que más le genera malestar en este momento, a partir de esta escucha, la persona pueda ver qué aspectos de su vida se encuentran afectados, si son recientes o siempre estuvieron ahí. Sobre qué puede tener control y qué no, diferenciar una amenaza real de una imaginada. Hacer esa diferencia puede ayudar a encontrar un alivio que le permita más adelante inventar formas para hacer frente a eso que le molesta.
Quienes quieran saber más sobre este malestar, que es propio de cada uno, podrán continuar con la atención en las oficinas de la institución, una vez que sea posible hacerlo.
¿Qué viene tras la cuarentena?
Es algo que aún no podemos responder a cabalidad, podemos intuir que la situación de crisis general va a seguir afectando de manera singular a cada uno, es posible también que existan más desórdenes mentales que los que hasta ahora hemos estado presenciando. Podemos anticipar también que se va a hacer necesario la presencia de dispositivos de escucha ante estos malestares.
La Asociación Uyarina-Punto de Encuentro, institución sin fines de lucro, realiza atención psicológica por teléfono a niños, jóvenes y adultos que viven en “situación de riesgo”; es decir, que conviven con sus familias, pero que están a un paso de irse a vivir a la calle.
La psicoanalista Mariela Camacho explicó que la atención psicológica se realiza vía teléfono, debido a que la institución, que tiene sus consultorios en la zona de la laguna Alalay, dejó de dar ese servicio por las restricciones adoptadas por la pandemia del coronavirus.
La directora del centro dijo que se ofrece el servicio, porque existe una demanda que no era satisfecha por ninguna otra institución. También dijo que continuarán en la poscuarentena, debido a que se debe hacer seguimiento a los pacientes que tuvieron problemas en el distanciamiento físico, ya que se prevé que después pasarán a una fase aguda.
Actualmente la atención es de 8:00 a 12:00 y de 14:00 a 16:00 los lunes, martes y miércoles, y los jueves y viernes, de 14:00 a 16:00. Para conocer un poco más sobre los detalles de este tipo de atención que se da a los chicos que pasan por problemas y pretenden irse de sus casas a la calle, hablamos con la directora de Uyarina ampliamente sobre el tema.
¿Cuál es la población en riesgo y qué características tiene?
Para Uyarina-Punto de Encuentro la población de riesgo se encuentra conformada por niños, niñas, adolescentes, jóvenes y adultos que, por diferentes precariedades, sean éstas económicas, sociales o simbólicas, se ven en riesgo de pasar a una situación de vivencia en calle.
Por lo general, esta población vive situaciones de violencia, abandono físico y/o afectivo, contacto directo con el abuso de sustancias toxicas, que por las necesidades básicas insatisfechas muchas veces se les hace difícil reconocer que el tratamiento del sufrimiento psíquico es un derecho fundamental que todo ser humano debería tener. Uyarina oferta un espacio de escucha ante estas dificultades.
¿En qué consiste el plan de atención psicológica a los chicos en riesgo en la cuarentena por la pandemia y la poscuarentena?
Para el equipo de Uyarina fue difícil tomar la decisión de cerrar las puertas de la institución durante la cuarentena, pues sabemos que los dolores emocionales no iban a cesar; por el contrario, tienden a aumentar en crisis.
Sin embargo, a las pocas semanas comenzaron a llegar demandas de atención mediante nuestra página de Facebook, que nos hizo replantear nuestra oferta y hacer que ésta pueda adecuarse a las necesidades del momento, con los medios que disponíamos. Sin embargo, teníamos la decisión de mantener la línea de intervención que nos caracteriza, que es alojar la palabra de las personas que se acercan a la institución en busca de alivio o reducción de su sufrimiento; es decir, dar un espacio que los pueda alojar recociendo que cada uno es diferente del otro.
¿Y qué hicieron para adecuarse?
Se han habilitado horarios de atención de lunes a viernes mediante teléfono, que dada la contingencia de salud actual, es el único medio por el que podemos sostener nuestra atención.
En esta época, la incertidumbre de lo que nos depara ha hecho que muchas personas entren en una situación de urgencia; es decir, que todo aquello que conocían, de un día al otro se les desmoronó, viéndose afectados y con la necesidad de buscar contención emocional. Nuestra tarea es que esta urgencia que es general a todos, pase a una urgencia subjetiva, que le permita a cada persona identificar qué es lo que se le ha movido con esta cuarentena, que es lo que ya no anda y eso es singular a cada uno de ellos.
¿Cómo el aislamiento social puede haber afectado la salud mental de la población que vive en riesgo?
He visto un video que circula, es una metáfora que puede servir para comprender la dificultad de este momento para personas que viven en situación de riesgo: “todos estamos en la misma tempestad, pero en el mismo barco”. Pero paradójicamente, la pandemia ha hecho más evidentes las diferencias y situaciones de precariedad que siempre se ha querido tapar o la sociedad no ha querido ver. No es lo mismo estar encerrados y sufriendo por no salir de una casa donde cada uno de los integrantes tiene su propio espacio, que una familia esté en un espacio que debe ser compartido por todos y donde es difícil mantener una separación necesaria del otro, no solo para evitar contagios, sino para mantener un equilibrio mental. De esto se habla poco.
Han ido creciendo las cifras de violencia en esta población, el no contar con recursos económicos, de salud, de alimentación, de acceso a la educación, traen consigo afectaciones a nivel emocional y mental, que hacen que muchas veces se deje de lado el bienestar psíquico, a pesar de que este es tan importante como cualquier otra necesidad básica.
En esta población la amenaza es mucho más real, pues no basta con no salir para mantener su salud, sino que quedarse adentro es igualmente nocivo, haber perdido su privacidad por falta de espacio es otra gran dificultad. ¿Cómo no va a traer consigo serias alteraciones? Y es algo sobre lo que debemos reflexionar y encaminar medios para su atención.
¿Qué tipo de problemas son más comunes en esta población?
Cualquier acontecimiento que pueda provocar malestar o afectar el estado emocional del ser humano sin importar su sexo, status económico o social. En este sentido, las afectaciones van a ser diversas, puede haber un sentimiento de desamparo que lo deja sin ganas de hacer nada, manifestaciones que ante la imposibilidad de poner en palabras lo que sucede se traslada al cuerpo, aparecen dolores de cabeza o imposibilidad de respirar, entre otros síntomas, que pueden ser confundidos con otras afecciones.
Como mencioné, cada uno va a responder a esta amenaza general a su manera. Sin embargo, no es lo mismo quedar encerrado en un espacio con todo lo necesario, que no tener esa opción.
La población a la que dirige su atención Uyarina-Punto de Encuentro se encuentra segregada de la sociedad, sumando de esta manera más riesgo. Si bien la violencia no diferencia círculos sociales, las manifestaciones de ésta difieren de un grupo a otro y ese es uno de los problemas más grandes que afecta a esta población. Las instituciones gubernamentales han ido recibiendo denuncias de un incremento en la violencia intrafamiliar y es un tema al que se debería prestar más atención de la que se da.
¿Qué tipo de terapia aplican y en qué consiste?
Hablemos mejor de tratamiento mediante la palabra. Tratamiento a las personas angustiadas, con miedo, incertidumbre y que al poner en palabras su malestar, éste se reduce.
Uyarina, en este momento, ante la imposibilidad del acercamiento físico, abre el espacio de escucha mediante comunicación telefónica, en este espacio que es siempre acorde a la persona que solicita la atención, se genera una posibilidad de encuentro. ¿Qué encuentro? De la persona que habla y que dirige lo que dice a alguien que escucha y le posibilita ver, en primer lugar, qué es lo que hay de lo propio en eso que dice y que le causa sufrimiento.
Por teléfono, lo que se puede hacer, es escuchar eso que más le genera malestar en este momento, a partir de esta escucha, la persona pueda ver qué aspectos de su vida se encuentran afectados, si son recientes o siempre estuvieron ahí. Sobre qué puede tener control y qué no, diferenciar una amenaza real de una imaginada. Hacer esa diferencia puede ayudar a encontrar un alivio que le permita más adelante inventar formas para hacer frente a eso que le molesta.
Quienes quieran saber más sobre este malestar, que es propio de cada uno, podrán continuar con la atención en las oficinas de la institución, una vez que sea posible hacerlo.
¿Qué viene tras la cuarentena?
Es algo que aún no podemos responder a cabalidad, podemos intuir que la situación de crisis general va a seguir afectando de manera singular a cada uno, es posible también que existan más desórdenes mentales que los que hasta ahora hemos estado presenciando. Podemos anticipar también que se va a hacer necesario la presencia de dispositivos de escucha ante estos malestares.