La maternidad de Santa Cruz implementa un filtro para diagnosticar a embarazadas sospechosas de Covid-19
El hospital ya atendió tres casos sospechosos, pero fueron descartados. Necesita equipar una sala de terapia intermedia y requiere de personal de salud para atender a este tipo de pacientes
Berthy Vaca J
El Deber
El Hospital de la Mujer Percy Boland habilitó por cuenta propia un punto de triaje para detectar síntomas de la enfermedad en las mujeres embarazadas ante de su ingreso a la sala de Emergencia, con el fin de derivarlas a un lugar aislado y para tener en alerta al personal de salud.
Del mismo modo, la administración de este centro de tercer nivel ha acondicionado a medias dos salas de aislamiento para pacientes con el virus: una para las mujeres y otra para los recién nacidos. Les falta equipamiento que ha sido solicitado al Servicio Departamental de Salud Sedes), sin obtener respuesta, según fuentes oficiales.
“La maternidad está preparada relativamente. Nos falta equipamiento y recursos humanos. Ojalá que no nos lleguen pacientes con Covid-19”, manifestó Federico Urquizu, director del nosocomio, puntualizando que para la sala de terapia intermedia de las embarazadas hay una cama, pero falta “por lo menos un respirador, un monitor, un ventilador y bombas de, no tenemos nada de eso”, enfatizó.
Además, demanda, al menos, el concurso de seis enfermeras para la unidad de aislamiento y un ginecólogo obstetra que esté permanentemente en el triaje para diagnosticar a las sospechosas con la finalidad de enviarlas directo al área correspondiente.
Urquizu dejó en claro que la maternidad, a diferencia de otros hospitales públicos, no tiene ingresos económicos de ningún tipo porque es un centro de referencia, cuyas pacientes son atendidas de forma gratuita por medio de Seguro Universal (SUS); por lo tanto, a la administración se le hace difícil adquirir sus propios equipos.
“Hemos solicitado muchas veces el equipamiento al Sedes. El jueves por la mañana reclamé (en el COED) y no me han dejado ni hablar. Nos faltan pocas cosas en el equipamiento y las posibilidades de recibir a pacientes coronavirus o sospechosas son altas”, advirtió el director del maternológico.
Realizadas las consultas en el Sedes para conocer la palabra de su director, en la oficina informaron que se encontraba en reunión.
Se descartaron tres casos
Durante la cuarentena, tres mujeres gestantes han llegado al nosocomio, en distintas fechas, presentando algunos síntomas similares a los que sufren los enfermos de este mal. Se les tomó muestras que, en el laboratorio de Cenetrop, dieron negativo.
“Ya se han presentado tres casos sospechosos, el último el jueves pasado, pero gracias a Dios han salido negativo”, señaló Urquizu.
Material de bioseguridad
La administración ha comprado gafas y otro material de protección personal para los salubristas. Asimismo, instituciones como las Naciones Unidas y fraternidades locales han hecho llegar equipos de bioseguridad para el personal.
El Deber
El Hospital de la Mujer Percy Boland habilitó por cuenta propia un punto de triaje para detectar síntomas de la enfermedad en las mujeres embarazadas ante de su ingreso a la sala de Emergencia, con el fin de derivarlas a un lugar aislado y para tener en alerta al personal de salud.
Del mismo modo, la administración de este centro de tercer nivel ha acondicionado a medias dos salas de aislamiento para pacientes con el virus: una para las mujeres y otra para los recién nacidos. Les falta equipamiento que ha sido solicitado al Servicio Departamental de Salud Sedes), sin obtener respuesta, según fuentes oficiales.
“La maternidad está preparada relativamente. Nos falta equipamiento y recursos humanos. Ojalá que no nos lleguen pacientes con Covid-19”, manifestó Federico Urquizu, director del nosocomio, puntualizando que para la sala de terapia intermedia de las embarazadas hay una cama, pero falta “por lo menos un respirador, un monitor, un ventilador y bombas de, no tenemos nada de eso”, enfatizó.
Además, demanda, al menos, el concurso de seis enfermeras para la unidad de aislamiento y un ginecólogo obstetra que esté permanentemente en el triaje para diagnosticar a las sospechosas con la finalidad de enviarlas directo al área correspondiente.
Urquizu dejó en claro que la maternidad, a diferencia de otros hospitales públicos, no tiene ingresos económicos de ningún tipo porque es un centro de referencia, cuyas pacientes son atendidas de forma gratuita por medio de Seguro Universal (SUS); por lo tanto, a la administración se le hace difícil adquirir sus propios equipos.
“Hemos solicitado muchas veces el equipamiento al Sedes. El jueves por la mañana reclamé (en el COED) y no me han dejado ni hablar. Nos faltan pocas cosas en el equipamiento y las posibilidades de recibir a pacientes coronavirus o sospechosas son altas”, advirtió el director del maternológico.
Realizadas las consultas en el Sedes para conocer la palabra de su director, en la oficina informaron que se encontraba en reunión.
Se descartaron tres casos
Durante la cuarentena, tres mujeres gestantes han llegado al nosocomio, en distintas fechas, presentando algunos síntomas similares a los que sufren los enfermos de este mal. Se les tomó muestras que, en el laboratorio de Cenetrop, dieron negativo.
“Ya se han presentado tres casos sospechosos, el último el jueves pasado, pero gracias a Dios han salido negativo”, señaló Urquizu.
Material de bioseguridad
La administración ha comprado gafas y otro material de protección personal para los salubristas. Asimismo, instituciones como las Naciones Unidas y fraternidades locales han hecho llegar equipos de bioseguridad para el personal.
