En cuarentena y sin trabajo, choferes de micro piden a sus líneas dinero para sobrevivir
Los dirigentes de los conductores de vehículos del servicio público amenazas con salir a las calles el lunes. La dirigencia asegura que hay apertura para buscar soluciones
Christian Gabriel Peña Y Lillo
El Deber
El dirigente de los choferes de micros de Santa Cruz, Marcelo Mamani, lanzó un plazo e hizo una amenaza. Dijo que si hasta el lunes los propietarios de los micros no devuelven el dinero correspondiente a los ahorror}s que entregan diariamente en sus trabajo, saldrán a las calles a protestar rompiendo así la cuarentena nacional por la pandemia del coronavirus.
Mamani aseveró, en un contacto telefónico con EL DEBER, que la situación de su sector es insostenible, ya que al no poder salir con los motorizados a prestar el servicio de transporte en la ciudad, ellos se han visto anulados en la posibilidad de generar recursos económicos para sus familias. “Qué les podemos decir a nuestros hijos ahora, que por la cuarentena no tendrán que comer”, preguntó el líder sindical, que dice representar a más de 600 conductores de los más de 9.000 que hay en el departamento.
Para Mamani la solución debiera ser simple, ya que él insiste en que los responsables de las líneas deberían devolver parte del dinero que asegura entregan a diario cuando están trabajando, como una suerte de ahorro para fin de año, lo mismo que el monto fijo que deben dejar como una garantía a los dueños de los vehículos.
“Los dirigentes siempre nos dicen que el dinero es para una emergencia y ahora estamos en una, necesitamos recursos para alimentar a nuestras familias”, apuntó el dirigente.
Christian Gabriel Peña Y Lillo
El Deber
El dirigente de los choferes de micros de Santa Cruz, Marcelo Mamani, lanzó un plazo e hizo una amenaza. Dijo que si hasta el lunes los propietarios de los micros no devuelven el dinero correspondiente a los ahorror}s que entregan diariamente en sus trabajo, saldrán a las calles a protestar rompiendo así la cuarentena nacional por la pandemia del coronavirus.
Mamani aseveró, en un contacto telefónico con EL DEBER, que la situación de su sector es insostenible, ya que al no poder salir con los motorizados a prestar el servicio de transporte en la ciudad, ellos se han visto anulados en la posibilidad de generar recursos económicos para sus familias. “Qué les podemos decir a nuestros hijos ahora, que por la cuarentena no tendrán que comer”, preguntó el líder sindical, que dice representar a más de 600 conductores de los más de 9.000 que hay en el departamento.
Para Mamani la solución debiera ser simple, ya que él insiste en que los responsables de las líneas deberían devolver parte del dinero que asegura entregan a diario cuando están trabajando, como una suerte de ahorro para fin de año, lo mismo que el monto fijo que deben dejar como una garantía a los dueños de los vehículos.
“Los dirigentes siempre nos dicen que el dinero es para una emergencia y ahora estamos en una, necesitamos recursos para alimentar a nuestras familias”, apuntó el dirigente.