Campamento en Pisiga tiene capacidad para 300 personas; ya se instalaron 25 carpas
El ministro de Defensa, Fernando López, inspeccionó este viernes en Pisiga el campamento A, que recibirá a los bolivianos varados en Huara, Chile. Los compatriotas ingresarán mañana al país. El gobernador de Oruro acompañó a la autoridad.
Ivan Alejandro Paredes
El Deber
Son 25 carpas que albergarán un máximo de 300 bolivianos que mañana cruzarán la frontera entre Bolivia y Chile. Hoy, el ministro de Defensa, Fernando López, inspeccionó el campamento A en la localidad de Pisiga, junto al gobernador de Oruro, Zenón Pizarro, y autoridades locales.
El lugar, que es un terreno amplio junto a una cancha con tinglado, albergará a los compatriotas que se quedaron en el lado chileno tras que el Gobierno transitorio declaró el cierre de fronteras por el avance de la cuarentena.
"Los vamos a recibir con el mayor de los cariños y todas las condiciones. Al momento, tenemos capacidad para 300 personas y solo vamos a recibir el día de mañana. Vamos a ver qué pasa en los próximos días. Hicimos una inspección del campamento A donde están involucrados ministerios y la Alcaldía de Pisiga. Se fumigó las carpas y se inspeccionó la cocina. Este campamento está prácticamente listo y a partir de mañana estamos dispuestos a recibir a 300 compatriotas", detalló López desde Pisiga.
Mónica Quijua es una de las representantes de los afectados. La boliviana informó a EL DEBER de que hoy viernes les comunicaron que funcionarios bolivianos están llegando a Huara para contabilizar cuántos compatriotas están en esa situación y realizar los trámites migratorios para su ingreso. La delegada espera que está vez la repatriación sea efectiva y no como sucedió a principios de esta semana, cuando la canciller Karen Longaric anunció que los connacionales iban a ingresar al país y luego se decidió no repatriar al grupo por una "decisión presidencial".
La canciller Longaric informó que a las 05:00 de mañana una cantidad de buses recogerán a los bolivianos que están en la comuna chilena de Huara, a dos horas de la frontera. El gobernador de Oruro, Zenón Pizarro, pidió a los bolivianos que ingresarán mañana cumplir la cuarentena y así evitar contagios en la región, que lleva 14 días con un silencio epidemiológico.
El Deber
Son 25 carpas que albergarán un máximo de 300 bolivianos que mañana cruzarán la frontera entre Bolivia y Chile. Hoy, el ministro de Defensa, Fernando López, inspeccionó el campamento A en la localidad de Pisiga, junto al gobernador de Oruro, Zenón Pizarro, y autoridades locales.
El lugar, que es un terreno amplio junto a una cancha con tinglado, albergará a los compatriotas que se quedaron en el lado chileno tras que el Gobierno transitorio declaró el cierre de fronteras por el avance de la cuarentena.
"Los vamos a recibir con el mayor de los cariños y todas las condiciones. Al momento, tenemos capacidad para 300 personas y solo vamos a recibir el día de mañana. Vamos a ver qué pasa en los próximos días. Hicimos una inspección del campamento A donde están involucrados ministerios y la Alcaldía de Pisiga. Se fumigó las carpas y se inspeccionó la cocina. Este campamento está prácticamente listo y a partir de mañana estamos dispuestos a recibir a 300 compatriotas", detalló López desde Pisiga.
Mónica Quijua es una de las representantes de los afectados. La boliviana informó a EL DEBER de que hoy viernes les comunicaron que funcionarios bolivianos están llegando a Huara para contabilizar cuántos compatriotas están en esa situación y realizar los trámites migratorios para su ingreso. La delegada espera que está vez la repatriación sea efectiva y no como sucedió a principios de esta semana, cuando la canciller Karen Longaric anunció que los connacionales iban a ingresar al país y luego se decidió no repatriar al grupo por una "decisión presidencial".
La canciller Longaric informó que a las 05:00 de mañana una cantidad de buses recogerán a los bolivianos que están en la comuna chilena de Huara, a dos horas de la frontera. El gobernador de Oruro, Zenón Pizarro, pidió a los bolivianos que ingresarán mañana cumplir la cuarentena y así evitar contagios en la región, que lleva 14 días con un silencio epidemiológico.
