Gestora de viaje de Ronaldinho a Paraguay apela a coronavirus y sigue prófuga
Dalia López, considerada pieza clave en la causa que tiene encarcelado a Ronaldinho, debía de presentarse este miércoles a una audiencia de imposición de medidas.
EFE
Una jueza declaró este miércoles el estado de rebeldía y ordenó la captura de la empresaria prófuga Dalia López, considerada pieza clave en la causa que desde hace doce días tiene encarcelados en Paraguay a Ronaldinho Gaúcho y su hermano Roberto tras ingresar en el país con pasaportes falsos. La empresaria debía de presentarse este miércoles a una audiencia de imposición de medidas, después de que la Fiscalía le imputara a primeros de mes por participación en un delito de producción y uso de documentos públicos de contenido falso, así como de asociación criminal.
López está desde entonces en paradero desconocido, aunque tuvo un notorio protagonismo en el recibimiento en el aeropuerto de Asunción de los dos hermanos, el 4 de marzo. El abogado de López, Alvaro Arias, se personó este miércoles ante la jueza penal de garantías Lici Sánchez para reiterar la petición de la víspera de su cliente, de suspender la audiencia para evitar un posible contagio de coronavirus debido a que adolece de hipertensión y de diabetes de tipo 2. "Es una persona que tiene estas dos afecciones de base. ¿Y si llega contagiarse con ese virus?", preguntó Arias a los periodistas en el Palacio de Justicia. El abogado incidió además que López estará en riesgo si se expone a esa audiencia, en medio de la cuarentena de dos semanas decretada por el Gobierno para atajar la circulación del coronavirus. Sin embargo, Sánchez declaró en rebeldía a la empresaria e impartió orden de captura para después se puesta a disposición de otro juzgado penal de garantías.
López está señalada por el Ministerio Público como supuesta cabeza de una red dedicada a "facilitar la elaboración y utilización de documentos de identidad y pasaportes de contenido falso". Ello dentro de la investigación abierta tras el ingreso de Ronaldinho y Roberto de Assis Moreira a Paraguay a través del aeropuerto internacional de Asunción. López era la presidenta de la Fundación Fraternidad Angelical, que tenía previsto presentar un programa de atención sanitaria gratuita a niños y niñas de Paraguay con el apoyo de Ronaldinho. La personería de la fundación fue disuelta por el Ejecutivo al poco de que estallara el escándalo. Hasta el momento hay más de una decena de imputados por el caso, que salpica a funcionarios del Departamento de Identificaciones, que expide pasaportes y documentos, a la Dirección de Migraciones y a la autoridad del aeropuerto internacional de Asunción.
La defensa del exjugador del Barcelona y de su hermano, que es también el representante de Ronaldinho, sostiene que esos documentos fueron un regalo al que no dieron mayor importancia los dos hermanos. Ambos estaban interesados en establecer negocios en Paraguay, según sus abogados. Los hermanos Assis están recluidos en la sede de la Agrupación Especializada, un cuartel de policía de las afueras de Asunción que alberga a agentes con procesos penales, políticos acusados de corrupción, narcotraficantes y presos de alta peligrosidad
EFE
Una jueza declaró este miércoles el estado de rebeldía y ordenó la captura de la empresaria prófuga Dalia López, considerada pieza clave en la causa que desde hace doce días tiene encarcelados en Paraguay a Ronaldinho Gaúcho y su hermano Roberto tras ingresar en el país con pasaportes falsos. La empresaria debía de presentarse este miércoles a una audiencia de imposición de medidas, después de que la Fiscalía le imputara a primeros de mes por participación en un delito de producción y uso de documentos públicos de contenido falso, así como de asociación criminal.
López está desde entonces en paradero desconocido, aunque tuvo un notorio protagonismo en el recibimiento en el aeropuerto de Asunción de los dos hermanos, el 4 de marzo. El abogado de López, Alvaro Arias, se personó este miércoles ante la jueza penal de garantías Lici Sánchez para reiterar la petición de la víspera de su cliente, de suspender la audiencia para evitar un posible contagio de coronavirus debido a que adolece de hipertensión y de diabetes de tipo 2. "Es una persona que tiene estas dos afecciones de base. ¿Y si llega contagiarse con ese virus?", preguntó Arias a los periodistas en el Palacio de Justicia. El abogado incidió además que López estará en riesgo si se expone a esa audiencia, en medio de la cuarentena de dos semanas decretada por el Gobierno para atajar la circulación del coronavirus. Sin embargo, Sánchez declaró en rebeldía a la empresaria e impartió orden de captura para después se puesta a disposición de otro juzgado penal de garantías.
López está señalada por el Ministerio Público como supuesta cabeza de una red dedicada a "facilitar la elaboración y utilización de documentos de identidad y pasaportes de contenido falso". Ello dentro de la investigación abierta tras el ingreso de Ronaldinho y Roberto de Assis Moreira a Paraguay a través del aeropuerto internacional de Asunción. López era la presidenta de la Fundación Fraternidad Angelical, que tenía previsto presentar un programa de atención sanitaria gratuita a niños y niñas de Paraguay con el apoyo de Ronaldinho. La personería de la fundación fue disuelta por el Ejecutivo al poco de que estallara el escándalo. Hasta el momento hay más de una decena de imputados por el caso, que salpica a funcionarios del Departamento de Identificaciones, que expide pasaportes y documentos, a la Dirección de Migraciones y a la autoridad del aeropuerto internacional de Asunción.
La defensa del exjugador del Barcelona y de su hermano, que es también el representante de Ronaldinho, sostiene que esos documentos fueron un regalo al que no dieron mayor importancia los dos hermanos. Ambos estaban interesados en establecer negocios en Paraguay, según sus abogados. Los hermanos Assis están recluidos en la sede de la Agrupación Especializada, un cuartel de policía de las afueras de Asunción que alberga a agentes con procesos penales, políticos acusados de corrupción, narcotraficantes y presos de alta peligrosidad