El referente de Boca que arrancó el curso de DT
No sólo es el técnico dentro de la cancha. Ahora también lo será afuera a los 31, decidió empezar a prepararse para ser entrenador. Y en tres años ya podría dirigir Primera. ¿Te lo imaginás con buzo azul y oro?
Olé
Experiencia. Carácter. Personalidad. Presencia. Liderazgo. Voz de mando. Carlos Izquierdoz es, para muchos, el técnico que Boca tiene dentro de la cancha. Cuando no está Carlitos, el Cali es el capitán. Desde la zaga vigila cada uno de los movimientos del equipo y tiene línea directa con Russo para ordenar a los compañeros y, más de una vez, hacer cumplir las órdenes que llegan desde el banco.
Sin embargo, el defensor de 31 años no quiere quedarse sólo con eso. Su idea es siempre ir por más, tanto en el fútbol como en la vida. Y por eso tomó una decisión importante para seguir potenciándose como futbolista y de paso, por qué no, empezar a planificar su vida después del retiro. Aunque todavía falta bastante, el rionegrino ya puso primera: inició el curso para ser DT.
El Cali está a un pasito de cumplir los 400 partidos en Primera entre Atlanta, Lanús, Santos Laguna y Boca. Y fue dirigido por varios técnicos que le dejaron enseñanzas y lo marcaron para el resto de su carrera. Entre ellos, Luis Zubeldía (lo hizo debutar en Lanús y lo tuvo en México); Gabriel Schürrer, que lo consolidó en el Grana como marcador central (antes jugaba de lateral) y Guillermo Barros Schelotto, con el que ganó la Sudamericana 2013 y después lo llevó a Boca. Ahora, Izquierdoz buscará sacar lo mejor de cada uno de ellos y volcarlo en la cancha, del otro lado de la línea de cal.
Izquierdoz ya tenía la idea dando vueltas en la cabeza, pero se decidió este año. Nicolás Russo, presi de Lanús, fue quien puso al Cali en contacto con el responsable de la escuela “Juan Héctor Guidi”, que funciona en las aulas de la escuela primaria del Grana. Y el defensor no lo dudó. Más: eran tantas las ganas que tenía de arrancar que, concentrado 100% en la recta final de la Superliga y el comienzo de la Libertadores, no quiso perder tiempo y le pidió a su esposa que pasara por la sede a anotarlo.
Dateado por Nicola, el zaguero primero se comunicó con Hernán Da Graca, el director de la escuela, para consultarle días y horarios de las clases y algunos detalles más sobre la cursada. Da Graca (ex futbolista de Lanús y Los Andes, hoy asistente de Eduardo Lara en El Nacional ecuatoriano) le explicó el paso por paso de la cursada y le fue claro en un punto: los jugadores profesionales que participan del curso tienen la falta justificada siempre y cuando se encuentren practicando, concentrando o afectados a un partido. Pero ese día deben pedirle la tarea a un compañero. Cali aceptó las condiciones y hace un par de semanas tuvo primera clase.
Lo recibieron Abel Da Graca (papá de Hernán y supervisor de todas las escuelas pertenecientes a la Asociación Argentina de Técnicos), y Nicolás, hijo del director y asistente de cátedra. Mientras se lo permita el calendario, el Cali debe asistir al club tres veces por semana, de 19 a 22.30. De todos modos, hasta tanto se extienda la cuarentena, podrá cursar a través de un aula digital.
El curso completo dura tres años. Con el primero terminado, el Cali será instructor de fútbol infantil. Y obtendría las licencias C y B de Conmebol. La C lo habilita a entrenar a niños de hasta 12 años. Y la segunda, a dirigir a menores de 15. A fines del 2022 ya obtendría su título de Entrenador Nacional de Fútbol, que por ejemplo le permite hacerse cargo de un combinado Sub 16 o hasta una Cuarta División. Y al cierre del tercer año ya estaría en condiciones de conducir cualquier plantel de Primera y hasta una selección.
¿Qué materias deberá rendir? Las teóricas están vinculadas en su mayoría a la preparación física, la psicología, la medicina, historia del fútbol, reglamento y arbitraje. Las prácticas, en tanto, también se cursan en Lanús, en el predio ubicado detrás de la Fortaleza. Todos lo notan muy metido. ¿Se viene el Deportivo Cali?
El Cali siempre fue un chico muy atento a todo. En los entrenamientos lo recuerdo como un jugador correcto y muy aplicado, que todo el tiempo deseaba incorporar herramientas para potenciar su rendimiento. Además, es una persona muy perseverante y comunicativa, de esos futbolistas que se sienten cómodos y útiles ordenando a sus compañeros para mejorar el nivel colectivo del equipo. Un buen líder en todo concepto.
Que haya iniciado el curso de entrenador no me sorprende para nada. Por el contrario, es algo que se veía venir. Creo que desde su experiencia, más lo que aprenderá en el curso, tendrá mucho para aportarle a esta profesión. A la vez, haber desarrollado la carrera en la zaga, y haber jugado tantos partidos con la cancha de frente, a los que fuimos marcadores centrales nos da una mirada táctica diferente que él sabrá aprovechar muy bien.
Cuando yo lo tuve al Cali, él ya había vuelto del préstamo por Atlanta y en Lanús venía jugando de lateral derecho, casi siempre como alternativa del Pipi Araujo. Pero a mí me gustaba más como central, y con su esfuerzo le terminó ganando el puesto a un jugador importante como Santiago Hoyos, que había sido campeón con el club. Ojalá el tiempo que compartimos en Lanús le sirva en este nuevo camino.
Me pone muy contento que el Cali haya empezado el curso de DT. No sé si cuando éramos compañeros le veía proyección como director técnico, pero lo que sí tiene es voz de mando, de caudillo. Y hoy mismo puedo observar desde afuera cómo dirige y ordena a sus compañeros dentro de la cancha. Me pone muy feliz no sólo esta decisión que tomó, sino la manera en la que pudo progresar en su carrera. Y todo lo que ha ido logrando. Es un tipo que la peleó desde muy abajo y en todos los planteles que integró fue referente. Además, ha tenido entrenadores muy importantes y eso seguramente le permitió incorporar muchos conceptos tácticos que le vendrán muy bien a la hora de dirigir un plantel.
De todos modos, es bueno aclarar que no alcanza sólo con haber jugado para ser entrenador. Más allá de que eso nos da una pequeña ventaja, hay que prepararse mucho porque es una carrera totalmente diferente. Ya no llegás al vestuario y te dicen lo que tenés que hacer. Ahora sos vos el que se para frente a un grupo de 30 jugadores y tiene que resolver diferentes situaciones que se van presentando. El curso, por ejemplo, le va a servir al Cali para saber cómo planificar una semana de trabaja y desarrollar su propia metodología. Conociéndolo, seguro le irá muy bien.
Palazo de Morel Rodríguez a River
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Hernán Da Graca
Director de la escuela
Estoy seguro de que a Carlos le va a ir muy bien en el curso. Por el contacto que he tenido con él, se nota que es una gran persona y que tiene muchas ganas de aprender. A su gran experiencia en la cancha le va a sumar el aprendizaje de nuestras clases, y eso lo convertirá seguramente en un gran técnico. Para mí, es un orgullo tenerlo en nuestras aulas.
Olé
Experiencia. Carácter. Personalidad. Presencia. Liderazgo. Voz de mando. Carlos Izquierdoz es, para muchos, el técnico que Boca tiene dentro de la cancha. Cuando no está Carlitos, el Cali es el capitán. Desde la zaga vigila cada uno de los movimientos del equipo y tiene línea directa con Russo para ordenar a los compañeros y, más de una vez, hacer cumplir las órdenes que llegan desde el banco.
Sin embargo, el defensor de 31 años no quiere quedarse sólo con eso. Su idea es siempre ir por más, tanto en el fútbol como en la vida. Y por eso tomó una decisión importante para seguir potenciándose como futbolista y de paso, por qué no, empezar a planificar su vida después del retiro. Aunque todavía falta bastante, el rionegrino ya puso primera: inició el curso para ser DT.
El Cali está a un pasito de cumplir los 400 partidos en Primera entre Atlanta, Lanús, Santos Laguna y Boca. Y fue dirigido por varios técnicos que le dejaron enseñanzas y lo marcaron para el resto de su carrera. Entre ellos, Luis Zubeldía (lo hizo debutar en Lanús y lo tuvo en México); Gabriel Schürrer, que lo consolidó en el Grana como marcador central (antes jugaba de lateral) y Guillermo Barros Schelotto, con el que ganó la Sudamericana 2013 y después lo llevó a Boca. Ahora, Izquierdoz buscará sacar lo mejor de cada uno de ellos y volcarlo en la cancha, del otro lado de la línea de cal.
Izquierdoz ya tenía la idea dando vueltas en la cabeza, pero se decidió este año. Nicolás Russo, presi de Lanús, fue quien puso al Cali en contacto con el responsable de la escuela “Juan Héctor Guidi”, que funciona en las aulas de la escuela primaria del Grana. Y el defensor no lo dudó. Más: eran tantas las ganas que tenía de arrancar que, concentrado 100% en la recta final de la Superliga y el comienzo de la Libertadores, no quiso perder tiempo y le pidió a su esposa que pasara por la sede a anotarlo.
Dateado por Nicola, el zaguero primero se comunicó con Hernán Da Graca, el director de la escuela, para consultarle días y horarios de las clases y algunos detalles más sobre la cursada. Da Graca (ex futbolista de Lanús y Los Andes, hoy asistente de Eduardo Lara en El Nacional ecuatoriano) le explicó el paso por paso de la cursada y le fue claro en un punto: los jugadores profesionales que participan del curso tienen la falta justificada siempre y cuando se encuentren practicando, concentrando o afectados a un partido. Pero ese día deben pedirle la tarea a un compañero. Cali aceptó las condiciones y hace un par de semanas tuvo primera clase.
Lo recibieron Abel Da Graca (papá de Hernán y supervisor de todas las escuelas pertenecientes a la Asociación Argentina de Técnicos), y Nicolás, hijo del director y asistente de cátedra. Mientras se lo permita el calendario, el Cali debe asistir al club tres veces por semana, de 19 a 22.30. De todos modos, hasta tanto se extienda la cuarentena, podrá cursar a través de un aula digital.
El curso completo dura tres años. Con el primero terminado, el Cali será instructor de fútbol infantil. Y obtendría las licencias C y B de Conmebol. La C lo habilita a entrenar a niños de hasta 12 años. Y la segunda, a dirigir a menores de 15. A fines del 2022 ya obtendría su título de Entrenador Nacional de Fútbol, que por ejemplo le permite hacerse cargo de un combinado Sub 16 o hasta una Cuarta División. Y al cierre del tercer año ya estaría en condiciones de conducir cualquier plantel de Primera y hasta una selección.
¿Qué materias deberá rendir? Las teóricas están vinculadas en su mayoría a la preparación física, la psicología, la medicina, historia del fútbol, reglamento y arbitraje. Las prácticas, en tanto, también se cursan en Lanús, en el predio ubicado detrás de la Fortaleza. Todos lo notan muy metido. ¿Se viene el Deportivo Cali?
El Cali siempre fue un chico muy atento a todo. En los entrenamientos lo recuerdo como un jugador correcto y muy aplicado, que todo el tiempo deseaba incorporar herramientas para potenciar su rendimiento. Además, es una persona muy perseverante y comunicativa, de esos futbolistas que se sienten cómodos y útiles ordenando a sus compañeros para mejorar el nivel colectivo del equipo. Un buen líder en todo concepto.
Que haya iniciado el curso de entrenador no me sorprende para nada. Por el contrario, es algo que se veía venir. Creo que desde su experiencia, más lo que aprenderá en el curso, tendrá mucho para aportarle a esta profesión. A la vez, haber desarrollado la carrera en la zaga, y haber jugado tantos partidos con la cancha de frente, a los que fuimos marcadores centrales nos da una mirada táctica diferente que él sabrá aprovechar muy bien.
Cuando yo lo tuve al Cali, él ya había vuelto del préstamo por Atlanta y en Lanús venía jugando de lateral derecho, casi siempre como alternativa del Pipi Araujo. Pero a mí me gustaba más como central, y con su esfuerzo le terminó ganando el puesto a un jugador importante como Santiago Hoyos, que había sido campeón con el club. Ojalá el tiempo que compartimos en Lanús le sirva en este nuevo camino.
Me pone muy contento que el Cali haya empezado el curso de DT. No sé si cuando éramos compañeros le veía proyección como director técnico, pero lo que sí tiene es voz de mando, de caudillo. Y hoy mismo puedo observar desde afuera cómo dirige y ordena a sus compañeros dentro de la cancha. Me pone muy feliz no sólo esta decisión que tomó, sino la manera en la que pudo progresar en su carrera. Y todo lo que ha ido logrando. Es un tipo que la peleó desde muy abajo y en todos los planteles que integró fue referente. Además, ha tenido entrenadores muy importantes y eso seguramente le permitió incorporar muchos conceptos tácticos que le vendrán muy bien a la hora de dirigir un plantel.
De todos modos, es bueno aclarar que no alcanza sólo con haber jugado para ser entrenador. Más allá de que eso nos da una pequeña ventaja, hay que prepararse mucho porque es una carrera totalmente diferente. Ya no llegás al vestuario y te dicen lo que tenés que hacer. Ahora sos vos el que se para frente a un grupo de 30 jugadores y tiene que resolver diferentes situaciones que se van presentando. El curso, por ejemplo, le va a servir al Cali para saber cómo planificar una semana de trabaja y desarrollar su propia metodología. Conociéndolo, seguro le irá muy bien.
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Hernán Da Graca
Director de la escuela
Estoy seguro de que a Carlos le va a ir muy bien en el curso. Por el contacto que he tenido con él, se nota que es una gran persona y que tiene muchas ganas de aprender. A su gran experiencia en la cancha le va a sumar el aprendizaje de nuestras clases, y eso lo convertirá seguramente en un gran técnico. Para mí, es un orgullo tenerlo en nuestras aulas.