El City se estrella en Old Trafford a nueve días de recibir al Madrid
Guiado por un gran Bruno Fernandes, el United hizo un partido muy serio y castigó todos los errores de un City que se deja ir en la Premier.
Alberto Muñoz
As
La falta de estímulos en liga y la cercanía de la vuelta de los octavos de la Champions ante el Real Madrid despistaron a un Manchester City que se vio superado en Old Trafford, donde los de Solskjaer, mucho más acuciados por la necesidad de puntos en Premier, pusieron más voluntad en un derbi más descafeinado que de costumbre. Martial, que ha mejorado con la llegada de Bruno, que está demostrando ser un fichaje espectacular, puso el tanto en una victoria que les mantiene en la pelea por la cuarta posición que defiende el Chelsea. Agüero, al que le anularon un gol, se marchó con molestias, mientras que Ederson, el gran señalado del encuentro, falló en las dos jugadas que le costaron la derrota a los suyos.
Con la mente puesta en el partido de vuelta ante el los blancos, el Manchester City se vio superado en los primeros 45 minutos por un United muy bien plantado sobre el terreno de juego que aprovechó el buen momento de Bruno Fernandes y la verticalidad de Martial. El portugués, que ha resucitado al conjunto de Solskjaer desde su llegada, fue el encargado de inventarse una falta que no existió al borde del área y fue él mismo quien picó el balón por encima de la defensa para que el francés volease al primer palo. Ederson, que pudo hacer muchísimo más, quedó retratado por el punta de los red devils, que había tenido varias buenas ocasiones antes aunque no había decidido bien.
El buen hacer de los suyos pudo haberse visto recompensado, además, con un penalti que Otamendi pareció cometer sobre Fred, que vio la tarjeta por simular a pesar de que el contacto existió. En el VAR debieron valorar que la jugada no era lo suficientemente clara como para interceder, a pesar de que las gradas de Old Trafford rugieron de rabia.
En la segunda mitad, sin embargo, salieron mejor los de Pep, que obligaron a De Gea a esforzarse en un par de buenas paradas. En la única ocasión en que consiguieron superarle, los citizens estuvieron a punto de empatar por medio de Agüero, que llegó a marcar, pero el ex del Atlético de Madrid se encontraba en posición adelantada por escasos centímetros y el tanto no subió al marcador. Poco después, el argentino tuvo que abandonar el terreno de juego y aplicarse hielo en la rodilla, con todas las alarmas encendidas que eso supone de cara al decisivo partido del martes 17.
El United, por su parte, pudo hacer más grande su ventaja gracias a un error de Ederson, que se confió al ir a controlar una pelota y a punto estuvo de no ser capaz de despejar el balón antes de que llegase Martial. El francés, que fue con todo, acabó estrellándose con violencia contra el poste, aunque por suerte no se hizo nada grave. En los instantes finales el portero brasileño volvió a equivocarse en la salida y, esta vez sí, McTominay aprovechó el regalo para poner el segundo y definitivo tanto en el luminoso.
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La falta de estímulos en liga y la cercanía de la vuelta de los octavos de la Champions ante el Real Madrid despistaron a un Manchester City que se vio superado en Old Trafford, donde los de Solskjaer, mucho más acuciados por la necesidad de puntos en Premier, pusieron más voluntad en un derbi más descafeinado que de costumbre. Martial, que ha mejorado con la llegada de Bruno, que está demostrando ser un fichaje espectacular, puso el tanto en una victoria que les mantiene en la pelea por la cuarta posición que defiende el Chelsea. Agüero, al que le anularon un gol, se marchó con molestias, mientras que Ederson, el gran señalado del encuentro, falló en las dos jugadas que le costaron la derrota a los suyos.
Con la mente puesta en el partido de vuelta ante el los blancos, el Manchester City se vio superado en los primeros 45 minutos por un United muy bien plantado sobre el terreno de juego que aprovechó el buen momento de Bruno Fernandes y la verticalidad de Martial. El portugués, que ha resucitado al conjunto de Solskjaer desde su llegada, fue el encargado de inventarse una falta que no existió al borde del área y fue él mismo quien picó el balón por encima de la defensa para que el francés volease al primer palo. Ederson, que pudo hacer muchísimo más, quedó retratado por el punta de los red devils, que había tenido varias buenas ocasiones antes aunque no había decidido bien.
El buen hacer de los suyos pudo haberse visto recompensado, además, con un penalti que Otamendi pareció cometer sobre Fred, que vio la tarjeta por simular a pesar de que el contacto existió. En el VAR debieron valorar que la jugada no era lo suficientemente clara como para interceder, a pesar de que las gradas de Old Trafford rugieron de rabia.
En la segunda mitad, sin embargo, salieron mejor los de Pep, que obligaron a De Gea a esforzarse en un par de buenas paradas. En la única ocasión en que consiguieron superarle, los citizens estuvieron a punto de empatar por medio de Agüero, que llegó a marcar, pero el ex del Atlético de Madrid se encontraba en posición adelantada por escasos centímetros y el tanto no subió al marcador. Poco después, el argentino tuvo que abandonar el terreno de juego y aplicarse hielo en la rodilla, con todas las alarmas encendidas que eso supone de cara al decisivo partido del martes 17.
El United, por su parte, pudo hacer más grande su ventaja gracias a un error de Ederson, que se confió al ir a controlar una pelota y a punto estuvo de no ser capaz de despejar el balón antes de que llegase Martial. El francés, que fue con todo, acabó estrellándose con violencia contra el poste, aunque por suerte no se hizo nada grave. En los instantes finales el portero brasileño volvió a equivocarse en la salida y, esta vez sí, McTominay aprovechó el regalo para poner el segundo y definitivo tanto en el luminoso.
