Borré, de refuerzo desconocido a goleador irremplazable
El colombiano terminó como máximo anotador de la Superliga junto a Silvio Romero, con 12 tantos, a pesar de que el equipo de Gallardo no pudo consagrarse campeón.
Nicolás Mirelman
As
A mediados de 2017, primero Sebastián Driussi y luego Lucas Alario se marcharon de Núñez y dejaron un vacío difícil de llenar en la delantera. Los dos atacantes que habían conformado una dupla aceitada y temible para todos los rivales partían al fútbol europeo y Marcelo Gallardo tenía el desafío de reemplazarlos en medio de una Copa Libertadores.
Al desembarco de un futbolista de probada capacidad y experiencia como Ignacio Scocco, entonces, se sumó una cara desconocida, más vinculada a una apuesta a futuro que a una solución inmediata. En silencio y de manera casi repentina, se cerró la incorporación de Rafael Santos Borré.
"Trato de jugar por todo el frente de ataque, tener libertad para moverme constantemente y así crearle opciones al equipo", se describió a sí mismo el colombiano por el que el Millonario había pagado casi 3,5 millones de dólares para adquirir el 50 por ciento de la ficha. Una cifra que parecía exagerada para un extraño en el fútbol argentino y que incluso generó cuestionamientos por parte de algunos hinchas.
En lo que quedaba de ese año, el entrenador casi no contó con su nueva carta ofensiva, que apenas fue titular en ocho encuentros, pese a que River llegó a instancias decisivas en todas las competiciones que estaba disputando.
Con el tiempo, quedó claro que el Muñeco estaba puliendo detalles de un jugador que tenía las condiciones necesarias para adaptarse al estilo que pretendía. A partir de 2018, el Máquina mostró su mejor cara: goles determinantes, mayor confianza en sí mismo y mucho compromiso para ser el primer engranaje de la presión asfixiante del equipo. Estuvo desde el arranque en la ida de la final histórica en La Bombonera, pero no pudo jugar en la revancha en Madrid por acumulación de amonestaciones.
Tras un discreto primer semestre de 2019, volvió a destacarse en las fases finales de la Copa: marcó en cuartos de final contra Cerro Porteño, en semifinales ante Boca y también en la final frente a Flamengo, aunque no alcanzó para conseguir el título. Mientras tanto, acrecentaba su racha goleadora en el plano local.
De ser un juvenil con proyección que no había podido aclimatarse al fútbol europeo pasó a ser una pieza insustituible de uno de los mejores equipos de Sudamérica. Para eso, Rafa trabajó en su serenidad para definir, en su concentración para evitar la posición adelantada, en su técnica para retrasarse e integrarse al circuito de juego. Explotó al máximo sus virtudes y atenuó todo lo posible sus falencias.
Escudo/Bandera River Plate
River Plate
Argentina
Noticias Estadísticas
Su ya tradicional festejo de "Comandante" se convirtió en una sana costumbre y le aportó al equipo 12 goles en la actual edición del torneo. En el medio, rechazó al Atlético de Madrid que quiso repatriarlo y se ganó el respaldo absoluto de los riverplatenses.
Nicolás Mirelman
As
A mediados de 2017, primero Sebastián Driussi y luego Lucas Alario se marcharon de Núñez y dejaron un vacío difícil de llenar en la delantera. Los dos atacantes que habían conformado una dupla aceitada y temible para todos los rivales partían al fútbol europeo y Marcelo Gallardo tenía el desafío de reemplazarlos en medio de una Copa Libertadores.
Al desembarco de un futbolista de probada capacidad y experiencia como Ignacio Scocco, entonces, se sumó una cara desconocida, más vinculada a una apuesta a futuro que a una solución inmediata. En silencio y de manera casi repentina, se cerró la incorporación de Rafael Santos Borré.
"Trato de jugar por todo el frente de ataque, tener libertad para moverme constantemente y así crearle opciones al equipo", se describió a sí mismo el colombiano por el que el Millonario había pagado casi 3,5 millones de dólares para adquirir el 50 por ciento de la ficha. Una cifra que parecía exagerada para un extraño en el fútbol argentino y que incluso generó cuestionamientos por parte de algunos hinchas.
En lo que quedaba de ese año, el entrenador casi no contó con su nueva carta ofensiva, que apenas fue titular en ocho encuentros, pese a que River llegó a instancias decisivas en todas las competiciones que estaba disputando.
Con el tiempo, quedó claro que el Muñeco estaba puliendo detalles de un jugador que tenía las condiciones necesarias para adaptarse al estilo que pretendía. A partir de 2018, el Máquina mostró su mejor cara: goles determinantes, mayor confianza en sí mismo y mucho compromiso para ser el primer engranaje de la presión asfixiante del equipo. Estuvo desde el arranque en la ida de la final histórica en La Bombonera, pero no pudo jugar en la revancha en Madrid por acumulación de amonestaciones.
Tras un discreto primer semestre de 2019, volvió a destacarse en las fases finales de la Copa: marcó en cuartos de final contra Cerro Porteño, en semifinales ante Boca y también en la final frente a Flamengo, aunque no alcanzó para conseguir el título. Mientras tanto, acrecentaba su racha goleadora en el plano local.
De ser un juvenil con proyección que no había podido aclimatarse al fútbol europeo pasó a ser una pieza insustituible de uno de los mejores equipos de Sudamérica. Para eso, Rafa trabajó en su serenidad para definir, en su concentración para evitar la posición adelantada, en su técnica para retrasarse e integrarse al circuito de juego. Explotó al máximo sus virtudes y atenuó todo lo posible sus falencias.
Escudo/Bandera River Plate
River Plate
Argentina
Noticias Estadísticas
Su ya tradicional festejo de "Comandante" se convirtió en una sana costumbre y le aportó al equipo 12 goles en la actual edición del torneo. En el medio, rechazó al Atlético de Madrid que quiso repatriarlo y se ganó el respaldo absoluto de los riverplatenses.