Asamblea suspende interpelación; observan que es estrategia electoral
Los asambleístas atribuyeron la medida a la emergencia por el coronavirus. Politólogos y algunos políticos aseguran que el MAS y Juntos buscan polarizar el voto. Apuntan al electorado de El Alto y a los anti-Evo
Marco Antonio Chuquimia Huallpa
El Deber
La Asamblea Legislativa Plurinacional suspendió las sesiones y los actos de interpelación a los cinco ministros de Estado que estaban en la lista para comparecer entre ayer (viernes) y el lunes de la próxima semana. Los asambleístas atribuyeron la decisión a la emergencia por el coronavirus, pero algunos legisladores y analistas consideran que forma parte de la estrategia política del MAS y Juntos para posicionar a sus respectivos candidatos para las elecciones del próximo 3 de mayo.
El diputado Amílcar Barral, de UD, admitió que con estos mecanismos legislativos se están identificando los bloques electorales de cara al 3 de mayo.
“En medio de esta ‘interpelatitis’ y contraofensivas aparecen ellos (MAS y Juntos) como los únicos actores protagónicos en el campo político, invisibilizando a todos los competidores de la campaña, porque no hay que perder de vista que la presidenta aún puede aprovechar para sacar rédito ante su electorado”, dijo la exparlamentaria y analista Érika Brockmann.
Ayer, estaba previsto el segundo acto de interpelación contra otros dos ministros, el de Gobierno, Arturo Murillo, que viajó a Ecuador, y el de Defensa, Luis Fernando López, por los hechos ocurridos en Senkata (El Alto) y Sacaba (trópico de Cochabamba) durante los conflictos de octubre y noviembre del año pasado. La interpelación fue postergada para el 31 de marzo a las 9:00. Hace tres días el MAS convocó a tres ministras, que tampoco asistieron y decidió el archivo de esas interpelaciones. Quedan pendientes otras contra el titular de Obras Públicas, Iván Arias; la canciller Karen Longaric, y el de la Presidencia, Yerko Núñez.
El presidente de la Cámara de Diputados, Sergio Choque, negó que sea una actitud política del MAS y aseguró que las convocatorias a ministros están previstas en la misma Constitución Política del Estado (CPE) y que por eso fueron convocados. Cuando fue consultado por qué diez convocatorias en dos semanas, responsabilizó a su correligionaria senadora Eva Copa de convocar a sesiones.
El analista Ludwing Valverde recordó que el MAS tenía otros mecanismos parlamentarios para convocar a los ministros, como las peticiones de informe escrito u oral; pero en vez de eso apeló directamente a las interpelaciones y llevar a los ministros para censurarlos, como ocurrió con el ministro López, que fue destituido y luego posesionado por Jeanine Áñez.
Las estrategias
Los analistas también observan que los dos bloques, Juntos y el MAS, están definiendo sus respectivos electorados, aunque en esta pugna también ingresaría Comunidad Ciudadana (CC), de Carlos Mesa, que no tiene representación parlamentaria.
El politólogo Marcelo Silva explicó que los tres partidos tienen estrategias claras. El MAS, que perdió mucho electorado en la mayoría de los departamentos, ahora quiere concentrar su fuerza en los sectores rurales, las zonas periurbanas de las ciudades y El Alto, principalmente, que se convierte en el último reducto de zona urbana que puede ser leal en el voto.
Por esa razón, explicó, apela a hechos como Senkata o Sacaba que se convierten en la bandera política para aumentar su electorado en esas zonas.
En el otro frente están Juntos y CC, que tienen dos características regionales, principalmente. En el caso de Juntos, sus candidatos quieren capturar el voto duro contra el MAS, de ese modo pretenden capitalizar la preferencia. En cambio, Mesa estaría detrás del voto intelectual y de occidente porque es muy difícil que CC tenga una fuerte presencia en el oriente del país.
Marco Antonio Chuquimia Huallpa
El Deber
La Asamblea Legislativa Plurinacional suspendió las sesiones y los actos de interpelación a los cinco ministros de Estado que estaban en la lista para comparecer entre ayer (viernes) y el lunes de la próxima semana. Los asambleístas atribuyeron la decisión a la emergencia por el coronavirus, pero algunos legisladores y analistas consideran que forma parte de la estrategia política del MAS y Juntos para posicionar a sus respectivos candidatos para las elecciones del próximo 3 de mayo.
El diputado Amílcar Barral, de UD, admitió que con estos mecanismos legislativos se están identificando los bloques electorales de cara al 3 de mayo.
“En medio de esta ‘interpelatitis’ y contraofensivas aparecen ellos (MAS y Juntos) como los únicos actores protagónicos en el campo político, invisibilizando a todos los competidores de la campaña, porque no hay que perder de vista que la presidenta aún puede aprovechar para sacar rédito ante su electorado”, dijo la exparlamentaria y analista Érika Brockmann.
Ayer, estaba previsto el segundo acto de interpelación contra otros dos ministros, el de Gobierno, Arturo Murillo, que viajó a Ecuador, y el de Defensa, Luis Fernando López, por los hechos ocurridos en Senkata (El Alto) y Sacaba (trópico de Cochabamba) durante los conflictos de octubre y noviembre del año pasado. La interpelación fue postergada para el 31 de marzo a las 9:00. Hace tres días el MAS convocó a tres ministras, que tampoco asistieron y decidió el archivo de esas interpelaciones. Quedan pendientes otras contra el titular de Obras Públicas, Iván Arias; la canciller Karen Longaric, y el de la Presidencia, Yerko Núñez.
El presidente de la Cámara de Diputados, Sergio Choque, negó que sea una actitud política del MAS y aseguró que las convocatorias a ministros están previstas en la misma Constitución Política del Estado (CPE) y que por eso fueron convocados. Cuando fue consultado por qué diez convocatorias en dos semanas, responsabilizó a su correligionaria senadora Eva Copa de convocar a sesiones.
El analista Ludwing Valverde recordó que el MAS tenía otros mecanismos parlamentarios para convocar a los ministros, como las peticiones de informe escrito u oral; pero en vez de eso apeló directamente a las interpelaciones y llevar a los ministros para censurarlos, como ocurrió con el ministro López, que fue destituido y luego posesionado por Jeanine Áñez.
Las estrategias
Los analistas también observan que los dos bloques, Juntos y el MAS, están definiendo sus respectivos electorados, aunque en esta pugna también ingresaría Comunidad Ciudadana (CC), de Carlos Mesa, que no tiene representación parlamentaria.
El politólogo Marcelo Silva explicó que los tres partidos tienen estrategias claras. El MAS, que perdió mucho electorado en la mayoría de los departamentos, ahora quiere concentrar su fuerza en los sectores rurales, las zonas periurbanas de las ciudades y El Alto, principalmente, que se convierte en el último reducto de zona urbana que puede ser leal en el voto.
Por esa razón, explicó, apela a hechos como Senkata o Sacaba que se convierten en la bandera política para aumentar su electorado en esas zonas.
En el otro frente están Juntos y CC, que tienen dos características regionales, principalmente. En el caso de Juntos, sus candidatos quieren capturar el voto duro contra el MAS, de ese modo pretenden capitalizar la preferencia. En cambio, Mesa estaría detrás del voto intelectual y de occidente porque es muy difícil que CC tenga una fuerte presencia en el oriente del país.