Arrestaron a una brasileña que simuló tener coronavirus
De 39 años, Claudete María Rosa da Silva llegó a decir que acababa de regresar desde Hong Kong para ser atendida. Su familia la desmintió
Infobae
Una brasileña fue arrestada en Río de Janeiro después de haber simulado tener coronavirus para que la atiendan con prioridad en una clínica médica, dijo este sábado la policía local.
El comisario a cargo del caso explicó que Claudete Maria Rosa da Silva, de 39 años, se presentó el viernes por la noche en un centro de salud del barrio de Copacabana diciendo que sufría los síntomas del nuevo coronavirus.
Para tratar de convencer a sus interlocutores, esta residente de Río dijo que acababa de regresar de Hong Kong, donde había trabajado como niñera.
El equipo médico se puso inmediatamente en alerta, movilizando a muchos profesionales de la salud durante varias horas.
La paciente fue llevada a una habitación aislada y sometida a una batería completa de exámenes. Incluso se advirtió al Ministerio de Salud, según lo previsto en el protocolo establecido por las autoridades sanitarias.
Pero Da Silva terminó siendo arrestada por la policía, después de que miembros de su familia revelaron que nunca había salido de Brasil y ni siquiera tenía pasaporte.
El nuevo coronavirus ha infectado a más de 34.500 personas y matado a 722 pacientes en China continental, y desde hace varias semanas la Organización Mundial de la Salud calificó el contagio del virus de emergencia internacional.
La cifra ahora es más alta que la del virus del Síndrome Respiratorio Agudo Severo (SARS), que dejó casi 650 personas muertas en China continental y Hong Kong en 2002-2003.
El jueves, la muerte el jueves del médico que alertó del nuevo coronavirus sacudió a la opinión pública china y obligó este viernes a las autoridades a reaccionar, mientras que la OMS advertía de la escasez de material contra la epidemia.
El oftalmólogo Li Wenliang, de 34 años y que trabajaba en Wuhan, alertó a finales de diciembre sobre la aparición del virus en esa ciudad. Fue sancionado por ello. Su muerte, a causa de la infección, provocó duros comentarios en las redes sociales.
Actualmente en China, unos 56 millones de ciudadanos están virtualmente retenidos en sus domicilios.
En el resto del mundo se han confirmado más de 300 casos de contagio en unos 30 países y territorios, dos de ellos mortales en Hong Kong y Filipinas.
Aún no se ha confirmado ningún caso en América Latina. Una treintena de brasileños que estaban en Wuhan -epicentro de la epidemia- salieron de China el viernes y se espera que lleguen el domingo por la mañana a Anapolis, a 80 km de Brasilia, donde permanecerán aislados durante 18 días en una base militar.
Una brasileña fue arrestada en Río de Janeiro después de haber simulado tener coronavirus para que la atiendan con prioridad en una clínica médica, dijo este sábado la policía local.
El comisario a cargo del caso explicó que Claudete Maria Rosa da Silva, de 39 años, se presentó el viernes por la noche en un centro de salud del barrio de Copacabana diciendo que sufría los síntomas del nuevo coronavirus.
Para tratar de convencer a sus interlocutores, esta residente de Río dijo que acababa de regresar de Hong Kong, donde había trabajado como niñera.
El equipo médico se puso inmediatamente en alerta, movilizando a muchos profesionales de la salud durante varias horas.
La paciente fue llevada a una habitación aislada y sometida a una batería completa de exámenes. Incluso se advirtió al Ministerio de Salud, según lo previsto en el protocolo establecido por las autoridades sanitarias.
Pero Da Silva terminó siendo arrestada por la policía, después de que miembros de su familia revelaron que nunca había salido de Brasil y ni siquiera tenía pasaporte.
El nuevo coronavirus ha infectado a más de 34.500 personas y matado a 722 pacientes en China continental, y desde hace varias semanas la Organización Mundial de la Salud calificó el contagio del virus de emergencia internacional.
La cifra ahora es más alta que la del virus del Síndrome Respiratorio Agudo Severo (SARS), que dejó casi 650 personas muertas en China continental y Hong Kong en 2002-2003.
El jueves, la muerte el jueves del médico que alertó del nuevo coronavirus sacudió a la opinión pública china y obligó este viernes a las autoridades a reaccionar, mientras que la OMS advertía de la escasez de material contra la epidemia.
El oftalmólogo Li Wenliang, de 34 años y que trabajaba en Wuhan, alertó a finales de diciembre sobre la aparición del virus en esa ciudad. Fue sancionado por ello. Su muerte, a causa de la infección, provocó duros comentarios en las redes sociales.
Actualmente en China, unos 56 millones de ciudadanos están virtualmente retenidos en sus domicilios.
En el resto del mundo se han confirmado más de 300 casos de contagio en unos 30 países y territorios, dos de ellos mortales en Hong Kong y Filipinas.
Aún no se ha confirmado ningún caso en América Latina. Una treintena de brasileños que estaban en Wuhan -epicentro de la epidemia- salieron de China el viernes y se espera que lleguen el domingo por la mañana a Anapolis, a 80 km de Brasilia, donde permanecerán aislados durante 18 días en una base militar.
